La comunicación de riesgo es entendida como aquel proceso e intervención que busca que toda persona en riesgo sea capaz de tomar decisiones informadas para mitigar los efectos de una amenaza (riesgo), y adopte medidas para protegerse.
La Paz, Bolivia, 24 de junio de 2020 (OPS)- La Organización Panamericana de la Salud (OPS) colaboró al Ministerio de Salud y otras instancias del Estado Plurinacional de Bolivia en el desarrollo de acciones de comunicación de riesgo enmarcadas en el Reglamento Sanitario Internacional (RSI) y lineamientos globales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la respuesta, prevención y control del COVID-19.
Dentro del contexto de la implementación de la estrategia nacional de respuesta, brindó asesoramiento técnico en comunicación de riesgo multinivel, multisectorial y multiactor, enfatizando la coordinación con socios y aliados; la comunicación pública; la participación de la comunidad; el abordaje de la incertidumbre, las percepciones de riesgo y la gestión de la desinformación; e impulsando el fortalecimiento de capacidades.
La comunicación de riesgo es entendida como aquel proceso e intervención que busca que toda persona en riesgo sea capaz de tomar decisiones informadas para mitigar los efectos de una amenaza (riesgo), y adopte medidas para protegerse. Como señala la Guía para Líderes de la OPS “El brote diseminado de enfermedad por el coronavirus 2019 (COVID-19) en la provincia de Hubei, en China, y la introducción del virus en la Región de las Américas ponen de relieve la urgente necesidad de una comunicación clara, honesta, concisa y coherente”.
En ese sentido, la OPS puso en relieve en sus orientaciones en Bolivia que la comunicación de riesgos abarca todas las cuestiones básicas de la comunicación para la salud, pero difiere en la necesidad de velocidad y la dependencia de la confianza. “En los momentos de crisis, se insta a los líderes a que den una respuesta rápida, sentida y confiable. El público quiere saber qué se conoce, qué se está haciendo al respecto y lo que ellos pueden o deben hacer”, dice el lineamiento de OPS.
Alianzas estratégicas
Bajo este paraguas, la OPS concretó en Bolivia varias alianzas estratégicas con una diversidad de actores y tomadores de decisión nacionales y locales para el fortalecimiento de la comunicación, con resultados concretos como el impulso para la creación de la página web Bolivia Segura www.boliviasegura.gob.bo; la ejecución de campañas conjuntas con medios de comunicación como la Red de televisión UNITEL para la elaboración de materiales y mensajes clave de prevención y autoprotección; así como asesoró al Ministerio de Comunicación en el diseño de paquetes de mensajes clave preventivos para diversas audiencias, multimediáticos, en idiomas oficiales del Estado (español, quechua, aymara y guaraní) y en lenguaje de señas.
Comunicación pública y gestión de las percepciones
Brindó amplias explicaciones pedagógicas sobre el comportamiento de la pandemia e instó a los tomadores de decisión a asumir diversidad de medidas de prevención. OPS proporcionó permanente información, basada en la evidencia, a través de múltiples canales y medios de comunicación en Bolivia.
A través de diálogos con la comunidad y con sectores escuchó las percepciones ciudadanas; promovió la creación del call center de atención ciudadana; levantó encuestas rápidas de percepción de riesgo e hizo análisis de situación de riesgo regionales, apelando a sondeos de opinión pública y a entrevistas en profundidad a informantes clave.
Desde el principio de la pandemia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) consideró que, además de enfrentarse a una pandemia, en el caso de la COVID-19 el mundo se enfrenta también a lo que denomina una “infodemia”, una cantidad excesiva de información sobre el problema que dificulta encontrar una solución. La Guía para periodistas de la OPS – Consejos para Informar COVID-19 dice que: “Durante la emergencia de salud, las infodemias pueden difundir errores, desinformación y rumores. También pueden obstaculizar una respuesta efectiva, así como crear confusión y desconfianza en las personas con respecto a las soluciones o los consejos que se plantean para prevenir la enfermedad”.
En ese marco, la Oficina país de la OPS en Bolivia apoyó e impulsó junto al Sistema de Naciones Unidas, en alianza con el Ministerio de Comunicación y la Fundación para el Periodismo, la creación de una sección dentro del medio digital sin fines de lucro Bolivia verifica para buscar, identificar, monitorear, analizar, denunciar y/o desmentir información falsa y rumores en torno a COVID-19 en el país. Para conocerla sigue el siguiente enlace: https://boliviaverifica.bo/coronavirus/
Fortalecimiento de capacidades
Sabiendo la importancia del fortalecimiento de las capacidades, brindó sesiones de transmisión de conocimientos, intercambio de criterios y capacitación de comunicación de riesgo entre comunicadores, gremios de la prensa local y nacional, comunicadores comunitarios y personal de salud. Socializó la Guía para periodistas de la OPS, facilitó talleres sobre periodismo y COVID-19 y generó una guía de mensajes clave sobre COVID-19 para comunicadores populares, periodistas y líderes comunitarios bolivianos.
La comunicación de riesgos es un componente integral de la gestión de riesgos para la salud pública y una capacidad básica en el marco del RSI. Una comunicación oportuna y transparente, con información correcta y basada en evidencias, pero también honesta y franca, con empatía y comprensión por las preocupaciones del público, es fundamental para que las personas conozcan los riesgos de la COVID-19 y sigan las recomendaciones de las autoridades para proteger su salud y la de sus seres queridos.
Fortalecer las capacidades de los periodistas y de los comunicadores fue fundamental para la comprensión de la pandemia por COVID-19.