La Paz, 27 de septiembre de 2024 (OPS)- En Bolivia se encuentra uno de los focos de fascioliasis del mundo, por lo que se considera un problema de salud pública de alta importancia. Para avanzar en la eliminación de la fasciola hepática en el territorio, los 18 municipios endémicos elaboraron micro planes para la Administración Masiva de Medicamentos (AMM) en establecimientos de salud de cuatro redes de salud del Altiplano boliviano.
Este fue el resultado del “taller en micro planificación para la Administración Masiva de Medicamentos para eliminar la fascioliasis como problema de salud pública en Bolivia” organizado de manera conjunta entre el Ministerio de Salud y Deportes (MSyD), el Servicio Departamental de Salud (SEDES) de La Paz y la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).
Contó con la participación de responsables de Redes de Salud del departamento de La Paz; autoridades de salud pública de los 18 municipios endémicos; personal del Programa Nacional de Enfermedades Zoonóticas Ofidios y Ponzoñosos del MSyD, técnicos del SEDES La Paz y consultores internacionales de la OPS/OMS. La capacitación consistió en un proceso conjunto de construcción de los micro planes a nivel de establecimiento de salud para la administración masiva de medicamentos.
El compromiso de los organizadores fue el de apoyar y acompañar las acciones necesarias para eliminar la fasciola hepática como problema de salud pública en Bolivia. La OPS señala que las áreas endémicas de la fasciola hepática se distribuyen en todo el mundo, pero algunas de las comunidades más afectadas se encuentran en la zona andina de América del Sur.
Desde 2007, la OPS/OMS apoya al Ministerio de Salud y Deportes en la adquisición por donación y distribución del medicamento triclabenzadol para el control de la fascioliasis humana, en coordinación con el SEDES La Paz en comunidades priorizadas; en la campaña de desparasitación masiva contra la fasciola hepática de la gestión 2023 se alcanzó una cobertura del 94,2%. El triclabendazol es el único medicamento recomendado para la prevención y tratamiento de la fascioliasis.
La micro planificación
Este año, el MSyD y el SEDES La Paz iniciaron la planificación para la campaña de desparasitación masiva contra la fasciola hepática, con la introducción de la micro planificación. Con este fin, la OPS/OMS cooperó con la presencia de la experta internacional en micro planificación Dra. Ana Morice quien proporcionó elementos operativos, paso a paso, con los que el personal de salud fue construyendo sus micro planes con base en la información estadística, geográfica y contextual de su área de trabajo.
Morice expuso y luego desarrolló el proceso. Dijo que “la micro planificación para la administración masiva de medicamentos consta de seis pasos: 1) Preparar el mapa operacional; 2) Calcular y caracterizar las poblaciones meta; 3) Seleccionar los canales de distribución de medicamentos; 4) Planear las actividades para captar y tratar las poblaciones meta; 5) Calcular los recursos y definir la logística; y, finalmente, 6) Monitorear la cobertura y usar los datos para la acción”.
El proceso de elaboración de los micro planes fue participativo y reflexivo, buscando identificar los datos que deben contener estos instrumentos, sino, también, los aspectos que aseguren el éxito de la Administración Masiva de Medicamentos (AMM) como la consolidación de las alianzas estratégicas con los actores relevantes como los gobiernos municipales, las unidades educativas y las organizaciones sociales, considerando el contexto y las particularidades de la población como la lengua nativa y las prácticas culturales; así como también la logística y los recursos con los que cuentan para el desarrollo del proceso de AMM.
El impacto de la fasciola
La asesora de regional de Enfermedades Infecciosas Desatendidas, Tropicales y Transmitidas por Vectores (EID-VT) de la OPS, Dra. Ana Luciañez, recordó que “la fascioliasis es una enfermedad parasitaria animal (principalmente de rumiantes, pero también de cerdos, burros, llamas y alpacas) que puede ser transmitida a los seres humanos. Es una trematodiasis de transmisión alimentaria causadas por gusanos trematodos (también conocidos como "duelas")”.
Luciañez enfatizó que la infección se adquiere cuando se ingieren, cruda o mal cocidas, plantas acuáticas o semiacuáticas (particularmente berros, alfalfa, lechuga, y espinaca) que tienen adheridas las larvas del parásito apegados al tallo o a las hojas. Una vez en el cuerpo humano, el gusano se alberga en los principales conductos biliares. Esta parasitosis causa enfermedades hepáticas y pulmonares graves.
Por su parte, el jefe del Programa Nacional de Enfermedades Zoonóticas Ofidios y Ponzoñosos del MSyD, Grover Paredes, señaló que se han identificado comunidades con infección en el ganado de hasta 100% e infección humana en alrededor del 70% en los municipios de Achacachi, Ancoraimes, Chua Cocani, Santiago de Huata, Huatajata, Viacha, Achocalla, Pucarani, Batallas, Puerto Perez, Copacabana, Guaqui, Jesus de Machaca, Laja, Taraco, Tiahuanaco, Huarina y San Andrés de Machaca.
Rumbo a la eliminación
Por tanto, el taller desarrollado en La Paz tuvo por objetivos capacitar a los equipos del nivel nacional, subnacional (SEDES) y municipal en los pasos y herramientas de microplanificación para la implementación de la Administración Masiva de Medicamentos (AMM); y la elaboración de microplanes para la AMM en los municipios con el fin de establecer las tácticas más eficientes para tratar a la población meta, cumplir el plan de actividades, logística y recursos e instrumentos para monitorear el avance y logro de las coberturas de triclabendazol.
La fasciola se encuentra en la lista de enfermades de la Iniciativa de Eliminación de Enfermedades Transmisibles para el 2030 que la OPS impulsa junto a los Estados Miembros de la Organización.
La eliminación de la fasciola hepática en Bolivia se considera prioritario porque afecta a las personas y, en especial, a los niños con infecciones agudas y crónicas, como la anemia, ictericia, daño a conductos biliares, y consecuencias como la anemia y el retraso en crecimiento; provoca también la mortalidad en animales como bovinos, camélidos, porcinos, ovinos y otras especies afectando la economía de las familias del altiplano boliviano.