Buenos Aires, 7 de agosto de 2009 (OPS).- Sometidos históricamente a la opresión, exclusión de los procesos de toma de decisiones, marginación, explotación, asimilación forzosa y represión, los pueblos indígenas del mundo suman 370 millones de personas en alrededor de 5 mil poblaciones en 70 países del mundo.
En septiembre de 2007, la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) dio un nuevo impulso a la protección de sus derechos al adoptar una declaración que concluyó con más de 25 años de negociaciones sobre los derechos de pueblos nativos a proteger sus tierras y recursos, y a mantener sus culturas y tradiciones únicas.
Con 143 votos a favor, 4 en contra (Australia, Canadá, Nueva Zelanda y los Estados Unidos), y 11 abstenciones (Azerbaiján, Bangladesh, Bhután, Burundi, Colombia, Georgia, Kenya, Nigeria, Federación Rusa, Samoa, Ucrania), la Asamblea adoptó la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de Pueblos Indígenas, la cual proclama sus derechos colectivos e individuales, y llama a mantener y fortalecer sus identidades culturales, y a enfatizar su derecho a acceder al desarrollo en base a sus propias necesidades y aspiraciones.
Instrumento no vinculante, la Declaración prohíbe la discriminación en contra de pueblos indígenas y promueve su total y efectiva participación en todos los aspectos que les conciernan.
Según el documento, "los indígenas tienen derecho, como pueblos o como personas, al disfrute pleno de todos los derechos humanos y las libertades fundamentales reconocidos por la Carta de las Naciones Unidas, la Declaración Universal de Derechos Humanos y la normativa internacional de los derechos humanos". "Los pueblos y las personas indígenas son libres e iguales a todos los demás pueblos y personas y tienen derecho a no ser objeto de ninguna discriminación en el ejercicio de sus derechos que esté fundada, en particular, en su origen o identidad indígena."
En Argentina
En diciembre de 2008, agencias de Naciones Unidas en Argentina se unieron para fortalecer la atención de los pueblos indígenas. La Organización Panamericana de la Salud (OPS), UNICEF, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y el Centro de Información de Naciones Unidas (CINU) iniciaron un trabajo de coordinación conjunta en este campo.