Asunción, 3 de noviembre de 2020 (OPS/OMS).- “El problema que se está dando en los últimos años y es una preocupación de la OPS es que nos estamos quedando sin antibióticos porque estamos usándolos de manera irracional”, afirma el Dr. Romeo Montoya, Asesor de Enfermedades Transmisibles de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) en Paraguay. Aseguró que es importante la regulación en cuanto a prescripción de los antibióticos y que Paraguay ha dado un avance en este tema con la promulgación de la Ley que prohíbe la venta libre de antibióticos.
La resistencia a los antimocrobianos es una amenaza real y silenciosa responsable de unas 700 000 muertes en todo el mundo anualmente, ya que las enfermedades infecciosas son cada vez más difíciles de curar y los tratamientos son más largos y costosos.
¿Cómo se ocasiona esta resistencia?
La resistencia a los antibióticos ocurre cuando la dosis no es la adecuada, de esta forma la bacteria va empezando a tener más fuerza porque no se alcanzó a contenerla completamente. Y a medida que esto va de persona a persona va creando una resistencia. Por ejemplo, yo tengo una infección en la piel y utilizo antibióticos que no es para eso, pero la bacteria empieza a generar ciertas defensas y ya cuando el antibiótico que le combate a él actúa, la bacteria ya ha generado una defensa. Entonces así se va creando una cadena y al final nos lleva a tener problemas porque los antibióticos que estamos utilizando para bacterias ya no son útiles.
¿De qué manera este fenómeno puede significar un retroceso para la medicina moderna?
Nosotros nos podemos quedar sin las herramientas que utilizamos siempre, que son los antibióticos para las bacterias y esto puede ocasionar un problema para la salud de los pacientes tratados. A veces las personas no entienden la diferencia entre un antibiótico y un antiviral. El virus es más difícil de tratar, casi no hay una cura, lo que tratamos son los síntomas y signos del mismo. Por ejemplo a mí me da una influenza ahora con el COVID-19, yo trato los síntomas que son catarro, dolor de cabeza, etc. Sin embargo el antibiótico sí tiene la dosis exacta e ideal para destruir una bacteria, o sea sí es una cura, si nosotros no hacemos un uso adecuado de los antibióticos nos vamos a quedar sin ellos.
¿Cómo está interconectada la salud animal, la salud humana y la inocuidad de alimentos con la resistencia antomicrobiana ?
Existen organismos resistentes en humanos, animales, alimentos y el medio ambiente, por ello es importante que los profesionales de estas áreas no prescriban antibióticos sin necesidad; que las personas no compartan sus medicamentos ni se automediquen y que no se empleen antibióticos en forma innecesaria en la producción agroalimentaria.
A los animales se les aplican una cantidad de antibióticos en su dieta y en su tratamiento, lo cual nosotros también ingerimos por medio de nuestra alimentación. Debemos tener en cuenta que el uso de antimicrobianos en medicina veterinaria es necesario para garantizar la sanidad y el bienestar animal. Pero debemos fomentar el uso adecuado y bajo prescripción de antimicrobianos en la producción animal.
Las enfermedades de los animales pueden generar pérdidas de producción, afectan la seguridad alimentaria e impactan en la salud pública puesto que más de un 75% de las enfermedades animales infecciosas son transmisibles al ser humano. Es por ello que desde la OPS/OMS hablamos del enfoque “Una Salud”.
Entonces vemos que la salud humana, la salud animal y la inocuidad de los alimentos están relacionadas. El enfoque “Una Salud” aborda temas de salud pública desde diferentes disciplinas de las ciencias médicas, veterinarias y medioambientales con la participación de todos los sectores y actores involucrados.
¿Qué acciones toma la OPS/OMS ante esta situación?
La OPS está trabajando de forma coordinada con otras instituciones. Se implementa el proyecto, Trabajando juntos para combatir la resistencia a los antimicrobianos donde estamos 7 países a nivel Regional y en Paraguay trabajamos con la FAO, que es la parte de alimentos y OIE que también ve la parte de salud animal. Junto con ellos, el SENACSA, el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, el Laboratorio Central, el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES) y el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), instituciones que integran el Comité RAM en Paraguay. Estamos alienados con enfoque de “Una Salud”, que es trabajar todas las agencias o todos los actores en un solo impulso para tener mayor fuerza. Es lo que se está haciendo en Paraguay con este proyecto.
Sobre el uso de antibióticos, el Dr. Montoya recordó cinco reglas básicas a tener en cuenta:
- Sólo use antibióticos cuando un profesional de salud certificado se lo recete.
- Siempre tome la receta completa, aun cuando se sienta mejor.
- Nunca use los antibióticos que le sobraron.
- Nunca comparta antibióticos con los demás.
- Prevenga las infecciones lavándose con frecuencia las manos, evitando el contacto con las personas enfermas y manteniendo sus vacunas al día.
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Trabajando juntos para combatir la resistencia a los antimicrobianos
La iniciativa se desarrolla bajo el liderazgo de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), con estrecha colaboración de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y la financiación de la Unión Europea (UE).
