Río de Janeiro, 07 de diciembre de 2023 (PANAFTOSA/SPV-OPS/OMS) - Ante el brote de encefalitis equina del oeste, identificado en Argentina y Uruguay por las autoridades sanitarias de ambos países y notificado a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), el Centro Panamericano de Fiebre Aftosa y Salud Publica Veterinaria del Departamento de Prevención, Control y Eliminación de Enfermedades Transmisibles (CDE) y el Departamento de Emergencias en Salud (PHE), de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS), reunieron hoy a representantes de los Servicios Veterinarios Oficiales y de los Ministerios de Salud de las Américas, en torno a un seminario regional online para compartir conocimientos y experiencias entre los participantes.
El intercambio de información oportuna y estandarizada entre los países es fundamental para una estrategia conjunta de vigilancia. Las herramientas y procedimientos de laboratorio en la vigilancia deben también estandarizarse para garantizar una oportuna respuesta inter-países.
Durante la jornada, PANAFTOSA/SPV presentó un resumen sobre la situación actual de la encefalitis equina en la región. Franklyn Prieto, Director de Vigilancia del Instituto Nacional de Salud (INS) de Colombia expuso la experiencia del país ante el brote ocurrido en 2016. Mientras que la doctora Ximena Melon, Directora Nacional de Sanidad Animal (SENASA) de Argentina hizo referencia a la situación actual que está viviendo el país.
Por su parte, Dr. Jairo Mendez, asesor para enfermedades virales del PHE/OPS/OMS, analizó los principales puntos relacionados con el diagnóstico de las encefalitis equinas.
¿Cómo se manifiesta la encefalitis equina del oeste y cuáles son sus consecuencias?
La encefalitis equina del oeste es una enfermedad viral que puede presentarse en equinos y eventualmente en humanos.
Se transmite principalmente a través de la picadura de mosquitos infectados, a través de las aves, que actúan como vectores del virus y si bien, la transmisión puede ocurrir en cualquier momento del año, tiende a aumentar durante las estaciones cálidas y húmedas.
Los síntomas en caballos incluyen:
- Fiebre.
- Letargo y debilidad.
- Pérdida de apetito.
- Cojera o dificultad para moverse.
- Secreciones nasales y oculares.
- Problemas respiratorios.
- Cambios en el comportamiento.
El período de incubación desde que un animal es infectado hasta que muestra los primeros signos clínicos es de 5 a 14 días.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) con base en el Reglamento Sanitario Internacional señala que, dentro de las amenazas para la salud pública internacional se encuentran las enfermedades zoonóticas como las Encefalitis Equinas que revisten gran importancia debido a su alto potencial para traspasar fronteras, entre las que se registra: la Encefalitis Equina del Este (EEE), la Encefalitis Equina del Oeste (EEO), Encefalitis Equina Venezolana (EEV) y la Encefalitis del Nilo Occidental (ENO).
¿Existe riesgo de transmisión de la encefalitis equina en humanos?
La circulación del virus se lleva a cabo por medio de algunas especies de mosquitos. La enfermedad persiste de forma continua entre varios tipos de roedores y aves silvestres. Eventualmente, cuando son susceptibles, los equinos y los humanos pueden verse involucrados en este ciclo.
Los brotes de encefalitis equina del oeste pueden presentar casos aislados en humanos con síntomas moderados y la mayoría de las infecciones son inaparentes.
Los casos leves de la enfermedad presentan fiebre, dolor de cabeza y fatiga que persiste por varios días o semanas. La enfermedad tiene un comienzo súbito con dolor de cabeza seguido de decaimiento, escalofrío, fiebre, mialgias y malestar general. Estos síntomas se acentúan en los días siguientes, con vómito, somnolencia, confusión y postración.
Los síntomas neurológicos se limitan a debilidad y temblores generalizados especialmente de las manos, labios y lengua. Generalmente la mejoría comienza varios días después de la defervescencia, entre 1 semana a 10 días.
No hay tratamiento antiviral específico, y la vacuna humana es muy limitada a grupos específicos; las medidas de atención primaria incluyen reposo absoluto, hidratación adecuada y terapia sintomática.
Los grupos en riesgo incluyen a las personas que viven, trabajan o que participan en actividades recreativas al aire libre en las áreas endémicas.
Hasta la fecha no se han registrado casos humanos en las regiones donde se producen los actuales brotes equinos.
¿Cuáles deben ser las medidas de prevención?
Lograr altas coberturas de vacunación de la población de equinos susceptibles en las zonas consideradas de riesgo y realizar refuerzos anuales en los equinos
El manejo integrado de mosquitos y el uso de repelente y fumigación en las caballerizas es importante para ayudar a evitar la diseminación de la enfermedad y la transmisión a los equinos y eventualmente a las personas.
Es necesario establecer un programa integral de prevención y control que incluya: planes de capacitación para el personal de salud, programa de divulgación y de educación sanitaria, atención oportuna de focos y su control, montaje y mantenimiento de un sistema de información y vigilancia epidemiológica con diagnóstico de laboratorio, control de la movilización de animales domésticos susceptibles, coordinación intersectorial, investigación, control de vectores, y participación comunitaria.
Actuación de OPS - PANAFTOSA y del Departamento de Emergencias en Salud: Colaboración y apoyo a los países
La OPS actúa fortaleciendo las capacidades de diagnóstico laboratorial, vigilancia epidemiológica y entomológica, bien como en la optimización de la respuesta de los servicios de salud animal y salud pública de los países ante eventos inusitados mediante el desarrollo de planes de contingencia integrados, colocando el foco en el trabajo intersectorial dentro del marco de Una Salud.
Las encefalitis equinas son arbovirosis que constituyen desde hace muchos años un flagelo para diversos países del continente, y un constante reto para los servicios de salud pública y de salud animal. Dada la importancia socio-económica y el carácter zoonótico de estas enfermedades, se requiere una coordinación intersectorial estrecha entre las autoridades de salud, agricultura y medio ambiente.