28 de julio de 2022 (OPS) - Con motivo del Día Mundial Contra la Hepatitis, el Ministerio de Salud de Guyana lanza su primer Programa de Tratamiento de la Hepatitis C. Con la cooperación técnica y el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Guyana está recibiendo kits de pruebas rápidas, así como medicamentos que pueden salvar vidas.
"La hepatitis viral sigue siendo una amenaza para la salud pública mundial y el liderazgo de Guyana es una oportunidad para celebrar la colaboración entre las autoridades nacionales, la sociedad civil y otros aliados comprometidos con su eliminación", dijo el Dr. Luis Felipe Codina, representante de la OPS/OMS en Guyana.
La nueva campaña de hepatitis C en Guyana, liderada por el ministro de Salud, Dr. Frank Anthony, es parte de un esfuerzo mundial que se lleva a cabo después de que los Estados miembros de la OMS aprobaran los objetivos de eliminar la hepatitis viral para el 2030. Estos compromisos se renovaron este año con la aprobación de las nuevas Estrategias Mundiales del Sector de la Salud (EMS) sobre el VIH, las infecciones de transmisión sexual y las hepatitis virales por parte de la Asamblea Mundial de la Salud.
"En Guyana, las cifras sobre la hepatitis están disponibles principalmente entre los donantes de sangre, los pacientes de diálisis y, hasta cierto punto, entre los pacientes con VIH o infecciones de transmisión sexual", dijo el Dr. Rainier Escalada, asesor de la OPS en materia de vigilancia sanitaria, prevención y control de enfermedades, y quien trabaja para ofrecer tratamiento médico a 600 pacientes con hepatitis C al inicio de la campaña en Guyana.
Hepatitis es el término médico general que designa la inflamación del hígado, cuyas causas son múltiples. Las hepatitis virales debidas a infecciones por los virus de las hepatitis B o C constituyen una parte importante de las enfermedades y la mortalidad en el mundo. Se calcula que el 57% de los casos de cirrosis hepática y el 78% de los casos de cáncer primario de hígado se deben a las hepatitis B o C.
"Los programas que pretenden eliminar las hepatitis B y C han sido irregulares en todo el mundo, por lo que ampliar el acceso al tratamiento, como lo está haciendo Guyana, es de suma importancia", dijo el Dr. Leandro Sereno, asesor para la Prevención y el Control de las Hepatitis Virales de la OPS. Muchas personas no saben que tienen hepatitis, por lo que no buscan tratamiento, pero “la vacunación oportuna, las pruebas y el tratamiento pueden prevenir enfermedades y muertes.”
Un recién nacido que se vacuna contra la hepatitis B en las primeras 24 horas de vida tendrá protección de por vida. Aunque actualmente no existe una vacuna contra la hepatitis C, que es una infección transmitida por la sangre, una cura eficaz (del 90%) consiste en un tratamiento médico de comprimidos que se ingieren por vía oral durante tres meses.
Los altos costos y el complejo sistema de protección de patentes hacen que el tratamiento de la hepatitis C sea prohibitivo en muchos lugares de la región, pero la OPS ha podido facilitar el acceso a varios países.
"A través del Fondo Estratégico de la OPS, nos complace haber ayudado a Guyana a obtener pruebas de diagnóstico rápido de buena calidad y medicamentos que salvan vidas para la hepatitis C a un costo significativamente menor, " dijo el Dr. Codina.
Retrocesos por la COVID-19
La pandemia tuvo un efecto negativo en los esfuerzos internacionales para la eliminación de la hepatitis viral, ya que los servicios sanitarios de todo el mundo se vieron sobrecargados con la respuesta a la COVID-19. Además, los recursos humanos y económicos que se utilizaban para las pruebas y tratamientos se reasignaron para hacer frente al aumento de casos de COVID-19.
“Este problema no es exclusivo de la hepatitis, ya que las restricciones de movilidad y la reorganización de los servicios sanitarios durante la pandemia han afectado al acceso a las pruebas y al tratamiento,” añadió el Dr. Sereno. “Después de la pandemia, los países deben volver a comprometerse y retomar las estrategias de eliminación de la hepatitis para alcanzar los objetivos de eliminación hacia la meta de 2030.”
Para apoyar a los países en la definición de estrategias nacionales, la OMS ha publicado nuevas recomendaciones que alientan a países a ampliar los servicios de pruebas y tratamiento de la hepatitis a través de la descentralización de la atención a los centros de nivel inferior y la integración con los servicios existentes, como la atención primaria.
En los próximos meses, la OPS también seguirá ayudando a los países de la región a aumentar su capacidad de realizar pruebas de detección de la hepatitis C, un esfuerzo apoyado por el Gobierno de los Estados Unidos y otros socios.
La hepatitis en cifras:
El Día Mundial de la Hepatitis se celebra cada año el 28 de julio para concienciar sobre la hepatitis viral, que puede provocar enfermedades graves y cáncer de hígado. En todo el mundo, hay más de 350 millones de personas que siguen viviendo con esta enfermedad potencialmente mortal. La OPS calcula que cada 30 segundos alguien pierde la vida a causa de la hepatitis B o C, por lo que el acceso a las pruebas es crucial.
La OMS calcula que hay unos 5,4 millones de personas que viven con hepatitis B y 4,8 millones con hepatitis C crónica en la región de las Américas.
Los datos regionales más recientes indican que cada año se producen cerca de 10.000 nuevas infecciones por hepatitis B crónica y 23.000 muertes. Aproximadamente el 18% de las personas que viven con hepatitis B han sido diagnosticadas, mientras que solo el 3% de ellas reciben tratamiento.
En cuanto a la hepatitis C, hay 67.000 nuevas infecciones cada año y 84.000 muertes en las Américas. La hepatitis C también está significativamente subdiagnosticada: solo el 22% de las personas infectadas crónicamente han sido diagnosticadas, y solo el 18% de ellas reciben tratamiento.