Washington D.C., 29 de agosto de 2024 – La Organización Panamericana de la Salud (OPS) junto a puntos focales de 16 Ministerios de Salud de Latinoamérica se reunieron para presentar los avances de los países en el fortalecimiento de los sistemas de salud en la respuesta a la violencia contra las mujeres. Los países participantes fueron Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay.
La reunión de tres días se llevó a cabo con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), y formó parte de la Estrategia y Plan de acción para el fortalecimiento de los sistemas de salud en la respuesta a la violencia contra las mujeres de la OPS, para el periodo 2015-2025. La Estrategia subraya el rol fundamental del sistema de salud en respuesta a la violencia.
“Esta reunión representa un hito importante en nuestra colaboración con la AECID, destinada a fortalecer el acceso a los sistemas de salud para las sobrevivientes de violencia contra las mujeres en América Latina. Con el apoyo de España, la OPS ha trabajado para impulsar un conjunto de herramientas innovadoras para mejorar los protocolos de los sistemas de salud, mejorar la capacitación disponible para el personal de la salud y fortalecer los datos administrativos de salud sobre la violencia contra las mujeres”, destacó Rhonda Sealey-Thomas, subdirectora de la OPS.
Durante la reunión se realizaron diferentes paneles que abordaron desde la revisión de políticas y actualización de protocolos clínicos hasta paneles sobre el fortalecimiento de sistemas de información y estrategias multisectoriales. También hubo sesiones de trabajo en grupo para identificar oportunidades de mejora y definir acciones concretas.
La Embajadora Carmen Montón, Observadora Permanente de España ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), quién participó en la sesión de apertura, enfatizó en la importancia de la detección temprana desde los servicios sanitarios. “La magnitud de la violencia contra las mujeres y el impacto que provoca en su salud (como en la de sus hijas e hijos), justifica la necesidad de incorporar herramientas sencillas que puedan usarse de forma rutinaria en los servicios de salud con el propósito de contribuir a dicha detección temprana”, agregó.
Participantes de los países identificaron una serie de acciones concretas y herramientas necesarias para promover el acceso a los sistemas de salud para las mujeres y las niñas en toda su diversidad. El intercambio de experiencias es fundamental para promover el diálogo y la colaboración entre los Estados Miembros, lo que permite identificar las mejores prácticas y adaptar las estrategias más efectivas a los contextos locales.
“La participación de los países en esta reunión es esencial para avanzar en el tramo final de la implementación de esta estrategia ya que se compartieron avances, lecciones aprendidas y desafíos, enriqueciendo el conocimiento colectivo y fortaleciendo la respuesta del sector salud a la violencia contra las mujeres”, agregó Rhonda Sealey-Thomas.
Para más información y actualizaciones sobre la reunión, visite nuestra sección dedicada a la reunión en el sitio web de la OPS.