Buenos Aires, septiembre de 2020 (OPS/OMS).- La pandemia por COVID-19 colocó en el centro de la escena la necesidad de garantizar la seguridad en la labor de los trabajadores de la salud para poder lograr una atención de calidad y segura en los pacientes, coincidieron funcionarios y expertos durante un conversatorio organizado por el Ministerio de Salud de la Nación y la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).
“Necesitamos trabajadores seguros para poder lograr pacientes seguros”, aseguró el secretario de Calidad en Salud de la Nación, Arnaldo Medina, durante la sesión virtual “La seguridad de las personas en el centro del sistema de salud”, el primero de un ciclo de conversatorios que lanzó la cartera sanitaria en el marco del Día Mundial de la Seguridad del Paciente, que tuvo lugar el 17 de septiembre.
El funcionario se refirió al Plan Nacional de Cuidado de Trabajadores y Trabajadoras de la Salud que lanzó el Ministerio de Salud de la Nación, el cual propone distintos procedimientos de seguridad en las organizaciones hospitalarias para evitar contagios en los equipos de salud durante la pandemia de COVID-19. Hoy, los integrantes de los equipos de salud se encuentran en la primera línea de exposición al virus.
Si bien las trabajadoras y los trabajadores de la salud representan menos del 3% de la población en la mayoría de los países, alrededor del 14% de los casos de COVID-19 notificados a la OMS a nivel global se encuentran entre el personal sanitario. En algunos países, la proporción puede llegar al 35%. Miles de trabajadores de la salud infectados con COVID-19 han perdido la vida en todo el mundo.
“No es un elemento nuevo, pero la pandemia nos obligó a reorganizarnos y pone con más evidencia a la calidad del paciente y la atención como un aspecto fundamental”, sostuvo Jonás Gonseth García, asesor regional de Calidad en Sistemas y Servicios de Salud de la OPS/OMS, durante el evento. Sin embargo, advirtió que -según encuestas realizadas en siete países de las Américas- alrededor del 30 por ciento de la población de la región no accede a servicios de salud preventivos y de tratamiento por distintos tipos de barreras de acceso, incluyendo aquellas relacionadas con la mala calidad y problemas relacionados con el trato recibido.
“En estos años hemos aprendido que el daño por la atención y el daño por la falta de servicios de calidad es realmente de gran magnitud, que implica muerte, impacto en la salud de las personas y en la confianza de los ciudadanos en los servicios”, enfatizó Gonseth García. Para contrarrestar esta situación, la OPS/OMS cuenta con una serie de marcos, como la Estrategia de Acceso y Cobertura Universal de Salud y una nueva estrategia y plan de acción para mejorar la calidad de la atención, que coloca en el centro la salud, las necesidades de las personas y la ética.
Por su parte, el asesor en Sistemas y Servicios de Salud de la OPS/OMS en Argentina, Javier Uribe, recordó que la mala calidad en la atención de salud “no sólo es crítica para los usuarios y los trabajadores, sino también para las finanzas del sector, porque es muy costosa”. Y al igual que el resto de los expositores, también destacó la importancia de proteger la salud mental de los trabajadores de la salud para garantizar su seguridad en este contexto.
Del conversatorio, al cual se conectaron miembros de equipos de salud de distintos puntos del país, también participó el director nacional de Calidad en Servicios de Salud y Regulación Sanitaria, Claudio Ortiz, quien presentó los detalles del Plan Nacional de Cuidado de los Trabajadores; la subsecretaria nacional de Calidad, Regulación y Fiscalización, Judith Díaz Bazán; y la coordinadora de la Red Internacional de Seguridad del Paciente, María Cristina Cometto.
“Necesitamos modelos que piensen en personas cuidando personas”, subrayó Cometto, quien anticipó además que desde la Red se está trabajando en un curso avanzado de seguridad de los pacientes, que agrega un módulo sobre personal de salud seguro. Durante su presentación, la coordinadora de la Red presentó algunos aspectos claves para la protección de los trabajadores y destacó el rol de la enfermería para la atención de salud de calidad.
El Día Mundial de la Seguridad del Paciente tiene como objetivos mejorar la comprensión global de la seguridad del paciente, aumentar la participación pública en la seguridad de la atención de salud y promover acciones globales para mejorar la seguridad del paciente y reducir los daños a los pacientes. Este año, su lema es "Trabajadoras y trabajadores de salud seguros, pacientes seguros", y el llamado a la acción es "¡Alcemos la voz por la seguridad de los trabajadores de salud!"
En este marco, la OPS insta a los asociados y países a desarrollar campañas nacionales y a tomar medidas urgentes para reconocer la seguridad del personal de salud como requisito previo para la seguridad del paciente y la calidad de la atención.