Washington D.C., 25 de abril de 2024 (OPS) - Con países de las Américas reportando alrededor de 480.000 casos de malaria en 2023, en el Día Mundial de la Malaria, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) llama a los gobiernos a que intensifiquen los esfuerzos para combatir la enfermedad, que afecta de manera desproporcionada a las comunidades indígenas, los migrantes y otras poblaciones vulnerables.
“Si bien el número de casos de malaria reportados en las Américas ha disminuido desde 2017, cuando alcanzaron un pico de 934.000, algunos países aún están lejos de alcanzar la meta de reducción del 75% para 2025, como lo propone la estrategia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) contra la malaria”, afirmó el doctor Sylvain Aldighieri, Director del Departamento de Prevención, Control y Eliminación de Enfermedades Transmisibles de la OPS. "Esto se debe a que muchas poblaciones continúan sin acceso a intervenciones clave, sobre todo en áreas remotas y de difícil acceso", agregó.
Los mineros, los trabajadores agrícolas y otras poblaciones móviles corren un riesgo especial de contraer la malaria, representando entre el 29% y el 64% de los casos en algunos países; mientras que las poblaciones indígenas también están entre las más afectadas, ya que representan entre el 25% y el 100% de los casos. En algunas partes de la cuenca del Amazonas, hasta el 45% de los casos de malaria se registran en niños menores de 10 años.
Para hacer frente a esta situación, la OPS ha pedido a los países que garanticen la disponibilidad de servicios de diagnóstico y tratamiento de la malaria en la atención primaria de salud, sobre todo en las zonas de alta carga de la enfermedad. La participación de las comunidades afectadas también es clave para abordar el problema. Esto incluye involucrar a los trabajadores de salud comunitarios, que están capacitados para realizar pruebas rápidas y proporcionar tratamiento en áreas indígenas y de difícil acceso.
"Alcanzar los objetivos mundiales contra la malaria exigirá un cambio urgente en nuestra respuesta a la enfermedad, abordando las causas fundamentales de la misma y garantizando que los servicios de salud esenciales se prestan de forma equitativa. Los métodos innovadores de prestación de atención médica, incluida la participación de voluntarios de salud comunitaria, son una parte crucial de este cambio", añadió el doctor Aldighieri. La OPS continúa trabajando con los países de las Américas para asegurar la implementación del Plan de Acción 2021-2025 de la Organización, que está alineado con la estrategia de la OMS contra la malaria. El plan de acción busca orientar los planes nacionales y promover esfuerzos conjuntos entre países y socios en la detección, diagnóstico y respuesta a la malaria.
En las Américas, Paraguay fue certificado libre de malaria en 2018; seguido por Argentina, en 2019; El Salvador, en 2021; y Belice, en 2023. Con ello, el número de países donde la malaria es endémica en la región se redujo de 21 en 2015, a 17 en 2023. Surinam, México y la República Dominicana también están cerca de eliminar la enfermedad.
La malaria es una enfermedad febril aguda causada por el parásito Plasmodium, que se transmite por la picadura de un mosquito Anopheles hembra infectado. Los síntomas, que incluyen fiebre, dolor de cabeza y escalofríos, pueden ser leves. Si no se trata, la malaria puede evolucionar a una enfermedad grave e incluso la muerte.