Washington, D.C., 26 de septiembre del 2018 (OPS/OMS)—Los ministros de salud de todo el continente respaldaron una serie de medidas encaminadas a poner fin a las muertes evitables de mujeres, niños, niñas y adolescentes, garantizar su salud mental y bienestar físico a lo largo de su vida y ampliar los entornos propicios, de manera que nadie se quede atrás.
En el Plan de acción para la salud de la mujer, el niño, la niña y adolescentes 2018-2030, aprobado por el 56.o Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), se insta a abordar las causas inmediatas de la mortalidad, la morbilidad y la discapacidad prevenibles en mujeres, niños, niñas y adolescentes, así como sus determinantes subyacentes, en el marco de los derechos, el género, el curso de la vida y la diversidad cultural, a fin de promover el desarrollo, la salud y el bienestar positivos.
El plan, que se alinea a la estrategia global de la OMS en el tema, cuyos tres ejes son sobrevivir, prosperar y transformar, apunta a fortalecer la salud y reducir las inequidades en torno a ella.
En ese sentido, busca abordar las disparidades en el progreso de la salud de las mujeres, los niños, las niñas y los adolescentes en la Región, en particular entre ciertos grupos de la población y dentro de ellos. Los grupos indígenas, los afrodescendientes, aquellos con menor escolaridad, las personas de escasos recursos y los residentes en zonas rurales, así como algunos grupos de mujeres, niños, niñas y adolescentes, padecen sistemáticamente cargas mayores de mortalidad y morbilidad prevenibles.
“Aunque se han logrado avances en cuanto a la salud de las mujeres, los niños, las niñas y los adolescentes en la Región, ciertos grupos de la población siguen teniendo una mayor carga de mortalidad y morbilidad prevenibles”, indicó el doctor Andrés de Francisco, Director del Departamento de la OPS de Familia, Promoción de la Salud y Curso de Vida. “Considerando el conocimiento y la experiencia que hemos adquirido al reducir la mortalidad en general, ahora nos encontramos en una mejor posición para acelerar y ampliar los logros e incluir a quienes siguen quedando atrás”.
Para lograr que el progreso sea más uniforme, es necesario abordar temas como el acceso equitativo a la atención de salud, la ejecución de iniciativas de salud integradas que incluyan a las familias, las escuelas y las comunidades, y la elaboración de políticas para que las mujeres, los niños, las niñas y los adolescentes tengan la oportunidad de participar en el desarrollo de su propia salud.
En el plan se establece una serie de objetivos generales para la Región, entre los cuales se encuentran la reducción equitativa de la mortalidad materna y en la niñez, la reducción del embarazo precoz y el embarazo no deseado, y el aumento de la esperanza de vida sana de las mujeres. Para alcanzar estos objetivos, se proponen cuatro líneas estratégicas de acción:
- Fortalecer las políticas para reducir las inequidades en materia de salud en mujeres, niños, niñas y adolescentes, formulando políticas de salud integradas que tengan en cuenta cómo ocurren las inequidades en materia de salud.
- Promover la salud y el bienestar universales, efectivos y equitativos a lo largo del curso de la vida, para que las intervenciones de salud tengan visión de futuro y cimenten la buena salud en cada etapa de la vida, dentro de las familias, las escuelas, las comunidades y otros entornos sociales.
- Ampliar el acceso equitativo a servicios de salud amplios, integrales y de buena calidad, que se centren en los problemas que afectan a las mujeres, los niños, las niñas y los adolescentes.
- Fortalecer los sistemas de información para la recopilación y la disponibilidad de estadísticas y datos desglosados de salud para elaborar intervenciones más específicas y eficaces.
El plan también insta a invertir en mecanismos para empoderar a las personas, las familias y las comunidades para que se involucren activamente en la protección y la promoción de la salud de las mujeres, los niños, las niñas y los adolescentes, en particular de quienes se encuentren en situación de vulnerabilidad.
Entre los resultados previstos del plan de acción se encuentran los siguientes:
- El porcentaje de niños menores de 6 meses que son alimentados exclusivamente mediante la lactancia materna debería aumentar de 30,5% en el 2018 a 70% para el 2030.
- Dentro de 12 años, la mayor parte de los países de la Región tendrán un programa integral de salud escolar.
- Para 2030, al menos 90% de las mujeres y adolescentes en edad reproductiva deberían tener satisfechas sus necesidades de planificación familiar con métodos anticonceptivos modernos y de buena calidad.
- Todos los países y territorios de la Región habrán introducido la vacuna contra el VPH en su programa de vacunación en el próximo decenio.
Enlaces
— Plan de acción para la salud de la mujer, el niño, la niña y adolescentes 2018-2030
— Estrategia mundial para la salud de la mujer, el niño y el adolescente (2016-2030)