La Habana, 21 de octubre de 2016 (OPS/OMS)- Delegaciones de más de 30 países acordaron hoy impulsar una serie de medidas prioritarias para prevenir y controlar los arbovirus, un grupo de virus transmitidos por mosquitos, como el zika, dengue y chikungunya. Estas medidas incluyen el fortalecimiento de los sistemas de vigilancia epidemiológica de todos estos virus y de la capacidad de diagnosticar los distintos virus, así como formar al personal de salud para detectar estas enfermedades en el primer nivel de atención médica.
Las autoridades sanitarias se comprometieron también a "incentivar la voluntad política y financiera" para que se puedan realizar estas acciones, plasmadas en el llamado "Consenso de La Habana". Con este consenso se concluyó el debate de dos días entre las autoridades de salud de las Américas, convocado por la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) y el Ministerio de Salud Pública de Cuba. Las acciones pondrán en práctica la estrategia para abordar los arbovirus en las Américas, aprobada en octubre por los ministros de Salud en el 55.o Consejo Directivo de la OPS.
"Que el consenso de la Habana sea el punto que marque el declive definitivo de las enfermedades arbovirales en nuestra región", pidió ayer la directora de la OPS/OMS, Carissa F. Etienne, al abrir la reunión. "Se necesita para ello que todos se involucren; un liderazgo del sector salud, sí, pero con todos los sectores: educación, medioambiente, economía, la academia, todos" añadió.
Más de 500 millones de personas viven en las Américas en lugares donde pueden contraer algún tipo de arbovirus como el zika, dengue o chikungunya, porque está presente el mosquito Aedes Aegypti que los transmite, advirtió Sylvain Aldighieri, director adjunto interino de Emergencias de la OPS/OMS. Añadió que la región enfrenta el riesgo de que se reintroduzcan virus como el de la fiebre amarilla, y que es necesario vigilar otros como el mayaro y oropuche, que están circulando o circularon antes en el área.
En el cierre del encuentro, Sylvia Mathews Burwell, secretaria de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, agradeció a Cuba y a la OPS por organizar la reunión. Explicó que su país está trabajando con organizaciones como la OPS/OMS en fortalecer la comunicación para cambiar el comportamiento y mejorar el diagnóstico de estos virus, pero también en el área científica para obtener vacunas. Indicó que están explorando la cooperación con países de América Latina y el Caribe en ese sentido.
"El zika es una amenaza a la salud que causa mucha preocupación a nuestras poblaciones. Pero con una respuesta efectiva y con alianzas, y con la colaboración de organizaciones multinacionales como la OMS y la OPS, se puede superar. Y eso empieza aquí, en este encuentro", indicó. Esta fue la primera visita oficial de la secretaria de Salud estadounidense a Cuba.
Por su parte, la ministra de Salud de Honduras, Yolani Batres, destacó que en estas reuniones "se rompen las fronteras" para trabajar todos juntos en acciones conjuntas. John Boyce, ministro de Salud de Barbados, afirmó: "Este es el comienzo de una nueva agenda en nuestra batalla contra la amenaza del Aedes y todas las enfermedades arbovirales que nos amenazan". Añadió que ahora se trata de implementar las medidas consensuadas y en eso será necesario la cooperación entre los países.
Puntos del Consenso de la Habana
En el Consenso de la Habana, las autoridades de salud de las Américas acordaron que los países fortalecerán su sistema de vigilancia epidemiológica, para poder reportar de manera específica de qué enfermedad arboviral se trata, cómo es la circulación del virus y cuál es el riesgo de que se introduzcan nuevos virus. Esto permitirá entender mejor la correlación entre cómo se manifiesta la enfermedad en el paciente, el virus, el vector y el ambiente donde circula para dar una respuesta oportuna a brotes.
Fortalecer las capacidades de diagnóstico y de los sistemas de gestión de calidad de los laboratorios, para hacer una buena vigilancia de los virus, es otro acuerdo, al que se suma el garantizar el funcionamiento y la operatividad de la Red de Laboratorios de Diagnóstico de Arbovirus en la región de las Américas (RELDA).
También se plantea capacitar en los servicios de salud, en particular en el primer nivel de atención médica (consultorios, policlínicas) para que la condición de los pacientes sea detectada a tiempo y así se prevengan muertes. Esta acción se complementa con el acuerdo para elaborar y actualizar las guías de manejo clínico, que deben estar a disposición de todo personal médico.
En materia de control de vectores, los delegados destacaron en la necesidad de capacitar a quienes llevan adelante los programas de control del mosquito y eliminación de sus criaderos, junto con el monitoreo y evaluación de estas actividades, incluyendo el uso adecuado de insecticidas. Además, se insta a trabajar con la población como eje fundamental en el control del mosquito.
El consenso de la Habana señala además la necesidad de impulsar una participación activa de las comunidad y garantizar el acceso a la información para que puedan asumir un papel activo en las medidas de prevención y control de estos virus que transmiten los mosquitos.