Washington DC / Buenos Aires, 23 de julio de 2013 (OPS/OMS)—La hepatitis viral afecta a alrededor de 424 millones de personas en el mundo, de las cuales 1,4 millones mueren cada año como consecuencia de la infección, que puede derivar en falla hepática aguda, cirrosis y cáncer de hígado. La enfermedad es considerada una epidemia silenciosa porque la mayoría de quienes la padecen desconocen que están infectados.
En el marco del Día Mundial contra la Hepatitis, que tiene lugar el 28 de julio y cuyo tema es "Esto es la hepatitis... Conócela. Afróntala", la Organización Panamericana de la Salud/ Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) llama a informarse, realizarse la prueba de detección y hacer frente a esta amenaza sanitaria global.
"Las personas tienen muy poco conocimiento acerca de la hepatitis, su potencial gravedad y sus serias consecuencias en la salud y calidad de vida", señaló la directora de la OPS/OMS, Carissa F. Etienne. "Debemos intensificar nuestras iniciativas de información, educación y comunicación sobre esta enfermedad y tomar acciones para promover la prevención y detección temprana con el fin de que la población pueda recibir tratamiento de manera oportuna".
La hepatitis es una inflamación del hígado causada generalmente por una infección vírica. Se conocen cinco tipos principales de virus de la hepatitis: A, B, C, D y E, los que pueden transmitirse a través de una variedad de vías como las relaciones sexuales sin protección, prácticas inseguras de inyección y perforaciones en el cuerpo (piercing) y mediante el consumo de agua y alimentos contaminados. Estos virus pueden causar la infección e inflamación grave y crónica del hígado, y, a su vez, dar lugar a cirrosis y cáncer del hígado.
En las Américas, entre 8 y 11 millones de personas padecen infección crónica con el virus de la hepatitis B, y 7 millones, hepatitis C. Esta enfermedad supone una pesada carga para los sistemas de salud, por los elevados costos que entraña su tratamiento, y que es en muchos países la principal causa de trasplantes de hígado.
El hecho de que la mayor parte de las personas no tienen síntomas, y suelen no tenerlos durante decenios hasta que desarrollan la enfermedad hepática crónica, ha contribuido a que el problema se diagnostique pobremente y sea insuficientemente tratado.
Para concientizar sobre esta enfermedad, en Argentina se desarrollarán numerosas actividades desde esta semana, hasta el próximo 29 de julio. Buenos Aires, Catamarca, Córdoba, Chubut, Entre Ríos, Mendoza, Misiones, Río Negro, Santa Fe, Tierra del Fuego y Tucumán serán algunas de las provincias donde se realizarán acciones con motivo de esta jornada, tales como distribución de material informativo, testeos y consultas gratuitas, conferencias abiertas a la comunidad y jornadas de sensibilización (para más datos consultar http://www.hcvsinfronteras.org.ar).
Además, el próximo jueves se desarrollará en la sede del Ministerio de Salud de la Nación la primera reunión nacional de referentes provinciales del Programa Nacional para el Control de las Hepatitis Virales para afianzar las líneas de acción en todo el país. Argentina cuenta dentro de su Calendario Nacional de Vacunación con las inmunizaciones contra la hepatitis A y B. Incluso, la estrategia de vacunación de la hepatitis A, con una única dosis a los 12 meses, fue avalada por el Grupo Técnico Asesor en Vacunas (SAGE) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) luego de lograr reducir en más de un 88 por ciento el número de casos de esta enfermedad y eliminar los trasplantes hepáticos por esta causa.
"El número de defunciones por causas asociadas con la hepatitis que se produce cada año en el mundo es aproximadamente igual al de personas que mueren en las carreteras por lesiones de tráfico, o sea, más de dos fallecimientos por minuto", comparó el asesor principal en VIH, enfermedades de transmisión sexual y hepatitis de la OPS/OMS, Rafael Mazin.
La hepatitis puede ser controlada con medidas simples como mantener una buena higiene, evitar el consumo de alimentos y agua contaminados, vacunarse contra la hepatitis B, practicar sexo con protección y no compartir equipos de inyección o perforación del cuerpo.
La OPS/OMS coopera con sus Estados Miembros para prevenir y controlar la hepatitis vírica. Todos los países de América Latina y el Caribe han introducido oficialmente la vacuna contra la hepatitis B en sus programas de inmunización infantil y más del 99% de las unidades de sangre donadas son tamizadas para los virus de la hepatitis B y C.
Asimismo, la organización promueve la vacunación contra la hepatitis B a los trabajadores de la salud y el mayor uso de equipo de inyección y herramientas e instrumentos de perforación del cuerpo esterilizados y desechables para prevenir infecciones cruzadas (esto incluye agujas utilizadas tanto en los establecimientos de salud como en los procedimientos cosméticos, como tatuajes).
Informe global sobre política en prevención y control de la hepatitis viral
La OMS lanzará este 24 de julio, a las 7.30 am (hora de Buenos Aires), un informe que reúne los resultados de una encuesta realizada a los Estados Miembros de la organización para conocer cómo están respondiendo a la hepatitis viral. El documento cuenta con información sobre las Américas y específica de 27 países de la región.
Altas autoridades de Brasil participarán en Ginebra, Suiza, del lanzamiento y expondrán sobre el aumento en el acceso al tratamiento contra la hepatitis en ese país. Acceda aquí a la agenda (en inglés) de la actividad que podrá seguirse en forma virtual. El informe y más información están disponibles en el siguiente sitio web.
La Organización Panamericana de la Salud fue fundada en 1902 y es la organización internacional de salud pública más antigua del mundo. Trabaja con todos los países para mejorar la salud y la calidad de la vida de las personas de las Américas, y actúa como la oficina regional para las Américas de la OMS.