Contribución de Felipe Mejia Medina, membro del equipo de IS4H y de la red de expertos
La emergencia de la pandemia de covid-19 ha mostrado los beneficios que puede tener para la salud pública y para los individuos el disponer de las tecnologías de información y comunicación adecuadas, así como del conocimiento y formación para darles uso. Sin embargo, para poder aprovechar el gran potencial que tiene la salud digital en la región de las Américas, y con el objetivo de no dejar a nadie atrás y reducir así la brecha digital, se hace indispensable el acceso y adopción de las diversas TIC.
Las gráficas 1i y 2ii nos muestran cómo han ido cambiando las suscripciones a la telefonía celular y el porcentaje de la población usando internet, respectivamente. Observamos que existen grandes diferencias. A pesar de que la media mundial está en 105 suscripciones a telefonía celular por cada 100 personas, los países de altos ingresos reportan 125 por cada 100 personas, mientras que los de bajos ingresos reportan 62. Es de anotar que América Latina y el Caribe cuenta con poco más de la media mundial con 107 suscripciones a telefonía celular por cada 100 personas. En comparación, vemos que la media mundial de personas usando el internet es de 46%, con una enorme diferencia entre países de altos ingresos, con 82%, y países de bajos ingresos, con 14%. Como referencia, vemos a América Latina y el Caribe con el 58%.
Esto nos indica que, para no dejar nadie atrás, es crucial acercar esa brecha tecnológica y digital entre los países de altos ingresos y los de bajo. Podríamos entonces preguntarnos, ¿cuánto tiempo tomaría cerrar esa brecha? Esto es difícil de responder pues depende en gran medida de la situación particular de cada región, pero podemos tomar como referencia los tiempos de adopción de otras tecnologías que, en su momento, han sido claves en la lucha contra la desigualdad económica y las inequidades en salud.
El gráfico 3iii nos muestra para los Estados Unidos, la adopción de diversas tecnologías entre 1860 y 2019.
Vemos que se requirieron:
- 129 años para el inodoro alcanzar en 1989 el 100% de los hogares.
- 120 años para el agua potable alcanzar en 1980 el 100% de los hogares.
- 99 años para la telefonía fija alcanzar en 2002 su pico más alto de 95%.
- 78 años para el automóvil alcanzar en 1993 su pico más alto de 92%.
- 48 años para la electricidad alcanzar en 1956 el 100% de los hogares.
- 47 años para la radio y para el refrigerador alcanzar en 1971 el 100% de los hogares.
- 25 años para el teléfono celular pasar del 10% al 96% de adopción en 2019.
- 24 años para el computador pasar del 20% al 89% de adopción en 2016.
- 23 años para la internet pasar del 10% al 88% de adopción en 2016.
- 14 años para el social media alcanzar el 80% de adopción en 2017.
- 7 años para la tableta alcanzar el 64% de adopción en 2017.
Lo anterior nos muestra que el tiempo requerido para una adopción mayoritaria de tecnologías ha ido acortándose con el tiempo. Al menos en lo que a los Estados Unidos se refiere, pero es de suponer que hay un comportamiento similar, quizás no con el mismo nivel de aceleración, en el resto del mundo. Esto sugiere que acortar la brecha digital actual, en cuanto a acceso a las TIC más recientes, debería tomar notablemente menos tiempo que lo requerido para, por ejemplo, la radio o la electricidad.
Esto, por supuesto, depende en gran medida de las circunstancias sociales, políticas, económicas y culturales particulares de cada país y región.
i Hannah Ritchie (2017) - "Technology Adoption". Published online at OurWorldInData.org. Retrieved from: 'https://ourworldindata.org/technology-adoption' [Online Resource]
ii Ibid.
iii Ibid.