Tegucigalpa, 11 de noviembre de 2020 (OPS/OMS).-La III reunión ordinaria de la Mesa de Cooperantes en Salud (CESAR) se llevó a cabo junto al Clúster de Salud del Equipo Humanitario en Honduras, con el objetivo de analizar de manera conjunta la situación de las emergencias sanitarias en el país, identificar las necesidades más urgentes, conocer la cooperación brindaa por las organizaciones cooperantes del sector salud y explorar las oportunidades para armonizar el abordaje coordinado por parte de todos los cooperantes.
La agenda incluyó el análisis epidemiológico de la pandemia, daños a los sistemas ocasionados por ETA, el análisis del sector salud ante las emergencias por la Secretaría de Salud y finalmente la respuesta de la cooperación ante las emergencias.
Piedad Huerta dio a la bienvenida a todas las agencias participantes en esta reunión, como coordinadora de la mesa CESAR. "Hemos hecho grandes esfuerzos para alinear la cooperación en salud a las necesidades del país", dijo Huerta a las autoridades nacionales presentes.
También informó que Alice Shackelford, presidenta pro tempore del G-16 y Coordinadora Residente del Sistema de Naciones Unidas, manifestó el compromiso del SNU para colaborar en la atención de las emergencias que azotan el país y su solidaridad con el pueblo y gobierno hondureño. La Sra. Shackelford se encuentra en la zona norte, reconociendo de primera mano las necesidades en las zonas más afectadas por la tormenta ETA.
La Ministra de Salud, Alba Consuelo Flores brindó un análisis de las necesidades del sector salud ante las emergencias que azotan el país. Además de los informes presentados, informó que se instaló un centro de operaciones para el COE Salud en la Secretaría de Salud. "Las dos emergencias nos ponen un gran reto, ya que hemos tenido que fortalecer el primer y segundo nivel de atención, primero para la COVID-19 y ahora por la emergencia por la tormenta ETA. El reto continua pero cambiando estrategias como las brigadas médicas para la captación de sospechosos y confirmados por COVID-19; se necesitan recursos humanos, medicamentos, suministro de oxígeno y de EPP, pruebas e insumos laboratoriales, pero además necesitamos atender las necesidades de salud de los albergados en todo el país, manteniendo las medidas de bioseguridad y evitar el hacinamiento".
La ministra informó que un 38% de los colaboradores ha sido afectado no solo por COVID-19 sino por daños en sus viviendas o que están en albergues por haberlas perdido. Ante esto seguimos con la necesidad de mantener los servicios esenciales y provisión de servicios, las coberturas de vacunación; por lo que con la OPS hemos hecho un llamamiento para recibir Equipos Médicos de Emergencia (EMT), priorizando los lugares donde se ubicarán.
También pidió a los cooperantes apoyo para desplegar equipos de respuesta médica a los albergues priorizados con toda la logística para los albergues, reconociendo el apoyo de cada uno de los donantes durante la pandemia.
La Licda. Karen Najarro, Subsecretaria de Cooperación Internacional, de la Cancillería, se presentó y dijo "agradezco todo el apoyo de la cooperación internacional durante las recientes emergencias, fortaleciendo las capacidades de las instituciones gubernamentales para su abordaje integral".
La Dra. Karla Pavón, jefe de la Unidad de Vigilancia de la Salud hizo una presentación sobre la situación epidemiológica de la COVID-19 en el país, mostrando que los departamentos más afectados son Cortés y Francisco Morazán, seguidos por Atlántida, Colón, Valle e Islas de la Bahía (departamentos con mayor tasa de incidencia). Las edades con mayor infección están entre 20-39 años. La diabetes mellitus, la hipertensión arterial son las dos comorbilidades más frecuentes. La Dra. Pavón informó que con el apoyo de la OPS/OMS, a partir de este mes se cuenta con una segunda prueba diagnóstica, las pruebas de antígenos, que serán aplicadas en los albergues en primera instancia, ya que su rapidez permite una intervención oportuna. "Se necesita seguir fortaleciendo el diagnóstico, pero se necesitarán también las pruebas rápidas para el tamizaje. Seguimos necesitando la prueba PCR-TR que es el gold standard", dijo la Dra. Pavón.
La Dra. Ida Molina, jefe del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) presentó los avances del país en el plan nacional para la introducción de la vacuna de COVID-19 al esquema nacional de vacunación, en un esfuerzo conjunto entre la Secretaría de Salud, IHSS, ARSA, CNI, UNICEF y la cooperación técnica permanente de la OPS/OMS.La Dra. Molina mencionó que el plan incluye aspectos de factibilidad financiera, el análisis del desempeño del PAI para introducir la vacuna (recursos humanos, coberturas de vacunación, logística, cadena de frío), entre otros.
Su presentación incluyó la importancia de que la Ley Nacional de Vacunas exige que las vacunas se compren por el Fondo Rotatorio de la OPS, lo que es un beneficio no solo económico sino que garantiza la calidad y cooperación técnica en todo el proceso. Se presentaron los escenarios para el acceso a la vacuna para el gobierno, el IHSS y la empresa privada. El plan será enviado a la mesa de cooperantes para evaluar la posibilidad de financiar la brecha identificada para llevarlo a cabo.
El Dr. Alcides Martínez, Director General de Redes presentó los daños al sistema de salud, ocasionados por la tormenta tropical ETA. "Tenemos una doble alerta roja, dijo Martínez, que somete a la red de servicios a una condicionalidad diferente. Gracias a la OPS/OMS que nos permitió elaborar un plan de inmediato, trasladando un equipo de salud tan pronto se restableció el paso a la costa norte. En su presentación el Dr. Alcides mencionó las afectaciones en los establecimientos de salud del primer nivel y hospitales; en Cortés (especialmente La Lima), Atlántida, Yoro, Islas de la Bahía, entre otros; dañando su mobiliario y equipamiento".
Actualmente el equipo de Salud y OPS realiza la evaluación de daños de los mismos y determinar la capacidad de continuar brindando los servicios a la población. Se identifica la necesidad de medidas de mitigación en algunos hospitales que sufrieron inundaciones, filtraciones en los techos, colapsos de partes de infraestructura, etc.
Otro de los puntos fue la intervención de los cooperantes, donde compartieron la respuesta ante la pandemia y el desastre natural causado por ETA en temas de derechos humanos, migración, agua y saneamiento, salud sexual reproductiva, entre otros.
Entre las conclusiones principales de la reunión es que los cluster están trabajando de forma coordinada y es importante seguir integrando a organizaciones que se están uniendo al trabajo de la emergencia, especialmente la ayuda humanitaria en los albergues. Piedad Huerta concluyó mencionando las líneas de acción que se identifican como prioridades para la cooperación:
- Abordaje de la pandemia de COVID-19 y atención de salud post tormenta ETA.
- Plan de introducción de la vacuna
- Infraestructura de salud dañada por el huracán ETA.