CD59/6 - Hoja de ruta para la transformación digital del sector de la salud en la Región de las Américas

CD59/6 - Hoja de ruta para la transformación digital

Introducción

1. Las personas que más necesitan el sistema de salud son con frecuencia quienes tienen menos acceso a él. Las tecnologías digitales pueden contribuir a aumentar el acceso, pero los grupos poblacionales más vulnerables en materia de salud tienen normalmente los niveles más bajos de conexión y conocimiento de la salud digital. En la Región de las Américas, cientos de millones de personas siguen teniendo que hacer frente a la discriminación estructural, la exclusión y la desigualdad debido a la falta de acceso a las tecnologías digitales y a los posibles beneficios para la salud asociados a su uso. Existe la necesidad urgente de hacer una transformación digital del sector de la salud, pero debe ser una transformación que apunte específicamente a garantizar el acceso equitativo para todos los grupos poblacionales, en especial los que están en situación de vulnerabilidad. Un enfoque hacia la transformación digital que no sea equitativo podría resultar contraproducente y desfavorecer a los grupos vulnerables aún más.

2. La pandemia de COVID-19 ha agudizado la necesidad de adoptar con prontitud soluciones digitales en la salud pública. Los sistemas de información y las soluciones digitales en materia de salud que son accesibles y están listas para usar han resultado cruciales para prestar atención de salud a todos los niveles del sistema: el paciente, la comunidad, el equipo de atención, la organización de atención de salud, y el entorno político y económico. Las soluciones digitales también serán fundamentales en la etapa de recuperación y reconstrucción posterior a la pandemia. La respuesta a la pandemia ha puesto en evidencia la necesidad de introducir cambios sistémicos para lograr soluciones digitales eficaces. Estos cambios pueden dar lugar a maneras nuevas e innovadoras de cumplir el mandato del sector de la salud.

3. Esta política busca brindar apoyo a los ministerios de salud para que participen de una manera segura, ética, equitativa, inclusiva y costo-eficaz en los procesos de transformación digital de los gobiernos, con miras a acelerar la adopción y aplicación de soluciones de salud digital interoperables en todos los sectores, mediante un enfoque de múltiples interesados directos. Dado que las herramientas digitales para la salud varían en cuanto a su alcance y finalidad, se requiere comprender el valor y los requisitos específicos de cada tecnología, y debe considerarse además el acceso a la telefonía móvil, la electricidad e Internet. También es necesario contar con pautas que ayuden a los países a crear conjuntamente y adoptar soluciones conjuntas, así como a formular políticas públicas teniendo en cuenta las perspectivas y los conocimientos de múltiples interesados directos. Este proceso debería guiarse siempre por el respeto de los derechos individuales, las consideraciones éticas relativas al manejo de los datos personales, y el consentimiento informado, con especial énfasis en la privacidad, la seguridad, la propiedad, la preservación y la confidencialidad.