Buenos Aires, 6 de marzo de 2019 (OPS/OMS).- Alrededor de 40 millones de personas en América Latina y el Caribe tienen pérdida de audición discapacitante, y se prevé que en 2050 afecte aproximadamente a unas 87 millones, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). De todas maneras, muchas de las causas son prevenibles, mientras que la pronta identificación y el tratamiento adecuado pueden reducir sus consecuencias.
En el marco del Día Mundial de la Audición, que tiene lugar el 3 de marzo, resulta clave atender las recomendaciones para prevenir y reducir el impacto de la pérdida de la audición, que a nivel mundial afecta a más de 466 millones de personas.
En este sentido, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) recomienda prestar atención a causas prevenibles como la exposición a ruidos intensos en el trabajo y las actividades recreativas. La pérdida de audición puede deberse a causas genéticas, complicaciones en el parto, algunas enfermedades infecciosas, infecciones crónicas del oído, el empleo de determinados fármacos, la exposición al ruido excesivo y el envejecimiento.
A nivel global casi el 50% de las personas de 12 a 35 años, o 1.100 millones de adolescentes y jóvenes, corren riesgo de pérdida de audición debido a la exposición prolongada y excesiva a los sonidos fuertes, incluida la música que escuchan a través de dispositivos de audio personales. Por ello la OMS y la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) han emitido un nuevo estándar internacional para la fabricación y el uso de estos dispositivos, que incluyen teléfonos inteligentes y reproductores de audio, para hacerlos más seguros a la hora de escuchar.
Aplicación para dispositivos móviles
Antes de la celebración del Día Mundial de la Audición, la OMS lanzó "hearWHO", una aplicación gratuita para dispositivos móviles (está disponible en inglés y en proceso de traducción al español) que permite a las personas controlar su audición con regularidad e intervenir en una etapa temprana de la pérdida de la misma. La aplicación está dirigida a aquellas personas que corren algún riesgo o que ya experimentan algunos de los síntomas relacionados con la pérdida de audición.
Esta nueva herramienta puede resultar particularmente beneficiosa para personas que a menudo están expuestas a altos niveles de sonido, como aquellos que escuchan música a todo volumen o trabajan en lugares ruidosos, también quienes usan usan medicamentos que son dañinos para la audición o son mayores de 60 años. Los síntomas que indican el inicio de la pérdida de audición incluyen una sensación de zumbido en el oído, conocida como tinnitus, no seguir partes de una conversación o pedirle a la gente que repita lo que ha dicho, así como aumentar el volumen de los dispositivos de televisión, radio o audio.
La detección temprana de la pérdida de audición es crucial para identificar conductas de riesgo que deben cambiarse y determinar la intervención más adecuada para tratarla. Estas intervenciones son identificadas por profesionales de la audición y pueden abarcar desde subtítulos y lenguaje de señas hasta audífonos e implantes cocleares. Las intervenciones para prevenir, identificar y abordar la pérdida de audición son rentables.