Una serie de recomendaciones para los servicios médicos sobre cómo tratar a la población transgénero fue tema de debate la semana pasada entre representantes de los servicios de salud, la comunidad académica y de las organizaciones que bregan por los derechos de personas transexuales en América Latina y el Caribe, en una reunión realizada la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).
Una serie de recomendaciones para los servicios médicos sobre cómo tratar a la población transgénero fue tema de debate la semana pasada entre representantes de los servicios de salud, la comunidad académica y de las organizaciones que bregan por los derechos de personas transexuales en América Latina y el Caribe, en una reunión realizada la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).
Las conclusiones de esta reunión, en la que se analizó los principales problemas que afectan el acceso y la provisión de servicios de salud para esta población, formarán parte de un documento de referencia para la atención en salud de personas transgénero y transexuales. También se delineará un plan para desarrollar una estrategia comprehensiva de cuidado en salud para esta población en toda la región. Estos documentos serán parte de consultas subregionales que se iniciarán en 2012.
Los asistentes a este encuentro celebrado entre el 19 y 21 de diciembre en la sede de la OPS/OMS resolvieron adoptar el término "trans" para definir a una población con identidad de género variada diferentes al sexo de asignación y que viven en la región de las Américas. Esta población enfrenta una serie de problemas para acceder a los servicios de salud en sus países, muchos de ellos vinculados a la estigmatización, la falta de protocolos de atención médica y la falta de información sobre cómo actuar ante determinadas situaciones.
"La población trans ha sido tradicionalmente estigmatizada, marginalizada, maltratada, discriminada y hasta sujeta a la violencia física y emocional. La transfobia debe considerarse como un factor que impacta negativamente la salud", indicó la doctora Gina Tambini, gerente del Área de Salud Familiar y Comunitaria. "Para que el sector salud pueda dar respuestas adecuadas a las necesidades de las personas trans, es necesario crear y aplicar políticas de no discriminación, contar con personal calificado y garantizar que existan ambientes de respeto y calidad de la atención", afirmó la doctora Tambini.
Los problemas de salud que afectan a las personas trans son similares a los que afectan al resto de la población, pero algunas condiciones tienen mayor extensión dentro de estos grupos porque enfrentan situaciones que aumentan su vulnerabilidad o el riesgo de exposición a agentes patógenos, coincidieron los expertos que participaron en esta reunión.
Además de problemas de salud que afectan desproporcionadamente a grupos de personas trans, como VIH, sífilis, gonorrea, hepatitis o herpes genital por mencionar algunos ejemplos, existen demandas en materia de afirmación o construcción de género que requieren ser atendidas por el sector salud.
"Las necesidades, problemas y demandas de las personas trans en materia de salud no pueden ser definidas externamente sino que deben ser expresadas por ellas mismas", añadió.
En la reunión celebrada en la OPS/OMS se debatió la terminología, definiciones y descripciones de la población, así como los perfiles epidemiológicos y las iniciativas que se han llevado adelante en materia de salud en la región, entre otros temas. Además de revisar y debatir el contenido del documento de referencia que se pondrá en consulta el año próximo, la reunión tuvo por objetivo promover una visión multisectorial y multidisciplinaria de la provisión de servicios de salud para esta población, incluyendo la atención en la prevención, entre otros. Participaron representantes de toda la región de las Américas.
La OPS se estableció en 1902 y es la organización de salud pública más antigua del mundo. Trabaja con todos los países del continente americano para mejorar la salud y la calidad de la vida de las personas de las Américas y actúa como la Oficina Regional para las Américas de la OMS.