Una iniciativa apoyada por la OPS y la cooperación coreana utiliza la comunicación para empoderar a estudiantes de El Recreo, en el cantón ecuatoriano de Durán, a tomar acciones que beneficien su salud y mejoren su vida
Durán, Ecuador, 22 febrero de 2019 (OPS)- La entrevista radial transcurre con normalidad. “- ¿Qué deben hacer las embarazadas para evitar el zika”-?, pregunta el entrevistador. “- Deben utilizar repelente para que el mosquito no le pique, mallas en puertas y ventanas, y toldos en los dormitorios-”, responde el entrevistado. Lo particular del hecho es que los protagonistas no son un periodista y un profesional de salud, sino dos estudiantes de primaria de una escuela de El Recreo, cantón Durán, en Ecuador.
La escena transcurre en un aula de la escuela Benigno Rodas. El espacio fue transformado en un estudio de radio donde un grupo de alumnos concurren regularmente para conducir el programa Nuestras voces se escuchan. Desde allí comparten información para ayudar a otros estudiantes y a su comunidad a llevar una vida saludable y prevenir enfermedades.
“Antes de entrar en el club de radio no sabía sobre el dengue, chikungunya y zika, pero gracias a la charla que nos dieron ya sé lo qué es y cómo prevenirlo”
“Antes de entrar en el club de radio no sabía sobre el dengue, chikungunya y zika, pero gracias a la charla que nos dieron ya sé lo qué es y cómo prevenirlo”, dice Steven Parrales, el entrevistador. Además, cuenta que su dicción mejoró gracias al club. “Antes se me trababa mucho la lengua, pero ahora como me hacen hablar mucho y entrevistar a la gente, la lengua ya no se me traba tanto”, asegura.
La iniciativa de radios escolares se desarrolla desde 2016 en dos escuelas y un colegio de Durán, en el marco de un proyecto que buscó fortalecer la atención primaria de salud a través de la participación y movilización interinstitucional y social, en la cual la comunicación fue un elemento estratégico.
El proyecto, ejecutado por los ministerios de Salud Pública y de Educación de Ecuador, la Universidad Estatal de Milagro y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), con el financiamiento de la Agencia Internacional de Cooperación Coreana (Koica), se enfocó en reducir los factores que incrementan los riesgos de desarrollar enfermedades no transmisibles, como la obesidad infantil, la alimentación no saludable y la inactividad física, así como el riesgo de contraer enfermedades transmisibles como zika, dengue y chikunguya.
Violeta Albán Salazar, directora de la Escuela Benigno Rodas, afirma que el proyecto “les ha permitido a los estudiantes desarrollar muchas habilidades, los ha motivado a que ya no tengan miedo de hablar, y ha cambiado muchos hábitos que tenían los estudiantes”.
En Nuestras voces se escuchan los alumnos hablan de alimentación saludable, ejercicio físico, eliminación de bebidas azucaradas, lonchera saludable y medidas preventivas frente a enfermedades transmitidas por mosquitos, temas sobre los que fueron capacitados por personal de las direcciones zonales y distritales de Salud y Educación juntamente con la OPS/OMS.
Por su parte, estudiantes de Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad del Estatal de Milagro coordinan los clubes de radios y enseñaron a los niños técnicas radiales, a manejar los equipos y a escribir libretos. Guillermo del Campo, profesor de esa casa de altos estudios, destaca que la participación de los universitarios “es un compromiso con la comunidad” y señala que los clubes de radio “son una estrategia edu-comunicativa, participativa e inclusiva de los actores de la comunidad”.
“El club me ha enseñado a manejar la consola y también a prevenir el zika, como alimentarme bien y creo que me va a servir para que más adelante yo pueda ayudar a más personas”, dice Dani, miembro de otro de los clubes de radio de El Recreo.
Para José Ricardo San Miguel, exdirector distrital de Salud del Cantón Durán, “los niños han ganado en soltura, aprendido a comunicar, creen más en sí mismos, y están más conscientes de lo que deben aportar como parte de la comunidad, y cómo eso repercute en sus demás compañeros y padres y familiares”.
Todos coinciden en afirmar que las radios escolares estimulan la expresión, promueven el trabajo en equipo, desarrollan la imaginación y la creatividad, así como también potencian la expresividad oral, la dicción, la redacción; y posibilitan el ejercicio del derecho a la palabra.
Pero quizás el aprendizaje más importante lo que expresa un integrante del club de Radio del Colegio Imbaburax: “Hemos aprendido que ya no somos más solo observadores, sino que hemos pasado a la acción”.
— Enlace a video del programa de radio escolares en Ecuador
— Proyecto MSP-OPS/OMS-KOICA