Periodistas y comunicadores del país, especialmente de las provincias con población indígena, afrodescendiente y montubias, participaron en el intercambio de conocimientos sobre salud mental y CODIV-19. Estos encuentros se realizan todos los jueves con una temática diferente, como parte de las actividades del Plan Nacional de Promoción de la Salud y Comunicación de Riesgo, liderado por el MSP, Organizaciones indígenas, CORAPE, y el apoyo de la OPS/OMS, entre otras instituciones.
En esta capacitación, Adrián Díaz, asesor de la OPS/OMS, destacó la importancia del cuidado mutuo de los integrantes de las familias y comunidades y describió los tres principios básicos de actuación de la primera ayuda psicológica “Observar: el cumplimiento de las medidas de protección, las necesidades especiales de algunas personas, especialmente adultos mayores, y las reacciones de angustia profunda que pueden experimentar algunas personas. Escuchar: acercarse a las personas que pueden necesitar ayuda; conversar sobre sus necesidades y preocupaciones. Conectar: Ayudar a las personas que no pueden acceder a ciertos bienes y servicios, así como para hacer frente a sus problemas, proporcionar información veraz.
Los adultos mayores y las personas con condiciones crónicas o discapacidad, son los principales grupos con necesidades especiales, por ser más susceptibles de presentar formas graves de COVID-19. Así como también los niños y niñas por la necesidad de adecuar las explicaciones de la situación actual para que puedan tener una mejor comprensión de las medidas de distanciamiento y protección personal, familiar y comunitaria.
“Como toda situación de emergencia, las personas están expuestas a un alto riesgo de afectación de su salud física y mental. Entre las principales reacciones relacionadas con la salud mental, destacó a los trastornos del sueño, aislamiento, conductas regresivas, agitación, tristeza, angustia, ira, dolor de pecho, aislamiento, llanto, irritabilidad y culpa” Estas manifestaciones son esperables, normales, y de acuerdo a cómo vayamos superando la emergencia, estos síntomas irán desapareciendo, manifestó Adrián Díaz.
En este encuentro se socializaron algunas recomendaciones para cuidar la salud mental, entre las principales se destacan:
- Fortalecer el intercambio y conexión con las familias, amigos y redes cercanas; en este sentido se habla de distanciamiento físico y no social.
- Minimizar el tiempo que se dedica a mirar, leer o escuchar noticias que le causen ansiedad o angustia.
- Buscar información en fuentes confiables y principalmente sobre las medidas prácticas para la protección individual y familiar.
- Consumir alimentos saludables y realizar ejercicios regularmente con rutinas diarias.
- Prestar atención a sus propias necesidades y sentimientos. Tener una mirada de uno mismo, para saber qué nos está pasando. Cómo uno se está sintiendo, qué es lo que está preocupando y a partir de esto identificar algunas soluciones.
- Mantener una rutina habitual de sueño.
- No fue, no beba alcohol, ni consuma otro tipo de drogas para controlar sus emociones.
Finalmente se presentaron algunas sugerencias para el trabajo de los periodistas y comunicadores:
- Comunicar información veraz y verificada;
- Respetar la privacidad y la confidencialidad de las personas
- No juzgar a las personas por sus acciones o sentimientos
- Mostrar empatía con las personas que tienen COVID-19
- Cuidarse y cuidar a sus familias, amigos/as y compañeros de trabajo y comunidad.