El 5 y 6 de diciembre de 2017, la Unidad de Salud Mental y Uso de Sustancias de la Organización Panamericana de la Salud convocó a un grupo de expertos internacionales en Washington D.C. para abordar el tema de la desinstitucionalización. Los objetivos de la reunión fueron identificar estrategias, experiencias y sugerencias para promover y potenciar este proceso en las Américas, y detectar otras posibles estrategias y acciones que permitan continuar en forma efectiva con la reducción de camas en los hospitales psiquiátricos.
Participaron profesionales de la Región, representando a algunos de los países que han liderado procesos de desinstitucionalización y reorganización de servicios de salud mental a escala nacional, tanto de los que cuentan con una experiencia de muchos años (Brasil y Chile), como de los que han realizado esfuerzos en tal sentido recientemente (Perú y República Dominicana).
En América Latina y el Caribe, la media del porcentaje del presupuesto de salud dedicado a la salud mental es 2,1%, de los cuales más del 80% se destina a los hospitales psiquiátricos, que a su vez sirven solo a un 10 % de la población que recibe atención en salud mental. Casi tres décadas después de la firma de la Declaración de Caracas, en la cual los representantes de los países se comprometieron a promover la superación del modelo de servicios basados en el hospital psiquiátrico y promover el desarrollo de servicios de salud mental a nivel comunitario, el estado de los servicios de salud mental continúa siendo muy preocupante. Aún en aquellos países en los cuales se ha avanzado, existe con frecuencia una amenaza de retroceder.
Los participantes revisaron la situación de los servicios de salud mental en las Américas, identificando futuros pasos a seguir para promover y avanzar en el proceso de desinstitucionalización en la Región. El grupo acordó un plan de trabajo, el cual incluye diversas acciones que se realizarán durante 2018 para trabajar coordinadamente en estrategias que permitan superar de manera sostenible el modelo de servicios existente y a la vez para promover la lucha contra los abusos y la discriminación sufridos por las personas con problemas de salud mental.