Buenos Aires, 28 de junio de 2011 (OPS/OMS).- Con el propósito de fortalecer el monitoreo del acceso a tratamiento de las personas con VIH en Argentina, la Dirección Nacional de Sida y Enfermedades de Transmisión Sexual del Ministerio de Salud de Argentina, con el apoyo de Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS), realizó un estudio sobre la utilización de fármacos antirretrovirales (ARV) en Argentina.
El objetivo fue describir el perfil de las terapias antirretrovirales de las personas con VIH en Argentina a efectos de conocer a quienes se encuentran bajo las diferentes líneas de tratamiento, monitorear la calidad de los mismos y contar con insumos para planificar mejor la necesidad de fármacos de tercera línea.
En Argentina se estima que el número de infectados por el VIH asciende a 110 mil. La mitad de ellos conoce su condición y la mayoría se encuentra en seguimiento en los servicios de salud. De ellos, 41 mil reciben medicación antirretroviral, en el 69 por ciento de los casos (aproximadamente 29 mil pacientes) proporcionada por la Dirección de Sida y ETS, y el resto a través de la seguridad social y los servicios de salud prepagos.
El estudio se basó en un corte transversal de los datos existentes al 6 de agosto de 2010. Se utilizó como fuente principal de información la base de datos del padrón de pacientes cubiertos por la Dirección de Sida.
Algunos resultados
Según el estudio, el 3,1 por ciento del total de personas que reciben tratamiento por parte de la Dirección de Sida y ETS del Ministerio de Salud de la Nación son menores de 14 años; el 80 por ciento, tienen entre 14 y 50 años; y el 16,9, más de 50 años. Mientras que los hombres -con un promedio de edad de 41,71 años- representan el 59,8 por ciento del total; las mujeres —con una media de 37,63 años-, el 40,2 por ciento.
Cuatro jurisdicciones del país, según la ubicación de los centros de atención, suman el 82 por ciento de los pacientes: se trata de la Provincia de Buenos Aires (29,1 por ciento); la Ciudad de Buenos Aires (35,84 por ciento), Santa Fe (9,2 por ciento) y Córdoba (8,13 por ciento). Esto coincide con la forma en que se concentra la epidemia en el país.
Por otro lado, el 63,1 por ciento del padrón recibe tratamientos antirretrovirales de primera línea; el 32,73, de segunda línea y el 4,2 por ciento, de tercera. Los esquemas antirretrovirales utilizados y su distribución en líneas de tratamiento coinciden en general con las recomendaciones de las diferentes guías nacionales e internacionales.