Washington, DC, 27 de enero de 2009 (OPS)—Desde octubre de 2008, se viene observando en las Américas una intensa circulación del virus de la fiebre amarilla de transmisión selvática, afectando en el sur del continente a Argentina y Brasil, en el área Andina a Colombia y Venezuela, y a Trinidad y Tobago en el Caribe.
El objetivo de esta comunicación es alertar a los países de la Región para que refuercen las actividades de vigilancia, prevención y control de la fiebre amarilla en sus territorios y a los viajeros dirigiéndose hacia las áreas afectadas o de riesgo.
Situación de la fiebre amarilla en la Región
Argentina y Brasil
Desde octubre de 2008, se ha estado observando la muerte de monos (epizootias) en el sur de Brasil; y a partir de noviembre de ese mismo año, en el noreste de Argentina. El área afectada incluye municipios del Estado de Río Grande do Sul en Brasil, y localidades de las provincias de Misiones y Corrientes en Argentina, vecinas de Rio Grande do Sul.
En Brasil, hasta el 15 de enero de 2009, el Estado de Rio Grande do Sul ha reportado 228 eventos de muertes de monos en 62 municipios. De éstos, 23 municipios tuvieron epizootias probables o confirmadas por laboratorio. Algunas de estas epizootias se registraron en municipios localizados fuera del área previamente considerada de riesgo.
Argentina ha presentado tres eventos de epizootias en diferentes localidades de la Provincia de Misiones y en siete localidades de la Provincia de Corrientes, confirmándose la fiebre amarilla en una de ellas.
En relación a los casos humanos, se han reportado cuatro casos confirmados por laboratorio de fiebre amarilla de transmisión selvática, todos fallecidos: dos casos en Rio Grande do Sul, con sitio probable de infección en Pirapo y en Santo Ángelo; y dos casos en Argentina, con sitio probable de infección en la localidad de Fachinal, Provincia de Misiones. Los últimos brotes de fiebre amarilla selvática registrados tanto en Rio Grande do Sul como en Corrientes fueron en 1966.
Trinidad y Tobago
Se han reportado dos epizootias por fiebre amarilla confirmadas por laboratorio, en los distritos de Mayaro y Nariva, ubicados respectivamente al sur y sureste de Trinidad. No se habían registrado epizootias en Trinidad y Tobago desde 1998.
Venezuela
Se está investigando un evento de muerte de monos en el Estado de Guarico. El último caso humano reportado en el país fue en 2005.
Colombia
Entre las semana epidemiológica (SE) 51 de 2008 y en SE 1 de 2009, se han reportado dos casos humanos (defunciones) por fiebre amarilla en el Departamento de Meta, lo cual está dentro del patrón de casos esporádicos esperados del país.
Respuesta a la situación
Los países han puesto en marcha acciones para la prevención de la ocurrencia de más casos humanos, fortaleciendo la vigilancia epidemiológica, la cual incluye la búsqueda activa de casos febriles, febriles ictéricos y febriles ictero-hemorrágicos. También ha sido intensificada la investigación de rumores de muerte de monos. Al mismo tiempo, en las áreas afectadas, se viene aumentando la cobertura de vacunación de la población residente. Además, se ha reforzado la indicación de vacunar a los viajeros a estas áreas. Adicionalmente, con el fin de prevenir la transmisión urbana, por el Aedes aegypti, se han fortalecido las actividades de control de vectores.
Recomendaciones
Vacunación contra la fiebre amarilla
Uno de los más importantes mecanismos de prevención de fiebre amarilla es la vacunación. Sin embargo, ésta debe ser aplicada considerando la prioridad de su uso, sus indicaciones y contraindicaciones. La OPS recomienda un uso racional de las vacunas, priorizando a la población residente del área de riesgo y a los viajeros que se dirijan hacia ellas. Especial atención debe ser prestada a la vacunación de las personas que residen en áreas de riesgo (donde se identificó epizootias o casos), y a las personas que, aún residiendo en áreas de bajo riesgo (donde las coberturas vacunales en general son bajas) se dirigen por actividades de trabajo o de recreación a las áreas de riesgo. Asimismo, se reitera que la vacuna contra fiebre amarilla no se debe administrar a personas con enfermedades febriles agudas, a personas con hipersensibilidad a huevos y sus derivados, y a personas con enfermedades o tratamientos que produzcan depresión del sistema inmune.
Vigilancia epidemiológica
La oportuna detección de brotes permite la implementación efectiva de medidas de control. Para ello se enfatiza la necesidad de emplear todos los mecanismos de vigilancia de la fiebre amarilla en humanos y en primates: vigilancia de casos clínicos compatibles; vigilancia de los síndromes febriles ictéricos; vigilancia de epizootias; intensificación de la vigilancia de los índices de infestación por A. aegypti en zonas urbanas cercanas al foco; monitoreo de las coberturas de vacunación; y vigilancia de eventos post-vacunación supuestamente atribuibles a la vacunación contra la fiebre amarilla en las áreas afectadas y aledañas.
Control de vectores
La transmisión de la fiebre amarilla en las Américas sigue siendo selvática. Sin embargo, para evitar la reurbanización de esta enfermedad, de la cual ya hubo un brote, confirmado a principios del 2008 y exitosamente controlado, se enfatiza la importancia de las medidas de control del A. aegypti, principalmente en las ciudades y localidades aledañas a las áreas afectadas. Estas medidas permiten igualmente prevenir brotes de dengue.
Comunicación de riesgo
Ante la intensa circulación del virus de la fiebre amarilla observada en la Región, los países deben incluir en sus actividades de comunicación directrices claras y educativas sobre el uso racional de la vacuna, población a vacunar, medidas personales para protección (como evitar actividades en la selva) y medidas para control de vectores.
La OPS fue establecida en 1902 y es la organización de salud pública más antigua del mundo. Es la Oficina Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud y trabaja con los países para mejorar la salud y elevar la calidad de vida de sus habitantes.
Para mayor información técnica sobre la fiebre amarilla y actividades de control, favor referirse a la guía práctica de la OPS para control de la fiebre amarilla.