Nairobi, 31 de marzo de 2011 (ONU/ Onusida).- A 30 años del inicio de la epidemia de sida, las inversiones en la respuesta frente a esta enfermedad están dando resultados, según un nuevo informe dado a conocer hoy por el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
El informe, titulado Unidos por el acceso universal: hacia el logro de cero nuevos casos de infección por el VIH, cero discriminaciones y cero muertes relacionadas con el sida, destaca que la tasa mundial de nuevos casos de infección por el VIH está disminuyendo, el acceso al tratamiento está aumentando y el mundo ha hecho progresos importantes en la reducción de la transmisión maternoinfantil del VIH.
Entre 2001 y 2009, la tasa de nuevos casos de infección por el VIH en 33 países, incluidos 22 del África subsahariana, disminuyó en al menos 25 por ciento. A fines de 2010, más de 6 millones de personas recibían tratamiento antirretrovírico en los países de bajos y medianos ingresos; y en 2009, la cobertura mundial de servicios de prevención de la transmisión maternoinfantil del VIH superó por primera vez el 50 por ciento.
Sin embargo, a pesar de los logros recientes, el informe subraya que los beneficios son frágiles. Por cada persona que inicia el tratamiento antirretrovírico, dos se infectan con el VIH; y todos los días, 7 mil personas se infectan, entre ellas mil niños. Las infraestructuras nacionales débiles, los déficit de financiación y la discriminación contra los grupos de población vulnerables están entre los factores que siguen obstaculizando el acceso a los servicios de prevención, tratamiento, atención y apoyo relacionados con la infección por el VIH.
El informe del Secretario General se basa en los datos presentados por 182 países y proporciona cinco recomendaciones fundamentales que serán examinadas por los líderes mundiales en la Reunión de Alto Nivel de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre el Sida, la cual se celebrará del 8 al 10 de junio de 2011, en Nueva York.
"En este momento crítico, los dirigentes del mundo tienen una oportunidad única para evaluar los logros y las deficiencias en la respuesta mundial al sida", dijo Ban Ki-moon en la rueda de prensa que tuvo lugar en la capital de Kenya. "Debemos tomar decisiones audaces que transformen radicalmente la respuesta al sida y nos ayuden a avanzar hacia una generación sin VIH."
"A 30 años del inicio de la epidemia, es imprescindible que hoy revitalicemos la respuesta para tener éxito en los años venideros", sostuvo el director ejecutivo del Onusida, Michel Sidibé, quien acompañó a Ban Ki-moon en la presentación del informe. "Los avances en la prevención de la infección por el VIH y en el tratamiento antirretrovírico son considerables, pero tenemos que esforzarnos más para que la gente no se infecte: nunca antes había sido tan necesaria una revolución en la prevención de la infección por el VIH".
Rebecca Auma Awiti, una madre que vive con el VIH y que trabaja como coordinadora sobre el terreno con la organización no gubernamental Women Fighting AIDS en Kenya, relató su historia en la conferencia de prensa: "Gracias al movimiento para lograr el acceso universal, mis tres hijos nacieron sin VIH y yo puedo verlos crecer gracias a que tengo acceso al tratamiento".
Movilización para generar un impacto
El informe Unidos por el acceso universal contiene cinco recomendaciones del Secretario General de las Naciones Unidas para fortalecer la respuesta al sida:
- aprovechar la energía de los jóvenes para revolucionar la prevención de la infección por el VIH;
- reactivar los esfuerzos para lograr el acceso universal a la prevención, el tratamiento, la atención y el apoyo relacionados con la infección por el VIH para 2015;
- trabajar con los países para hacer más rentables, eficaces y sostenibles los programas de lucha contra el VIH;
- promover la salud, los derechos humanos y la dignidad de las mujeres y las niñas; y
- velar por la responsabilización mutua en la respuesta al sida para traducir los compromisos en acción.
El secretario general pidió a todas las partes interesadas que apoyen las recomendaciones que figuran en el informe y las utilicen para cumplir seis objetivos mundiales:
- reducir a la mitad la transmisión sexual del VIH, por ejemplo, entre los grupos de población clave como los jóvenes, los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y en el contexto del trabajo sexual; y prevenir las nuevas infecciones derivadas del consumo de drogas inyectables;
- eliminar la transmisión maternoinfantil del VIH;
- reducir a la mitad las muertes por tuberculosis entre las personas que viven con el HIV;
- asegurar el tratamiento antirretrovírico para 13 millones de personas;
- reducir a la mitad el número de países con restricciones en materia de entrada, estadía y residencia por motivos relacionados con la infección por el VIH; y
- garantizar el acceso igualitario a la educación para los niños que han quedado huérfanos y vulnerables debido al sida.
Dado que la financiación internacional para la asistencia relacionada con la infección por el VIH ha disminuido por primera vez desde el año 2009, el informe alienta a los países a dar prioridad a la financiación de los programas de lucha contra el VIH, incluidos los países de bajos y medianos ingresos que tienen la capacidad de cubrir sus propios costos relacionados con el VIH. También subraya la importancia de la responsabilidad y rendición de cuentas compartidas para garantizar que haya suficientes recursos para la respuesta al sida en los próximos años.