Buenos Aires, 8 de noviembre de 2012 (OPS/OMS).- Expertos de América participan este jueves y viernes en Buenos Aires de un taller para el desarrollo de un marco regional de monitoreo de cobertura y evaluación de impacto de la vacunación contra el virus del papiloma humano (VPH) para prevenir el cáncer de cuello de útero, del que se registran unos 4.000 nuevos casos cada año en Argentina.
Los funcionarios y especialistas participan del encuentro en el Instituto Malbrán con el objetivo de revisar los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre monitoreo de cobertura y evaluación de impacto de vacunación contra el VPH, y su relación con los serotipos existentes de virus que son responsables del cáncer del cuello del útero, compartir experiencias de países, identificar capacidades instaladas y oportunidades en la región para implementar sistemas de evaluación de impacto y esbozar un marco regional de monitoreo.
Los asistentes —procedentes de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, México, con presencia de técnicos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), de la OMS y del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Atlanta (Estados Unidos)- también analizarán la situación del VPH en América y el papel de las redes regionales de laboratorios que trabajan en la prevención del cáncer de cuello de útero, que afecta principalmente a las mujeres entre 35 y 64 años.
"Los resultados de esta jornada permitirán a los países que han adherido a la vacunación en contra del VPH diseñar con mucha anticipación un sistema de evaluación que permita acortar el tiempo necesario para evaluar el impacto de la vacuna en la disminución de la patología de cáncer cérvico-uterino, que solo se podrá contabilizar luego de casi 20 años", señaló el representante de la OPS en Argentina, Pier Paolo Balladelli.
En Argentina este tipo de cáncer es el segundo más diagnosticado en mujeres y se estima que cada año se registran alrededor de 4.000 casos nuevos y mueren aproximadamente 1.800 mujeres a causa de esta enfermedad, a pesar de que puede prevenirse mediante de la realización periódica del Papanicolaou (PAP), un examen sencillo, que no produce dolor y se realiza de manera gratuita en los centros de salud y hospitales de todo el país.
La enfermedad está asociada además a determinantes sociales de la salud, como la pobreza. En los últimos años, la comprobación de la relación causal entre el virus del papiloma humano y el cáncer cervical ha permitido el desarrollo de nuevas tecnologías para la prevención, como la vacuna contra el VPH y el test de VPH, una técnica de biología molecular para el tamizaje.
En nuestro país, la vacuna contra el VPH fue incorporada al Calendario Nacional de Vacunación en 2011, con aplicación gratuita y obligatoria para las niñas de 11 años. La misma protege contra dos tipos de VPH de alto riesgo oncogénico, responsables del 77% de los casos de cáncer de cuello uterino.
Cifras del cáncer cérvico-uterino en Argentina:
- En Argentina, como en la mayoría de los países en desarrollo, el de cuello de útero es el segundo cáncer más diagnosticado entre las mujeres, con una incidencia de 17 casos por cada 100.000 mujeres.
- Se diagnostican alrededor de 4.000 casos nuevos por año y mueren 1.800 mujeres por esta enfermedad, a pesar de que se puede prevenir muy fácilmente con un PAP y el seguimiento y tratamiento adecuado.
- El 82% de las muertes ocurre en mujeres mayores de 40 años.
- La tasa de mortalidad por cáncer de cuello uterino en el país es de 7,1 cada 100.000 mujeres.
- Se presenta una gran diferencia en la tasa de mortalidad entre diferentes provincias. La ciudad de Buenos Aires y La Pampa están entre las que tienen un índice más bajo (3,7 y 5 cada 100.000 respectivamente), mientras que Salta y Formosa son los lugares en donde se da una mayor mortalidad (15,8 y 15,6 respectivamente).
- El 100 por ciento de los cánceres de cuello de útero son producidos por VPH de alto riesgo oncogénico.
- En la mayoría de los casos, sobre todo en las mujeres más jóvenes, las infecciones por VPH de alto riesgo oncogénico son transitorias y remiten solas sin producir ninguna displasia (alteración en las células cervicales). Se estima que sólo el 5 por ciento de las mujeres infectadas con alguno de estos tipos de VPH contraen infecciones persistentes, las cuales pueden generar las lesiones de alto grado y carcinomas.