Bogotá, 29 de julio de 2024. 45 delegados de epidemiología, laboratorio y comunicaciones de los municipios de Pamplona, Ocaña, Puerto Santander, Los Patios, Tibú, Villa del Rosario y El Zulia, así como de la Secretaría de Salud de Cúcuta y del Instituto Departamental de Salud de Norte de Santander participaron, del 22 al 25 de julio, en el Taller de Entrenamiento de Equipos de Respuesta Inmediata (ERI) para atención a brotes. Este entrenamiento busca formar equipos robustos capaces de investigar, abordar y controlar riesgos y daños en salud, cumpliendo con los requerimientos del Reglamento Sanitario Internacional (RSI-2005).
El taller se centró en el papel del laboratorio, el fortalecimiento de la resiliencia ante pandemias respiratorias y la comunicación de riesgos y participación comunitaria. Fue liderado por tres expertas de la Organización Panamericana de la Salud / Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) y se desarrolló en el marco de la Preparación para una Influenza Pandémica (Marco PIP) en el que participan nueve países de la Región de las Américas, incluido Colombia. Esta iniciativa, entre otras, busca mejorar el intercambio de conocimientos sobre virus gripales con potencial pandémico y mejorar las capacidades para que los países puedan enfrentar posibles pandemias.
Según Gina Tambini Gómez, representante de la OPS/OMS en Colombia, “es fundamental desarrollar nuevas estrategias para la preparación ante pandemias respiratorias y fortalecer la estructura de respuesta y resiliencia ante emergencias sanitarias. Esto incluye la capacidad de los equipos de respuesta inmediata para identificar y compartir rápidamente información sobre virus con potencial pandémico, preparar a las comunidades para manejar la infodemia y elaborar planes operativos que garanticen el acceso equitativo a contramedidas médicas”.
El taller en Cúcuta utilizó el modelo de aprendizaje basado en problemas, planteando situaciones hipotéticas basadas en hechos reales para que los participantes pudieran identificar y satisfacer necesidades de aprendizaje individual en la práctica. Las experiencias de los participantes se valoraron y utilizaron como herramientas de aprendizaje colectivo.
Además, se reforzaron conceptos clave como riesgo, emergencias en salud pública, brotes y epidemias. Se detalló el proceso para la investigación de brotes, incluyendo preparación, verificación, diagnóstico, identificación de casos y medidas generales de control; se resaltó el rol del laboratorio así como la importancia en este proceso de la correcta recolección, embalaje, transporte de muestras y el uso apropiado de las pruebas de diagnóstico en especial se hizo énfasis en la interpretación de los resultados de Dengue.
También se abordaron la comunicación del riesgo y la participación comunitaria, con un estudio de caso sobre la estrategia de comunicación con enfoque étnico implementada en nueve pueblos indígenas de Colombia durante la pandemia de COVID-19. Los participantes recibieron capacitación en comunicación pública, cambio de comportamiento y gestión de la infodemia, entre otras.
Al finalizar el taller, los asistentes destacaron la calidad de los aprendizajes. “Este taller es excelente. Es una gran herramienta que nos ayuda a responder ante un brote. Uno puede tener experiencia, pero no lo sabe todo. A veces creemos que sabemos lo suficiente, y no es cierto”, comentó una de las participantes. Además, hicieron un llamado a la OPS/OMS para realizar más capacitaciones en otros municipios del departamento, asegurando así una respuesta eficiente ante emergencias sanitarias en Norte de Santander.
