Puerto Príncipe, 12 de julio de 2024 (OPS) - Desde agosto de 2023, la violencia armada en el área metropolitana de Puerto Príncipe ha obligado a muchas familias a abandonar sus hogares, lo que ha provocado un desplazamiento masivo de la población a sitios improvisados como escuelas y establecimientos públicos. Ante esta crítica situación, el Ministerio de Salud Pública y Población (MSPP), con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y USAID a través del proyecto «Sostenimiento y ampliación de la respuesta sanitaria al cólera en Haití», ha coordinado una respuesta de emergencia, uno de cuyos principales componentes es el apoyo psicosocial a las poblaciones que sufren traumas relacionados con su desplazamiento y el temor a epidemias, como el cólera, exacerbadas por sus nuevas condiciones de vida.
«Huir con mis hijos bajo los disparos automáticos fue una experiencia traumática. Hoy, esos recuerdos me persiguen y me cuesta caminar por la calle», dice Venita, de 50 años, de Carrefour-Feuilles y actual residente en el emplazamiento del Lycée Anténor Firmin.
Ella es una de las muchas personas desplazadas que se han beneficiado de la asistencia psicosocial de los especialistas del MSPP apoyados por la OPS/OMS. «La gestión de esta crisis, y en particular el control de epidemias como el cólera, no se limita al aspecto médico; requiere un enfoque integrado que aborde también el trauma psicológico y las precarias condiciones de vida de las poblaciones desplazadas», subraya el Dr. Yanick Mutani, consultor en salud mental de la OPS.
Desde principios de 2024, se han desplegado 10 psicólogos y 10 trabajadores sociales en 10 sitios de personas internamente desplazadas para llevar a cabo una serie de actividades destinadas a reforzar la resiliencia individual y comunitaria. Se ofrecieron sesiones de apoyo psicológico individual a más de 700 personas en situación de angustia intensa, mientras que las sesiones de grupo ayudaron a promover la resiliencia colectiva entre 1.400 personas. Más de 400 niños participaron en actividades recreativas y psicoeducativas para ayudarles a superar sus experiencias traumáticas. Además, se organizaron talleres de sensibilización para proporcionar información sobre prácticas de higiene y salud mental, reduciendo así el estigma asociado a los trastornos psicológicos y al cólera para unas 1.700 personas. En total, más de 4.400 desplazados internos se han beneficiado de este apoyo.
«El miedo a la epidemia de cólera nos está afectando mucho. Las consultas de salud mental y la medicación me han aliviado un poco. Las sesiones regulares de grupo también me han ayudado mucho», concluye Venita.
La violencia armada ha desplazado hasta ahora a más de medio millón de personas, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Este aumento constante del número de desplazados internos subraya la necesidad urgente y permanente de apoyo en materia de salud mental. La OPS/OMS mantiene su compromiso de proporcionar apoyo psicosocial esencial para ayudar a estas poblaciones a superar los retos de sus nuevas condiciones de vida y fortalecer su resiliencia ante las crisis sanitarias y sociales.