Buenos Aires, 17 de mayo de 2013 (OPS/OMS).- Expertos de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) participaron esta semana en Buenos Aires de un taller sobre calidad de servicios en adolescencia, realizado junto al Ministerio de Salud de la Nación y la Sociedad Argentina de Pediatría. En este marco, referentes de OPS/OMS se reunieron con funcionarios de la cartera sanitaria para analizar la cooperación futura en esta temática.
Durante el taller, la asesora regional en Salud del Adolescente para América Latina de la OPS/OMS, Matilde Maddaleno, brindó una disertación sobre los avances de los programas de adolescencia en las Américas. La capacitación, a la que asistieron unos 80 técnicos de las provincias y del Gobierno nacional, también giró en torno al desarrollo del programa de adolescencia en Argentina, la evolución de los servicios amigables, el diseño de evaluación de calidad de servicios, el perfil del trabajador de salud para este segmento y las experiencias de otros países. Del curso también participó el doctor Chandra Mouli, responsable del Departamento de Salud y Desarrollo del Niño y el Adolescente de la OMS.
El objetivo del taller consiste en formar facilitadores para la adecuación de los servicios de salud del país de acuerdo con las necesidades de los adolescentes, en el marco de la atención por ciclo de vida. A partir de la capacitación, se espera que técnicos y referentes del sistema sanitario local puedan realizar una evaluación sobre las prestaciones que realizan.
En el marco del taller, Maddaleno y el representante de la OPS/OMS en Argentina, Pier Paolo Balladelli, se reunieron con los secretarios de Determinantes de la Salud y Relaciones Sanitarias, Eduardo Bustos Villar; y de Promoción y Programas Sanitarios del Ministerio de Salud, Máximo Diosque, para analizar la cooperación con el país.
Durante el encuentro, destacaron la importancia de que los servicios para adolescentes tengan una visión integradora de la salud, teniendo en cuenta los temas que involucran a los jóvenes en educación, seguridad y desarrollo. En este sentido, resaltaron la importancia del trabajo en la prevención del embarazo no deseado y en procurar mejorar la comunicación con este sector de la población.
Una de cada cinco personas en el mundo es un adolescente y el 85% de ellos vive en países en desarrollo. Casi dos tercios de las muertes prematuras y un tercio de la carga de morbilidad total de los adultos están relacionadas con comportamientos o condiciones que se inician en la juventud, incluidos el consumo de tabaco, la falta de actividad física, las relaciones sexuales sin protección o la exposición a la violencia. Todos los años, además, alrededor de 16 millones de niñas de entre 15 y 19 años dan a luz en el mundo, en un contexto en el cual el riesgo de morir por causas relacionadas con el embarazo es mucho mayor que en las mujeres de más edad.
La promoción de prácticas saludables durante la adolescencia garantiza una vida más larga y productiva. En este marco, los funcionarios de la OPS/OMS y del Ministerio evaluaron la opción de trabajar con un enfoque por ciclo de vida, teniendo en cuenta la medición de las equidades y la incorporación de la salud en todas las políticas. Maddaleno, en tanto, también planteó la posibilidad de aprovechar la experiencia de Argentina en el trabajo con determinantes sociales (vivienda, saneamiento, etc) para sistematizar las iniciativas de salud en el territorio y permitir que otros países puedan replicarlas.
Para debatir sobre las mejores prácticas para este segmento de la población, los expertos también participan esta semana de la octava edición del Congreso Argentino de Salud Integral del Adolescente que realiza la Sociedad Argentina de Pediatría hasta este sábado, con la participación de numerosos referentes del sector sanitario y juvenil.
