Washington, DC, 29 de septiembre de 2011 (OPS/OMS).- Autoridades sanitarias de las Américas aprobaron un plan de acción para incluir el consumo de sustancias psicoactivas como una prioridad de salud pública en los planes nacionales, en el marco del 51 Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), que se desarrolla esta semana en Washington, DC.
El Plan de Acción sobre el Consumo de Sustancias Psicoactivas y la Salud Pública busca reducir la carga del consumo de drogas y fortalecer una respuesta integrada de salud pública.
En ese sentido, las acciones de prevención deberán cubrir la detección, la intervención temprana, el tratamiento, la atención, la rehabilitación, la reintegración social y los servicios de apoyo para las personas con trastornos debidos al consumo de sustancias.
La prevalencia del consumo de drogas, especialmente en la juventud y en otros grupos vulnerables, es variable, pero en general está concentrada en zonas urbanas, señala la estrategia. Además del alcohol y el tabaco, las sustancias psicoactivas que más se consumen en la región son el cannabis, la cocaína y los solventes volátiles. Existe, asimismo, un consumo cada vez mayor de sustancias psicotrópicas sin fines terapéuticos.
La iniciativa contempla la necesidad de mejorar el acceso a los servicios de atención de salud y promover la salud y el bienestar social de las personas, las familias y las comunidades, al mismo tiempo que proteger y promover el derecho de todas las personas al goce del grado máximo de salud física y mental.
En 2010, el 50º Consejo Directivo de la OPS/OMS aprobó una estrategia regional de salud pública para responder a los problemas de salud asociados con el consumo de sustancias psicoactivas en la Región de las Américas. Esta estrategia, que ahora se retoma para el plan de acción, comprende cinco objetivos estratégicos: la formulación de políticas nacionales y la asignación de recursos; la promoción de la prevención universal; la intervención temprana y los sistemas de atención y tratamiento; la investigación, el seguimiento y la evaluación; y el fomento de las alianzas estratégicas.
La mayor parte de los países de las Américas tienen un número limitado de profesionales y servicios de salud especializados en el consumo de sustancias. La manera más factible de mejorar la cobertura del tratamiento es integrar los servicios de prevención y tratamiento de los trastornos debidos al consumo de sustancias en los sistemas de salud y de bienestar social, basados la atención primaria de salud y en el sistema de justicia penal para formar la capacidad de los profesionales y no profesionales pertinentes para brindar la atención adecuada.
Además, los medicamentos psicotrópicos deben reglamentarse y recetarse de la manera adecuada, a fin de reducir considerablemente su uso no terapéutico y aumentar su disponibilidad dónde y cuándo se necesitan.
El plan de acción aprobado, insta a los Estados Miembros de la OPS/OMS a:
- definir el consumo de sustancias psicoactivas como una prioridad de salud pública y ejecutar planes nacionales y subnacionales para abordar los problemas debidos al consumo de sustancias psicoactivas, que estén en consonancia con su repercusión para la salud pública, especialmente con respecto a la reducción de las lagunas existentes en el tratamiento;
- contribuir a que participen en el proceso de implementación del plan de acción.
La OPS/OMS dará seguimiento y evaluará la ejecución del plan de acción regional, y apoyará a los Estados Miembros a preparar y ejecutar los planes.
La OPS, fundada en 1902, trabaja con todos los países de las Américas para mejorar la salud y la calidad de vida de su gente. Es también la Oficina Regional de la Organización Mundial de la Salud.
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