Quito, 28 de septiembre de 2021.- Ecuador ratifica el compromiso para acelerar el proceso de eliminación de la malaria en el país, conforme las metas establecidas en el Plan Nacional Estratégico de Malaria 2021-2025.
Bajo la conducción del Sr. Vicepresidente de la República, Dr. Alfredo Borrero Vega, con la presencia de la Sra. Ministra de Salud, Dra. Ximena Garzón, el Sr. Viceministro de Gobernanza, Dr. José Ruales y con la participación del Dr. Marcos Espinal, Director del Departamento de Enfermedades Trasmisibles y Determinantes Ambientales de la Salud – OPS/OMS, el Dr. Pedro Alonso, Director del Programa Mundial de Malaria – OMS, y el Dr. Adrián Díaz, Representante interino de la OPS y equipo de oficina de país, se llevó a cabo una reunión virtual para revisar la hoja de ruta que Ecuador ha elaborado para avanzar hacia la eliminación de esta enfermedad.
El Sr. Vicepresidente de la República expresó el compromiso del gobierno nacional en mejorar las condiciones de salud de la población asentada en territorio ecuatoriano, especialmente de quienes viven en condición de vulnerabilidad y en las provincias con mayores índices de pobreza que, a su vez se, ven afectadas por la malaria. Destacó además que la cartera de salud ha demostrado su capacidad para hacer frente a los diferentes desafíos sanitarios que se presentan en el país, tal como sucedió con el proceso de vacunación contra la COVID-19. Así mismo, reafirmo el apoyo político de la Vicepresidencia de la República para articular los diferentes sectores y actores que deben estar involucrados para hacer frente a este nuevo reto.
El interés y el compromiso del país, para aprobar y poner en marcha el Plan Nacional Estratégico de Malaria 2021-2025 fue resaltado por la Sra. Ministra de Salud, quien agradeció a la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) por el acompañamiento técnico que ha brindado para hacer posible que Ecuador forme parte de la iniciativa de la OMS E-2025, que pretende detener la malaria en 25 países hasta el año 2025.
La estrategia comprende varias acciones como fortalecer el diagnóstico precoz y tratamiento oportuno y seguimiento de todos los casos; fortalecer la vigilancia epidemiológica y entomológica; y promover la participación de distintos sectores, instituciones y comunidad organizada para implementar las acciones previstas.
El Dr. Adrián Diaz reconoció el compromiso por parte de las altas autoridades del Gobierno y del Ministerio de Salud Pública, y extendió dicho agradecimiento al equipo regional de OPS y OMS por atender esta importante sesión para generar sinergias con miras a la eliminación de la malaria en el Ecuador, por considerar que son elementos clave para alcanzar este importante logro de salud pública.
“Las enfermedades las eliminan los países, y la OPS y la OMS prestan su cooperación técnica para dicho fin”, expresó el Dr. Marcos Espinal, ratificando la importancia del compromiso político del país. Además, enfatizó igualmente que la focalización de la malaria en pocos lugares es un factor a favor de la eliminación en el Ecuador, pero que existe la necesidad de actuar ahora porque la transmisión está aumentando.
El Dr. Pedro Alonso se refirió a la importancia de incorporar la capacidad de análisis en los niveles nacional, subnacional y local para revisar y reorientar las acciones y expresó el compromiso del Programa Mundial de Malaria para continuar acompañando los esfuerzos del país encaminados a la meta de eliminación.
Al finalizar la reunión, las autoridades de salud se comprometieron en agilizar la reactivación del Comité Técnico Independiente de Eliminación de Malaria y, con la presencia de un delegado de la Vicepresidencia de la República, coordinar la respuesta multisectorial e interinstitucional que permita garantizar el cumplimiento de las metas del Plan Estratégico del país.
Estos esfuerzos forman parte de la iniciativa de la OPS que busca eliminar la malaria y más de 30 enfermedades infecciosas y otras condiciones para el 2030.
El máximo pico registrado de malaria en Ecuador fue en el 2001 con 106.641 casos. Desde el 2002 hasta el 2014 la tendencia de casos descendió, llegando a 241 casos gracias a la adhesión del país a las recomendaciones de la OPS/OMS sobre el control de la malaria, con una gran inversión en recursos y personal. A partir del 2014, el número de casos aumentó de 241 a 1920 en el 2020.
