Sección 3

Análisis de brechas y vacíos en la respuesta

Servicio de atención médica en Darién
Foto: Ángel Tuñón OPS/OMS

Salud mental

La población migrante en el Darién debe afrontar un elevado grado de estrés y ansiedad, así como las consecuencias traumáticas de los riesgos y desafíos del tránsito. Estas afectaciones deben analizarse diferencialmente por sexo y edad, ya que es fundamental contar con estrategias diferenciadas de acuerdo con las características distintivas de la población (Figura 12). Las intervenciones comunitarias y el trabajo conjunto entre los países de las Américas por donde transita la población migrante y refugiada,y las organizaciones humanitarias son esenciales para mejorar el acceso oportuno a las atenciones en salud mental y apoyo psicosocial.

La población migrante debe enfrentar múltiples peligros, entre ellos el tránsito por terrenos difíciles, las condiciones climáticas extremas, la amenaza de los animales salvajes y el peligro de sufrir violencia, además de incertidumbre. Todos los anteriores factores causan un elevado grado de estrés y de ansiedad.

Muchas personas se ven expuestas hechos traumáticos, como perder a seres queridos o convertirse en víctimas de la violencia, la explotación o el abuso durante el viaje. Estas experiencias pueden tener efectos duraderos en su salud mental. Sumado a lo anterior, algunas personas enfrentan la separación de sus familiares y amigos durante el tránsito o la comunicación con ellos se ve interrumpida, lo que puede dar lugar a sentimientos de soledad, depresión y angustia emocional. Asimismo, algunas personas encuentran barreras lingüísticas y culturales que dificultan la búsqueda oportuna de servicios de salud.

Ante esta perspectiva, es importante poner el acento en la limitación de acceso a los servicios de salud mental debido a la falta de infraestructuras y el escaso personal y los recursos disponibles para la respuesta. Igualmente, son necesarios espacios de cuidado a los cuidadores para quienes responden a la emergencia.

Oferta de las organizaciones de cooperación en Colombia

Atención psicosocial individual

  • HIAS, la Cruz Roja Colombiana, la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) y Mercy Corps con su socio implementador IPS Polo Salud.
  • El punto de atención y orientación de World Vision International dispone de un espacio de protección donde se brinda un acompañamiento psicosocial a los niños y niñas migrantes.  
  • Heartland Alliance International facilita acciones de autocuidado en salud mental.
  • La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados con su socio implementador, HIAS.

Servicios especializados

  • Servicios de telemedicina a través del Convenio entre el Hospital Mental de Medellín-HOMO y la OIM.
  • Mercy Corps.
  • Cruz Roja Colombiana.
  • OIM.
  • HIAS.

Oferta de las organizaciones de cooperación en Panamá

Ministerio de Salud

El Ministerio de Salud no presta atención de salud mental a la población migrante en tránsito, ya que no cuenta con el recurso humano necesario para proporcionar dicha atención: solo dispone de un psicólogo y un trabajador social. En toda la región no hay ningún médico o médica especialista en psiquiatría.

Organización Internacional para las Migraciones

Según los informes operaciones mensuales de la OIM, dentro de las áreas de trabajo con la población migrante en Panamá se encuentra el de migración y salud. Las acciones que brinda la OIM se enfocan en los siguientes temas:

  • Capacitación en aspectos psicosociales a personas migrantes en tránsito y a miembros de las comunidades de acogida.
  • Asistencia psicosocial a personas migrantes que residen en el país y a comunidades de acogida, de enero a abril de 2024 mediante la prestación de servicios a través de un psicólogo.
  • Capacitación a asociados gubernamentales, sociedad civil y sector privado en el abordaje integral de la violencia por razón de género.

HIAS

HIAS tiene presencia en las dos estaciones receptoras de migrantes de San Vicente y Lajas Blancas, así como en la comunidad de Bajo Chiquito. Anteriormente ofrecieron sus servicios en la comunidad de Canaán Membrillo, pero por cambios en los flujos migratorios han priorizado su presencia en otras comunidades.

Los programas de salud mental que se desarrollan sobre el terreno se enfocan en las redes de apoyo y en los espacios comunitarios, así como en la atención focalizada no especializada. Para ello cuentan con un equipo humano que se distribuye entre los sitios de atención. El equipo está formado por dos psicólogas que se encargan de las atenciones individualizadas y dos promotores con perfil comunitario que se encargan de las acciones psicoeducativas grupales.

Los casos de salud mental que requieren atención especializada usualmente se remiten a otras organizaciones como Médicos sin Fronteras. Estos casos están relacionados con los diagnósticos de esquizofrenia, ansiedad, depresión y trastorno bipolar. Actualmente cuentan también con un protocolo de atención y seguimiento a la población migrante en tránsito con trastornos mentales transfronterizo con personal de HIAS de Colombia, Costa Rica, Honduras y Panamá. A través de fichas internas, permiten el seguimiento, abordaje farmacológico y psicosocial de estos casos.

Fundación Panamericana para el Desarrollo y la Cruz Roja Panameña

Ambas organizaciones prestan acompañamiento en salud mental tanto a la población migrante adulta como infantil en situación de migración.

Pregunta que leen los migrantes en Darién: ¿Durante el viaje te separaste de tu niño o niña?
Foto: Carlos Emanuele PAHO/WHO

Necesidades, brechas y vacíos en la respuesta en salud mental

En el marco de este estudio se han identificado diversas brechas y necesidades significativas que afectan la salud mental de la población migrante y refugiada en tránsito. Estos hallazgos son el resultado de diálogos constructivos y colaborativos con los socios de cooperación de la mesa bifronteriza (Colombia-Panamá), las autoridades sanitarias en cada país de la frontera y la presencia territorial y el acompañamiento en la gestión de casos por parte de la OPS en el territorio. Este proceso permitió obtener una visión detallada y contextualizada de los desafíos que enfrenta la población migrante en términos de acceso a servicios de salud mental y acompañamiento psicosocial adecuados y oportunos:

  • No se dispone de tiempo suficiente para prestar acompañamiento a los pacientes y dar continuidad a los tratamientos; se puede ofrecer una única oportunidad de atención.
  • Existen dificultades para realizar el seguimiento de los casos, ya que los pacientes cambian constantemente de números de teléfono o sus estancias son cortas.
  • No se dispone de redes de apoyo, ni de historiales clínicos que faciliten el seguimiento y acompañamiento de los casos.
  • No existen servicios especializados en salud mental infantil.
  • Falta talento humano especializado para ofrecer respuesta tanto a la población migrante en tránsito como a la población de acogida.
  • El costo de valoración por psiquiatría es muy elevado. Los pacientes desisten antes de que les proporcionen una respuesta, debido a los tramites administrativos y otras barreras que encuentran en el acceso.
  • Los lugares de atención son inadecuados.
  • Faltan psiquiatras para atención presencial. La telemedicina funciona siempre y cuando un profesional acompañe el paciente de forma presencial.
  • Faltan recursos para la atención y para la entrega de medicamentos, teniendo en cuenta la continuidad en los convenios por parte de las organizaciones de cooperación.
  • No existen espacios de cuidado al cuidador que mejoren la humanización en la prestación de los servicios de salud.
  • Los médicos y médicas que prestan los servicios de salud en el Darién no cuentan con condiciones habitacionales dignas: carecen de acceso a agua potable y energía eléctrica. Estas condiciones inciden en la prestación de los servicios y el agotamiento físico y emocional del talento humano.

Salud sexual y reproductiva

El acceso a servicios de salud sexual y reproductiva es fundamental para la población migrante en tránsito y refugiada. Dicha atención debe contemplar las distintas dificultades en este aspecto, con el fin de brindar una respuesta adecuada e integral que responda a las dinámicas de movilidad, los factores de riesgo asociados al contexto, así como a la disponibilidad de los servicios.

Algunas de las principales necesidades en salud sexual y reproductiva de la población migrante en tránsito incluyen el acceso a anticonceptivos, la prevención y el tratamiento de las infecciones de transmisión sexual (la población migrante presenta un mayor riesgo debido a las condiciones de hacinamiento y a la falta de información y recursos para prevenirlas, así como las múltiples violencias a las que se enfrentan en el trayecto). También es importante acompañar a las comunidades de acogida, dado el riesgo al que se enfrentan por situaciones de vulnerabilidad preexistentes, atención prenatal y posnatal y atención integral en casos de violencia sexual y de género.

Satisfacer las necesidades mencionadas es esencial para proteger y mejorar la salud y el bienestar de la población migrante en tránsito. En la Figura 13 se presentan los principales eventos en relación con la salud sexual y reproductiva registrados entre la población migrante.

De las 1 861 personas migrantes que accedieron al sistema de salud colombiano, el 6,9% (129 mujeres) solicitaron atención por algún evento relacionado con salud sexual y reproductiva. Las consultas más frecuentes se relacionaron con la supervisión de la gestación durante los distintos trimestres del embarazo (edad más frecuente de 18 a 28 años), seguido de asesoramiento sobre contracepción. En el caso de los hombres, se registraron dos casos de infección de transmisión sexual, uno de VIH y otro de sífilis.

Hasta enero y febrero del 2024, en la ESEHSSU del municipio de Necoclí en Colombia se registraron seis casos de aborto que requirieron ingreso de urgencias. Asimismo, se registró una solicitud de interrupción voluntaria del embarazo, en la que fue necesario revisar con la Secretaría de Salud los motivos de la falta de atención en la ESE y remitir a la solicitante al municipio de Apartadó.

Oferta de atención a la salud sexual y reproductiva en Colombia

Atención a las mujeres gestantes

  • Cruz Roja Colombiana.
  • Mercy Corps a través de IPS Polo Salud.
  • OIM.
  • Medical Teams a través de la ESE Hospital San Sebastián de Urabá.
  • Acción contra el Hambre.
  • Médicos del Mundo.

Tamizajes y pruebas de detección del VIH, de la hepatitis B y de la sífilis

  • Aid for AIDS.
  • Cruz Roja Colombiana.
  • Mercy Corps a través de IPS Polo Salud.
  • OIM.
  • Medical Teams a través de la ESE Hospital Francisco.
  • Fundación Ancla.

Asesoramiento en planificación familiar, inserción y retirada de implantes subdérmicos, colocación de dispositivos intrauterinos, jornadas y charlas de salud sexual y reproductiva, derechos sexuales y reproductivos, salud menstrual, derecho al erotismo y al placer, prevención del riesgo en el uso de las redes sociales

  • Mercy Corps a través de IPS Polo Salud.
  • OIM.
  • Aids For Aids.

Oferta de atención a la salud sexual y reproductiva en Panamá

Fondo de Población de las Naciones Unidas

Proporciona insumos y servicios esenciales en la provincia del Darién para prestar atención obstétrica y neonatal. Ofrece, además, sesiones de orientación sobre anticoncepción y otros temas de salud.

Ministerio de Salud de la República de Panamá

Presta atención a las mujeres gestantes y realiza el abordaje clínico de la violencia sexual.

Necesidades, brechas y vacíos en la respuesta en salud sexual y salud reproductiva

  • La población migrante tiene una baja percepción del riesgo de contagio de infecciones de transmisión sexual.
  • Se requieren más pruebas de detección rápidas de infecciones de transmisión sexual y verificación de la calidad de las pruebas y acompañamiento técnico de profesionales. Las posibilidades de asesoramiento y acompañamiento médico son escasas, dado el reducido tiempo de estancia de la población migrante.
  • Los métodos de planificación familiar de larga duración requieren unos cuidados específicos que las personas migrantes rechazan, ya que consideran que los incapacitan para proseguir su ruta, que es su principal objetivo.
  • Se incrementan las dificultades para el acceso a la anticoncepción y la toma de decisiones informadas. Las mujeres, las niñas y las adolescentes acceden a métodos que no se ajustan a sus necesidades, exponiéndolas a diversos riesgos para su salud física, como hemorragias, migrañas o problemas ginecológicos.
  • Algunas mujeres optan por realizar su tránsito hacia Colombia con el fin de acceder a la anticoncepción definitiva. Pero en ocasiones encuentran obstáculos en los servicios médicos que les impiden este acceso, ya sea por falta de disponibilidad del servicio o por impedimentos administrativos.
  • Se identifica una importante carencia en la promoción del uso de preservativos y de la doble protección.
  • Se han identificado obstáculos en el acceso al derecho a la interrupción voluntaria del embarazo, por ejemplo, la exigencia de que la mujer que desea abortar asuma el costo del medicamento, así como la falta de capacitación del personal médico para llevar a cabo el procedimiento. Esta situación ha conducido a situaciones de riesgo para las mujeres gestantes y, en ocasiones, se les ha sugerido trasladarse a otros municipios para recibir la atención, aumentando así su vulnerabilidad, dado que las personas migrantes y refugiadas cuentan con escasos recursos económicos. En contraste con esta situación también se han evidenciado casos de presión del personal médico para que las mujeres migrantes se sometan a una intervención de interrupción voluntaria del embarazo, lo que vulnera su derecho a tomar decisiones libremente sobre su reproducción sin sufrir coerción, discriminación o violencia.
  • Dadas las condiciones durante el tránsito, no se puede dar continuidad a los controles prenatales; es necesario ofrecer información para identificar los factores de riesgo y dónde acudir en el caso de presentarse una urgencia durante la ruta.
  • Las mujeres gestantes migrantes en tránsito han informado de dificultades para acceder a servicios de control prenatal que les permitan un seguimiento de su salud durante el embarazo. En algunos casos, sufren discriminación y dificultades para acceder a ecografías en los hospitales, lo que las obliga a recurrir a organizaciones humanitarias para obtener la atención necesaria.
  • Se encuentran vacíos en la divulgación del Protocolo de Atención Integral en Salud a Víctimas de Violencia Sexual (Resolución núm. 459 del 2012) y de la Ruta de Atención en Casos de Violencia basada en el Género, incluida la violencia sexual, dado que esta información no se encuentra visible en los hospitales o puntos de atención a personas sobrevivientes de violencia sexual, lo que aumenta el estigma, el tabú y los obstáculos para acceder a servicios médicos y psicológicos en casos de violencia sexual. Asimismo, las rutas de atención en situaciones de violencia en razón del sexo no son claras ni visibles para la población migrante y refugiada, una situación que les expone a mayores riesgos.
  • Existen vacíos para brindar una atención con enfoque de género y enfoque centrado en la persona sobreviviente, donde se evidencian en muchas ocasiones comentarios y acciones revictimizantes que limitan el acceso a la atención.
  • Se han registrado infecciones de transmisión sexual en niñas menores de 14 años de edad de la población de acogida por donde transita la población migrante. Por tanto, se hace necesario acompañar a las comunidades e instituciones para desarrollar acciones de prevención y promoción con las comunidades con mayor afluencia de población migrante.

Enfermedades transmisibles

La subregión del Urabá, tanto antioqueña como chocoana, por sus características geográficas y el tránsito de la población migrante proveniente de África, Ecuador, Haití, y la República Bolivariana de Venezuela, se convierte en una zona de mayor circulación de enfermedades transmitidas por vectores. Esto se evidencia en la notificación de un porcentaje importante de los casos de malaria y dengue, considerando además que no existe una oferta de servicios rápidamente disponible para el diagnóstico y tratamiento de ambas enfermedades.

Hasta el 4 de abril del 2024, en Colombia se habían notificado al Sivigila 104 eventos de interés en salud pública entre la población migrante en situación irregular. Las localidades de Apartadó, Carepa, Montería y Necoclí fueron las que presentaron un mayor número de notificaciones de población migrante (Cuadro 1).

El municipio de Necoclí cuenta con tamizaje para la malaria y el dengue en la zona de embarque de uno de los muelles de transporte marítimo. Allí, el proyecto One Health de la Universidad de Wisconsin realiza el tamizaje con pruebas rápidas; en caso de resultado positivo, con el consentimiento del paciente se obtiene una muestra de sangre para realizar una prueba de reacción en cadena de la polimerasa en laboratorio.

La falta de acceso a servicios sanitarios, saneamiento e higiene básica, agua potable para consumo humano, así como la ingesta de alimentos de venta callejera y la pernoctación a la intemperie han incrementado, especialmente en los niños y niñas menores de 5 años, los brotes en la piel, las infecciones respiratorias y las enfermedades transmitidas por alimentos, principal causa de mortalidad en este grupo de edad en cada uno de los países, en especial en las comunidades de acogida por donde transita la población migrante.

Destaca el déficit de la provincia del Darién (Panamá) con la notificación obligatoria de eventos de salud pública. Según informes de las autoridades, esto se debe a la escasez de recurso humano y a la elevada demanda de pacientes. Actualmente se está reforzando el servicio con recurso humano en salud y se están coordinando capacitaciones para formar al personal en las notificaciones de estos eventos. El evento que más se ha comunicado en el 2024 es la violencia sexual infligida a mujeres de entre 18 y 30 años de edad (Figura 14), un hecho que suscita una gran preocupación en el Gobierno.

Oferta de las organizaciones de cooperación en Colombia

  • One Health realiza pruebas rápidas de detección de la malaria, el dengue, la COVID-19 y la influenza.

Necesidades, brechas y vacíos para la respuesta a enfermedades transmisibles

  • La dificultad para acceder a los servicios sanitarios agrava la vulnerabilidad tanto de la población migrante en tránsito como de la población de acogida.
  • Uno de los principales retos es la búsqueda activa y la detección de enfermedades transmisibles entre las personas migrantes en tránsito.
  • La población migrante en tránsito muestra una baja percepción del riesgo de contagio.
  • Las condiciones higiénico-sanitarias son deficientes, con falta de acceso a agua segura y a agua potable.
  • Las coberturas de vacunación entre las personas migrantes en tránsito es baja, principalmente de las de procedencia venezolana. A ello se suma la barrera que existe en Panamá, que no cuenta con vacunas disponibles para esta población.
  • No existe información gráfica sobre enfermedades transmisibles y medidas de autocuidado.
  • Dada la escasa disponibilidad de recursos, algunas personas viajan con calzado que no es de su talla, lo que incrementa los distintos riesgos durante la ruta.
  • La venta de comida en la calle o en establecimientos inadecuados incrementa el riesgo de sufrir enfermedades transmitidas por alimentos.
  • No existen lugares para el aislamiento de las personas con enfermedades transmisibles.
  • Faltan medios de diagnóstico y tratamiento para la malaria y el dengue.

Enfermedades no transmisibles y enfermedades crónicas

Las enfermedades crónicas representan una carga significativa para la salud de la población migrante en tránsito. Dicha carga se ve exacerbada por las difíciles condiciones del viaje y por la falta de acceso a una atención médica adecuada, relacionada con la falta de las infraestructuras médicas necesarias en la región del Darién, así como por la ausencia de especialistas y la falta de insumos y medicamentos para tratar estas dolencias.

A lo anterior se suman algunos riesgos que deterioran significativamente la salud de la población migrante: la falta de acceso continuo a medicamentos, la carencia de diagnósticos oportunos y de una alimentación adecuada, y el agotamiento físico del viaje. La interrupción en el manejo de las enfermedades crónicas puede conducir al su agravamiento, lo que puede incrementar el riesgo de complicaciones graves y discapacidades evitables. Finalmente, el estrés asociado con la migración y las difíciles condiciones de vida en el Darién pueden exacerbar los síntomas de las enfermedades crónicas y afectar negativamente la salud mental de la población migrante.

De las 1 861 personas que solicitaron atención en Colombia, un 5,4% (101 personas) presentaron alguna condición relacionada con una enfermedad crónica (se muestran solo las cuatro principales causas (Figura 15). El primer motivo de consulta fueron las enfermedades hipertensivas y el grupo que más servicios solicitó en relación con una enfermedad crónica no transmisible fue el de las mujeres de entre 29 a 59 años.

Oferta de las organizaciones de cooperación

Atención en salud y tratamiento farmacológico para la hipertensión

  • OIM.
  • Mercy Corps.
  • Medical Teams.
  • Cruz Roja Colombiana.
  • Medical Teams ofrece tratamiento farmacológico para la diabetes.

Diagnóstico del VIH

  • AID for AIDS.
  • Fundación Ancla.
  • Mercy Corps.

Tratamiento farmacológico para el VIH

  • AID for AIDS.

Necesidades, brechas y vacíos en la respuesta a la atención de las enfermedades crónicas

  • Las personas migrantes en tránsito con diabetes, hipertensión, fármacos para el tratamiento de los trastornos psiquiátricos y retrovirales, entre otros, carecen de acceso a los medicamentos de control o de alto costo.
  • El período para ofrecer un diagnóstico apropiado y el oportuno asesoramiento es demasiado breve.
  • Hay deficiencias de los procesos de control de enfermedades crónicas como la hipertensión y la diabetes por la falta de recursos para realizar pruebas de laboratorio rápidas, para verificar el estado de los pacientes y su enfermedad.
  • Existe una mínima garantía de continuidad del tratamiento, dadas las restricciones para poder prestar un tratamiento durante un período prolongado.
  • Existen dificultades en el acceso a insulinas por el mantenimiento de la cadena de frío y las condiciones habitacionales de los pacientes.
  • En Colombia, al ser población migrante en tránsito y no contar con afiliación en salud, no es posible activar la ruta de atención y los pacientes continúan el tránsito sin medicamentos y, algunas veces, sin información sobre su condición de salud.
  • Se carece de servicios para la atención a las urgencias odontológicas (no existen servicios de exodoncia para las personas no afiliadas).

Infancia y salud: análisis de la migración y de las comunidades de acogida

La migración en el Darién tiene importantes repercusiones en la salud de los niños y las niñas, que deben afrontar considerables riesgos físicos, emocionales y sociales. Es crucial poner en marcha medidas eficaces para proteger y garantizar el bienestar de esta población en situación de vulnerabilidad, incluido el acceso a servicios de salud adecuados, el apoyo psicosocial y la protección contra la explotación y el abuso.

Los niños y las niñas migrantes están expuestos a condiciones extremas durante el viaje a través del Darién, incluido el tránsito por terrenos accidentados, la exposición a situaciones climáticas adversas y la falta de acceso a alimentos y agua potable, lo que aumenta el riesgo de desnutrición, deshidratación y lesiones. Asimismo, la falta de higiene y de condiciones sanitarias deficientes en los campamentos improvisados a lo largo del trayecto pueden aumentar la exposición a enfermedades infecciosas como el dengue, la malaria y otras transmitidas por el agua, lo que representa un grave riesgo para la salud de los niños y las niñas.

Por otra parte, la migración forzada y las experiencias traumáticas asociadas, como la separación de la familia, la violencia y la incertidumbre, pueden tener un impacto significativo en la salud mental y emocional de los niños y niñas migrantes, aumentando el riesgo de trastornos como la ansiedad, la depresión y el trastorno de estrés postraumático. A lo anterior se suma la transición a un entorno nuevo y desconocido, lo que puede ser una fuente de estrés añadido para la población infantil migrante, en especial en términos de adaptación a nuevas culturas, idiomas y sistemas de apoyo.

En la región, el acceso a agua potable es limitado, dado que cuatro municipios de la subregión del Urabá (Arboletes, Carepa, Necoclí y Turbo ) declararon calamidad pública por una crisis de desabastecimiento de agua debido al fenómeno de El Niño en el mes de enero del 2024. Para la última semana de febrero, se había tratado a varios niños con enfermedades diarreicas, brotes en la piel e infecciones respiratorias, además de con bajo peso.

Oferta de las organizaciones de cooperación

Atención nutricional

  • Acción contra el Hambre presta servicios itinerantes entre los municipios de Acandí, Necoclí y Turbo.
  • La Cruz Roja Colombiana ofreció servicios de nutrición y dietética durante los meses de enero y febrero.
  • El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar distribuyó Bienestarina líquida.
  • MedGlobal y Cadena distribuyeron sopas en sobre y barras energéticas.

Pediatría

  • OIM.
  • Mercy Corps.
  • Protección.
  • Cadena entrega un muñeco para compañía con mensajes de autocuidado.
  • UNICEF y World Vision desarrollan acciones en protección.

Necesidades, brechas y vacíos en la respuesta a la salud nutricional

  • Realizar una valoración integral, complementaria y resolutiva a los niños y las niñas menores de 5 años.
  • Ampliar los esquemas de vacunación completos para menores de edad (muchos de ellos no cuentan con carné de vacunación y no recuerdan qué vacunas han recibido).
  • Los adultos en tránsito acompañados de menores de edad tienen como prioridad poder continuar en la ruta independientemente de la situación de salud de los menores; por ello, en algunos casos es importante realizar la articulación entre el sector de la salud y el sector de la protección de los niños, niñas y adolescentes.
  • Contar con atención nutricional con suplementos para niños de manera frecuente.
  • Los niños, niñas y adolescentes migrantes en tránsito en situación de playa están expuestos a riesgos de protección, dado que muy cerca de ellos y ellas, y en su presencia, se consumen sustancias psicoactivas de manera frecuente.