La Asamblea Mundial de la Salud llega a un acuerdo sobre un conjunto decisivo de enmiendas de amplio alcance para mejorar el Reglamento Sanitario Internacional y fija la fecha para ultimar las negociaciones sobre una propuesta de Acuerdo sobre Pandemias

Intergovernmental Negotiating Body (INB) Co-Chair Precious Matsoso of South Africa (left); Working Group on Amendments to the International Health Regulations (2005) (WGIHR) Co-Chair Dr Ashley Bloomfield of New Zealand.
OMS/Pierre Albouy
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Ginebra, Suiza, 1 de junio de 2024 (OPS) — En un paso adelante histórico, la Asamblea de la Salud, la reunión anual que congrega a los 194 países que la componen, acordó hoy un conjunto de enmiendas clave al Reglamento Sanitario Internacional (2005) (RSI) y formuló un compromiso concreto para culminar las negociaciones sobre un acuerdo sobre pandemias de alcance mundial en el plazo de un año, a más tardar, y posiblemente en 2024. Estas medidas decisivas se han adoptado para garantizar que todos los países se doten de unos sistemas integrales y sólidos a fin de proteger la salud y la seguridad de toda la población, dondequiera que esté, frente al riesgo de futuros brotes y pandemias.

Estas decisiones, adoptadas conjuntamente en el último día de la 77.ª Asamblea Mundial de la Salud, constituyen un paso importante de los países para aprovechar las enseñanzas extraídas de distintas emergencias sanitarias mundiales, incluida la pandemia de COVID-19. El conjunto de enmiendas al Reglamento reforzará la preparación, la vigilancia y la respuesta mundiales frente a las emergencias de salud pública, incluidas las pandemias.

«Las históricas decisiones que hoy se han adoptado demuestran el deseo común de los Estados Miembros de proteger a su propia población, y al conjunto del planeta, del riesgo que las emergencias de salud pública y las futuras pandemias suponen para todos nosotros », declaró el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS. «Las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional reforzarán la capacidad de los países para detectar futuros brotes y pandemias y darles respuesta mediante el fortalecimiento de sus propias capacidades nacionales, y la coordinación entre los Estados, en materia de vigilancia de enfermedades, intercambio de información y respuesta. Esto se sustenta en el compromiso con la equidad, la comprensión de que las amenazas para la salud no reconocen fronteras nacionales y que la preparación es un empeño colectivo.»

El Dr. Tedros añadió: «La decisión de concluir el Acuerdo sobre Pandemias a lo largo del próximo año demuestra hasta qué punto los países lo desean y cuán urgente lo ven, porque no estamos hablando de si habrá una nueva pandemia, sino de cuándo se producirá. El fortalecimiento que se ha aprobado hoy del RSI es un poderoso trampolín para completar el Acuerdo sobre Pandemias, que, una vez culminado, puede ayudar a evitar que se repita la devastación que la COVID-19 provocó tanto en la salud como en las sociedades y las economías».

Las nuevas enmiendas al RSI comprenden:

  • la introducción de una definición de emergencia pandémica para poner en marcha una colaboración internacional más eficaz en respuesta a eventos que podrían dar lugar a una pandemia o que ya constituyen una. Esta definición de emergencia pandémica supone un nivel de alarma más elevado que se basa en los mecanismos vigentes del RSI, incluida la determinación de una emergencia de salud pública de importancia internacional. De acuerdo con la definición, una emergencia pandémica es una enfermedad transmisible que tiene, o entraña un alto riesgo de tener, una amplia propagación geográfica a varios Estados o dentro de ellos; que excede, o entraña un alto riesgo de exceder, la capacidad de los sistemas de salud para responder en esos Estados; que provoca, o entraña un alto riesgo de provocar, considerables perturbaciones sociales y/o económicas, incluidas perturbaciones en el tráfico y el comercio internacionales; y que requiere una acción internacional coordinada rápida, equitativa y reforzada, con un enfoque que abarque a todo el gobierno y a toda la sociedad;
  • un compromiso con la solidaridad y la equidad en cuanto al fortalecimiento del acceso a los productos médicos y al financiamiento. Esto incluye establecer un Mecanismo Financiero de Coordinación para apoyar la determinación de la financiación necesaria para «dar una respuesta equitativa a las necesidades y las prioridades de los países en desarrollo, en particular con miras a desarrollar, fortalecer y mantener las capacidades básicas», y otras capacidades relacionadas con la prevención, la preparación y la respuesta frente a emergencias pandémicas, y permitir el acceso a esta financiación;
  • el establecimiento de un Comité de los Estados Partes para facilitar la aplicación efectiva del Reglamento en su versión enmendada. El Comité promoverá y apoyará la cooperación entre los Estados Partes para la aplicación efectiva del RSI; y
  • la Creación de Autoridades Nacionales para el RSI a fin de mejorar la coordinación en lo que respecta a la aplicación del Reglamento a nivel nacional y entre los países.

«La experiencia adquirida en las epidemias y las pandemias, desde el ébola y el zika hasta la COVID-19 y la viruela símica, nos mostró en qué áreas necesitábamos dotarnos de mejores mecanismos de vigilancia, respuesta y preparación en materia de salud pública en todo el mundo», declaró el Dr. Ashley Bloomfield, de Nueva Zelandia, Copresidente del Grupo de Trabajo sobre las Enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional (2005) y del Grupo de Redacción que facilitó las negociaciones sobre el conjunto de enmiendas durante la Asamblea Mundial de la Salud. «Los países sabían qué había que hacer, y lo hicimos. Me siento profundamente orgulloso de haber formado parte de este proceso».

El Dr. Abdullah Assiri, del Reino de la Arabia Saudita y también Copresidente del Grupo de Trabajo, añadió: «Las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional refuerzan los mecanismos de protección y preparación colectivas frente a los riesgos de brotes y emergencias pandémicas. La poderosa demostración de apoyo global a un Reglamento más robusto a la que hemos asistido hoy constituye también un notable impulso para el proceso de negociación de un Acuerdo sobre Pandemias de alcance internacional, un instrumento sumamente necesario».

Se acuerda un plan para culminar las negociaciones para un Acuerdo sobre Pandemias

Los países acordaron seguir negociando la propuesta de Acuerdo sobre Pandemias para mejorar la coordinación, la colaboración y la equidad a escala internacional para la prevención, preparación y respuesta frente a futuras pandemias.

Los Estados Miembros de la OMS decidieron prorrogar el mandato del Órgano de Negociación Intergubernamental, establecido en diciembre de 2021, para que ultime la labor de negociación de un Acuerdo sobre Pandemias en el plazo de un año, para la Asamblea Mundial de la Salud en 2025, o antes, si es posible, en una reunión extraordinaria de la Asamblea de la Salud en 2024.

«Hubo un claro consenso entre todos los Estados Miembros acerca de la necesidad de un nuevo instrumento para ayudar al mundo a combatir mejor una pandemia en toda regla», manifestó la Sra. Precious Matsoso, de Sudáfrica, Copresidenta tanto del Órgano de Negociación Intergubernamental del Acuerdo sobre Pandemias como del Grupo de Redacción sobre los puntos del orden del día de la Asamblea Mundial de la Salud relativos al Órgano de Negociación Intergubernamental y el Reglamento Sanitario Internacional.

El otro Copresidente del Órgano de Negociación Intergubernamental, el Sr. Roland Driece, de los Países Bajos, declaró: «El gran resultado que ha supuesto hoy la aprobación de las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional nos dará el impulso que necesitamos para finalizar el Acuerdo sobre Pandemias. Claramente, existe la voluntad y el propósito de hacerlo, y ahora disponemos del tiempo necesario para culminar este acuerdo para las próximas generaciones».

Notas de la redacción

El RSI (2005), el instrumento que tomó el relevo del Reglamento Sanitario Internacional de 1951, se concibió para maximizar los esfuerzos colectivos encaminados a manejar los eventos de salud pública y, al mismo tiempo, reducir al mínimo las perturbaciones que estos pudieran causar a los viajes y el comercio. Hay196 Estados Partes: los 194 Estados Miembros de la OMS más Liechtenstein y la Santa Sede.

En una reunión extraordinaria de la Asamblea de la Salud celebrada en diciembre de 2021, los Estados Miembros de la OMS pusieron en marcha el proceso para elaborar el primer acuerdo mundial sobre pandemias, con el fin de evitar que se repitieran las repercusiones a escala mundial para la salud, así como las económicas y las sociales, de la COVID-19.