Los países de la región abordan esta amenaza que afecta a todas las regiones del mundo. El encuentro está centrado en el desarrollo de estrategias para productos de salud humana y veterinarios.
Buenos Aires, 28 de abril de 2015 (OPS/OMS).- La resistencia antimicrobiana para los productos de salud humana y veterinarios —que se produce cuando los antibióticos dejan de funcionar como tratamiento para las infecciones— es el eje de un encuentro internacional que se realiza esta semana en Buenos Aires con el fin de que los países del Mercosur aborden esta amenaza que afecta a todas las regiones del mundo.
Funcionarios y expertos de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay, Bolivia, Chile y Venezuela participan de esta reunión, organizada por el Ministerio de Salud de la Nación, el Ministerio de Agricultura, el SENASA y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).
El representante regional de la OIE para las Américas, Luis Barcos, explicó que la reunión tiene como objetivo que referentes de distintas instituciones de la región se reúnan para discutir acerca de las acciones de la OIE, las experiencias de Europa en esta temática y las actividades de América en vigilancia integrada para enfrentar este problema. La doctora Awa Aidara-Kane, procedente de la sede de la OMS, en Ginebra, presentó el Plan de Acción de la OMS en la resistencia a los agentes antimicrobianos, en tanto funcionarios locales disertaron acerca la estrategia de Argentina para el control de la resistencia a los antimicrobianos.
La resistencia —tanto en personas como en animales- afecta a muchos agentes infecciosos distintos, pero se centra en la resistencia a los antibióticos en siete bacterias responsables de infecciones comunes graves, como la septicemia, la diarrea, la neumonía, las infecciones urinarias o algunas enfermedades de transmisión sexual.
"Los datos demuestran la existencia de resistencia a los antibióticos en todas las regiones del mundo. Es importante obtener la información a tiempo para poder actuar eficazmente en este tema", indicó el representante interino de la OPS/OMS en Argentina, José Moya, quien recordó además los principales resultados del primer informe mundial de la OMS sobre la resistencia a los antibióticos publicado el año pasado.
Por su parte, el secretario de Promoción y Programas Sanitarios de la Nación, Federico Kaski, explicó que el país viene desarrollando una estrategia conjunta entre los ministerios de Salud y Agricultura, con la colaboración de la OIE, sociedades científicas y universidades de manera de "abordar este problema de manera multisectorial y llevar adelante una respuesta viable que se pueda plasmar en una política pública y un resultado". También participa del encuentro el vicepresidente del SENASA, Luis Carné.
La resistencia a los antibióticos no sólo dificulta el control de las enfermedades infecciosas, sino que además genera problemas en el aspecto económico. Cuando las infecciones se vuelven resistentes a los medicamentos de primera línea es preciso utilizar terapias más costosas. La mayor duración de la enfermedad y su tratamiento, frecuentemente en hospitales, eleva los costos de atención sanitaria y la carga económica para las familias y las sociedades.
Además, el aumento del comercio mundial y los viajes internacionales permite que los microorganismos resistentes se propaguen rápidamente a países y continentes lejanos por medio de las personas y los alimentos.