Una crisis alimentaria mundial está creciendo, nutrida por los conflictos, el cambio climático, los impactos de la pandemia de COVID-19, así como los efectos dominó de la guerra en Ucrania que impulsan el aumento de los precios de los alimentos, el combustible y los fertilizantes. El cultivo y la producción de tabaco conducen a daños ecológicos globales a largo plazo y al cambio climático, y desempeñan un papel crucial en la determinación del futuro de la agricultura y la seguridad alimentaria. La OMS anuncia hoy la campaña mundial 2023 para el Día Mundial Sin Tabaco - centrada en el cultivo sostenible de alimentos en lugar de tabaco.
Actualmente, el tabaco se cultiva en más de 125 países como cultivo comercial, en un área estimada de 4 millones de hectáreas (ha), que es un área más grande que el país de Ruanda. Los efectos nocivos del cultivo sobre el medio ambiente son particularmente evidentes en los países de ingresos bajos y medios.
La campaña alentará a los gobiernos a poner fin a los subsidios para el cultivo de tabaco y a utilizar este ahorro para programas de sustitución de cultivos que contribuyan a la seguridad alimentaria y la nutrición. La campaña también tendrá como objetivo sensibilizar sobre las formas en que la industria tabacalera interfiere en los intentos de sustituir el cultivo de tabaco por cultivos sostenibles, contribuyendo así a la crisis alimentaria mundial.
El Día Mundial Sin Tabaco de 2023 servirá como una oportunidad para movilizar a los gobiernos y los responsables de formular políticas para ayudar a los agricultores a optar por cultivos sostenibles, mediante la creación de ecosistemas de mercado para alternativas de cultivo y animar a al menos 10 000 agricultores en todo el mundo a comprometerse a dejar de cultivar tabaco.
Escasas tierras cultivables y agua se están utilizando para el cultivo de tabaco, destruyendo miles de hectáreas de bosques para hacer espacio para la producción de tabaco y para producir material combustible para curar las hojas de tabaco. Por lo tanto, la tierra fértil está siendo destruida y no se puede utilizarse para producir cultivos alimentarios que tanto se necesitan.
En muchos países donde la producción y el cultivo de tabaco son importantes, la cuestión de los medios de vida a menudo se presenta como un impedimento para la implementación de medidas estrictas de control del tabaco.
“La industria tabacalera está utilizando los medios de vida de los agricultores, mediante la creación de grupos de fachada, para cabildear contra los cambios de política destinados a reducir la demanda de tabaco”, dijo el Dr. Ruediger Krech, Director de Promoción de la Salud. “Necesitamos proteger la salud y el bienestar de los agricultores y sus familias, no solo de los daños del cultivo de tabaco sino también de la explotación de sus medios de vida [como argumento de cabildeo] por parte de la industria tabacalera”.
Los agricultores a menudo tienen acuerdos contractuales con la industria tabacalera y están atrapados en un círculo vicioso de deudas. En la mayoría de los países, la industria tabacalera proporciona a los agricultores semillas y otros materiales necesarios para cultivar tabaco, pero luego descuenta los costos de las ganancias, lo que hace que salir del cultivo del tabaco sea muy difícil, desde la perspectiva del agricultor. Pero, además, la industria tabacalera a menudo no paga a los agricultores un precio justo por su producto y por lo tanto los agricultores a menudo no logran pagar el préstamo en su totalidad.
Con el apoyo de aliados, la campaña global sensibilizará sobre la producción y oportunidades de mercado de las alternativas de cultivo para los productores de tabaco y los alentará a optar por cultivos sostenibles y nutritivos. Estos cultivos alimentarán a sus propias familias y a millones más, a escala mundial, los ayudarán a liberarse del círculo vicioso del cultivo de tabaco, plagado de deudas, y contribuirán a un medio ambiente más saludable en general. La campaña también apoyará a los gobiernos en el desarrollo de políticas y estrategias adecuadas, y en la creación de condiciones de mercado que motiven a los agricultores que cultivan tabaco a sustituir por cultivos de alimentos.