El cólera es una infección intestinal causada por el Vibrio cholerae toxigénico grupo O-1 o grupo O-139. Las situaciones de desastres naturales y de desastres producidos por el hombre que dan lugar al hacinamiento, la escasez del agua potable, la eliminación inapropiada de los desechos humanos y la contaminación de los alimentos durante o después de la preparación, son factores de riesgo de la propagación de la enfermedad.
Descripción
En las áreas sin cólera comprobado, un caso sospechoso de cólera se define como deshidratación severa o la muerte por diarrea acuosa aguda en un paciente de más de 5 años de edad.
En un área donde está ocurriendo una epidemia, un caso presunto de cólera se define como diarrea acuosa aguda, con o sin vómitos, en un paciente de más de 5 años de edad.
Un caso confirmado de cólera se define como la presencia de V. Cholerae 01 confirmada por el laboratorio, en cualquier paciente con diarrea. Una vez que la existencia de cólera se confirma, no es necesario examinar los especímenes de todos los casos o contactos. El monitoreo debe incluir la confirmación en laboratorio de una proporción pequeña de los casos de una manera continua.
Es importante ajustarse a la definición anterior. Sin embargo, para el manejo clínico de los casos de diarrea acuosa aguda en un área donde una epidemia está ocurriendo, se debe sospechar de cólera en todos los casos de pacientes de 2 años de edad o más. Se observará que en Centroamérica el cólera ha afectado predominantemente a los adultos, con un 80% de casos registrados que son individuos de 5 años de edad o más, mientras que 80% de las diarreas debidas a otras causas ocurren en los niños menores de 5 años.
Existen más de 60 serogrupos de Vibrio cholerae pero solamente el O1 causa el cólera. V. cholerae ocurre como dos biotipos-clásico y El Tor. Cada biotipo ocurre como dos serotipos-Ogawa e Inaba. El biotipo de El Tor (aislado por primera vez en Egipto en 1905) ha causado casi todos los brotes de cólera recientes, provocando una proporción mayor de infecciones asintomáticas que el biotipo clásico y sobrevive más tiempo en el ambiente. Puede vivir asociado con ciertas plantas y animales acuáticos que hacen del agua un reservorio importante para la infección.
Antecedentes del cólera en la Región
La segunda pandemia de cólera ocurrió en 1826-37. Esta fue la primera pandemia que azotó Inglaterra y Europa occidental ocasionando miles de muertes a principios de 1830. La epidemia se extendió a Canadá, EUA y México en América del Norte, a Guyana en América del Sur y a Cuba.
En enero de 1991 el Vibrio cholerae 01 entró a un pueblo de la costa de Perú, encabezando la llegada de la séptima pandemia de cólera a América Latina. Para 2000 la epidemia había afectado a 21 de los 35 países de la Región de las Américas. Canadá, Uruguay y el Caribe siguen estando libres de la enfermedad. Además, durante 1999 Argentina, Bolivia, Chile, Costa Rica, Guyana Francesa, Guyana, Paraguay, Panama y Suriname no reportaron casos.
El cólera en el siglo XIX y principios del siglo XX fue predominantemente urbano y presentó elevadas tasas de letalidad (30-50%). En contraste con esto, la epidemia en América Latina en los años noventa es rural y presenta tasas inferiores (alrededor de 2%). También muestra una tendencia a tornarse endémico. Además, es posible identificar un modelo epidemiológico incipiente de carácter estacional.
Riesgos para los viajeros
Las personas que siguen los itinerarios turísticos usuales y que observan las recomendaciones de inocuidad de los alimentos prácticamente no tienen ningún riesgo cuando visitan países que han reportado casos de cólera.
Lo que se debe hacer a nivel institucional y de la comunidad
- Adoptar decisiones políticas a largo plazo para asegurar que todas las poblaciones tengan acceso a sistemas adecuados de eliminación de excretas y a agua potable segura;
- Ofrecer servicios de salud básicos mediante los esquemas de Atención Primaria de Salud. La mayoría de los casos de cólera responden bien a medidas terapéuticas de complejidad baja;
- Prescribir antibióticos sólo en los casos de cólera con signos de deshidratación grave;
- Observar la susceptibilidad de V. cholerae a los antibióticos;
- Mantener especificidad en las notificaciones, utilizando las definiciones de caso desarrolladas por la OPS/OMS;
- Actualizar los perfiles epidemiológicos de las áreas afectadas por el cólera o consideradas en riesgo;
- Establecer adiestramiento periódico del personal médico y paramédico en el manejo clínico de los pacientes con diarrea aguda;
- Mantener suministros esenciales de urgencia, en particular las sales de rehidratación oral (SRO), sueros, y los antibióticos apropiados.
- Establecer "reservas de amortización" en puntos apropiados en el sistema de administración de medicamentos;
- Insistir en el desecho seguro de las heces humanas mediante la educación sanitaria;
- Construir sistemas sanitarios para la eliminación de desechos humanos, apropiados para las condiciones locales.
- Promover la producción de cloro por la comunidad de manera que pueda autoabastecerse.
Lo que se debe hacer a nivel personal
- Beba solo agua segura (potable, hervida durante un minuto o más, o agua que se ha desinfectado con tabletas de cloro o yodo);
- Evitar alimentos crudos (con excepción de las frutas u hortalizas a las cuales se les puede quitar la cáscara);
- Los alimentos deben estar cocinados hasta que estén calientes por dentro y por fuera; comerlos mientras están todavía calientes;
- Lavar y secar cuidadosamente los utensilios de cocinar o de servir;
- Lavarse las manos cuidadosamente con jabón después de ir al inodoro y antes de preparar o comer los alimentos o de alimentar a los niños;
- En las emergencias mientras se está construyendo una letrina mejor, se puede usar una fosa sencilla (0,3 x 0,3 metros y una profundidad de 0,5 metros) ubicada al menos a 30 metros del pozo u otra fuente de agua potable. Las letrinas deben estar ubicadas por debajo del nivel de la fuente de agua. Evite el suelo pantanoso.
Lo que no se debe hacer
- No comer moluscos y crustáceos u otros pescados y mariscos provenientes de aguas contaminadas, a menos que se cocinen bien;
- No comer hortalizas crudas;
- No lavar los utensilios de cocinar o comer con agua que se sabe está contaminada;
- No bañarse en agua que se sabe está contaminada;
- No mezclar alimentos crudos con alimentos cocinados;
- No beber leche que no se ha pasteurizado, a menos que se haya hervido adecuadamente;
- No comer helado o usar hielo, a menos que sea de una fuente segura;
- No tomar antibióticos, a menos que los prescriba un trabajador de salud;
- No establecer cuarentena en un esfuerzo para controlar la propagación del cólera.
Nota: El uso de marcas de comercio es para ayudar con la identificación pero no significa la aprobación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS)
Lecturas sugeridas
- "WHO Guidelines for cholera control", Revised 1992 WHO/CDD/SER.80.4 REV 4 (1992) Orig. English. Spanish version: "Lineamientos para el control del cólera".
- WHO "Guidance on formulation of national policy on the control of cholera" WHO/CDD/SER/92.16 REV.1 Original Spanish-English version: "Lineamientos de la OPS para formular una política nacional de control del cólera".
- WHO "Diarrhea management training course: guidelines for conducting clinical training courses at health centers and small hospitals" Geneva, WHO, 1990 WHO/CDD/SER/90.2 (English only)
- WHO "Guide to simple sanitary measures for the control of enteric diseases". Geneva, WHO, 1974 (English only)
- Manual for laboratory investigations of acute enteric infections. WHO/CDD/83.3 Geneva, WHO, 1987
- The treatment and prevention of acute diarrhea: practical guidelines. 2 ed. WHO, 1989 (Available in English, French, Portuguese, and Spanish)
- Manejo de los pacientes con cólera. WHO/CDD/SER/91.15 Rev. 1 (1992) Geneva, WHO, 1992
- CDC -Centers for Disease Control and Prevention "Health Information for International Travel" 1999-2000 DHHS, Atlanta, GA. On-line version.
- "Textbook of International Health" by Paul F. Basch (Chapter 1 - Historical Background) Department of Health Research and Policy, Stanford University School of Medicine. Oxford University Press (1990)
- La Investigación de las Dolencias Infecciosas en la Historia (Las seis primeras pandemias - pp 274-284) Arturo Romero B, MD Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales. Colección Enrique Pérez Arbeláez, No. 12 Santafé de Bogotá, DC Colombia, 1997