Puerto Príncipe, 5 de agosto de 2024 (OPS/OMS) - La situación de seguridad en Haití ha llevado a cientos de miles de habitantes de la Zona Metropolitana de Puerto Príncipe a huir de la violencia y refugiarse en sitios que, en su mayoría, no son aptos para albergar a estas poblaciones internamente desplazadas. El hacinamiento y la insuficiencia de las infraestructuras de salud en estos lugares favorecen la propagación de epidemias y enfermedades.
Ante esta amenaza, la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) ha intensificado su apoyo al Ministerio de Salud Pública y Población (MSPP), con el respaldo financiero del Fondo de Emergencia CERF, a través de una subvención a la Dirección de Salud del Departamento de Occidente (DSO), para atender las apremiantes necesidades de higiene y saneamiento de estas poblaciones. Desde el 1 de junio de 2024, 12 nuevos emplazamientos para personas desplazadas se han beneficiado del despliegue de un equipo multidisciplinar que incluye expertos en higiene y saneamiento para hacer frente a la emergencia sanitaria, lo que eleva a 33 el número total de sitios para personas internamente desplazadas que reciben apoyo de la OPS/OMS para una población estimada de casi 50.000 personas.
Formación y despliegue de responsables de higiene y saneamiento
Los días 30 y 31 de mayo de 2024, se organizó una sesión introductoria para los 31 nuevos responsables de vigilancia epidemiológica y los 21 nuevos responsables de higiene. El objetivo era proporcionarles conocimientos básicos sobre técnicas de saneamiento e higiene en los emplazamientos de desplazados internos. Los participantes recibieron formación sobre los aspectos básicos de la calidad del agua, el saneamiento, la sensibilización, la descontaminación y la notificación de datos.
"Aprendí mucho con esta formación. Cuando comparto estos conocimientos con los demás, me entienden y siempre me hacen preguntas. El papel de un higienista es descontaminar, sensibilizar, visitar a las familias, instalar puntos de agua y comprobar las condiciones sanitarias del campamento", dice Destin Kethia, higienista en el centro de desplazados internos Faculté de Linguistique Appliquée.
También se incluyó en la formación una sesión de sensibilización sobre la protección contra la explotación y el abuso sexuales y el acoso (PRSEAH). Elizabeth Louisma, punto focal de PRSEAH en la OPS/OMS, declaró: "Sensibilizar a nuestro personal sobre los riesgos de la explotación y el abuso sexuales es esencial para garantizar la seguridad y el bienestar de las poblaciones internamente desplazadas. Nuestro objetivo es asegurarnos de que todos los miembros del personal comprendan la importancia de estas medidas para prevenir los abusos y proteger a las poblaciones vulnerables.
Apoyo logístico y equipos WASH
Desde el comienzo de la crisis, la OPS/OMS ha proporcionado considerable apoyo logístico, incluida la donación de varias toneladas de equipos WASH (agua, saneamiento e higiene). Recientemente, se distribuyeron 3,77 toneladas de equipo, incluidas mantas, cubos, 130.000 tabletas de aquatabs, cloro y pulverizadores, a los 33 lugares de los que se ocupa la Dirección de Salud del Departamento de Occidente (DSO).
"Con lo que más tengo que lidiar es con la falta de agua para que la gente beba y se bañe... Es el mayor reto que intento superar. A pesar de ello, todavía no hemos podido combatirlo del todo", explica Démosthène Philippe, higienista en el sitio para personas internamente desplazadas del Ministerio de Comunicación.
Epidemias bajo control a pesar de los nuevos sitios de personas internamente desplazadas (IDP)
Los esfuerzos combinados de la OPS/OMS y el MSPP han evitado hasta ahora brotes de cólera y COVID-19 en los sitios de personas internamente desplazadas. Las intervenciones han incluido el establecimiento de protocolos de descontaminación, la sensibilización de la población, la mejora de las condiciones sanitarias y el fortalecimiento de la vigilancia y la respuesta epidemiológica con equipos dedicados sobre el terreno. Estas medidas han reducido considerablemente el riesgo de propagación de la enfermedad.
Sin embargo, el reto sigue siendo enorme, ya que sigue habiendo personas desplazadas no sólo en la Zona Metropolitana de Puerto Príncipe sino también en otras partes del país. La situación requiere una vigilancia constante y la adaptación de las estrategias para satisfacer las crecientes necesidades. Es crucial seguir proporcionando apoyo logístico y reforzando la capacidad de los equipos sobre el terreno para garantizar la salud y la seguridad de las poblaciones desplazadas.
