Así lo indicó el representante de la OPS en Argentina durante el encuentro anual de la Asociación Latinoamericana de Operadores de Agua y Saneamiento. Acceda a la presentación completa.
Buenos Aires, 27 de noviembre de 2014 (OPS/OMS).- El 94% de la población de América Latina y Caribe se beneficia de fuentes mejoradas de agua, aunque esta cifra "oculta muchas inequidades especialmente en áreas periurbanas, rurales, pueblos indígenas y afro-descendientes", explicó el representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en Argentina, Pier Paolo Balladelli, durante el 4° Encuentro ALOAS, organizado por la Asociación Latinoamericana de Operadores de Agua y Saneamiento.
El agua es un determinante clave para la salud y su acceso se convierte, por ende, en un bien público global al que todos deben poder acceder, subrayó Balladelli. Determinantes de carácter ambiental, entre los cuales se encuentra el agua, son la causa de afecciones como la diarrea, la malaria, el VIH, el cáncer de pulmón, el asma y la tuberculosis.
Según el Joint Monitoring Program, 2014 de OPS y UNICEF, en el continente latinoamericano, 109 millones de personas no tienen acceso a saneamiento mejorado y 30,4 millones defecan abiertamente sin utilizar un inodoro o una letrina. El riesgo de muerte infantil (morir antes de cumplir el primer año) es tres veces mayor en el tercil de menor acceso a saneamiento y el 38% de las muertes de menores de 1 año se concentran en el 20% de población con menor acceso a saneamiento, señaló Balladelli.
"Si bien acceso a agua se ha logrado en promedio en la región y el mundo, hay muchos países, territorios y poblaciones rezagadas en esa meta y es evidente que las áreas rurales tienen muchos desafíos", apuntó el funcionario de Naciones Unidas. "Se necesita buscar y consolidar más alianzas para reunir evidencias sobre la carga de enfermedades asociadas, a los costos familiares y del Estado por el impacto negativo de la falta de acceso a agua segura en la productividad", subrayó Balladelli, quien aclaró además que hay que tomar en cuenta la calidad ya que "acceso de la población a agua de acueductos no es sinónimo de agua segura o apta para consumo humano".
En este sentido, la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) recomienda y busca apoyar a los países para lograr en 2030 el acceso universal al agua potable, saneamiento básico y la higiene de los hogares, las escuelas y los centros de salud; eliminar defecación al aire libre; reducir a la mitad la proporción de personas sin acceso en la casa a servicios agua potable y saneamiento administrados segura; y eliminar progresivamente las desigualdades en el acceso.
"Es necesaria más inversión y monitoreo para que la inversión se haga allí donde los planes de agua segura identifican mayores riesgos y más ventajas para la población", explicó Balladelli. "También es importante trabajar con las escuelas y municipios saludables para concientizar sobre esta temática", postuló.
Del encuentro ALOAS 2014, realizado en el Palacio de las Aguas, participaron el presidente de la Asociación y también titular de AySA, Carlos Ben; el ministro de Planificación Federal, Julio de Vido, la directora general de Educación y Cultura bonaerense, Nora de Lucía; Andrei Juravlev, de la CEPAL; y Sebastián Paz Zavalía, del Consejo Federal de Entidades de Servicios Sanitarios (COFES), entre otros expertos, funcionarios y prestadores de servicios de agua y saneamiento de América Latina.
ALOAS es una plataforma regional, que actualmente incluye a 81 empresas operadoras de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay. La organización se dedica al abordaje de problemas y soluciones entre empresas prestadoras, a la difusión de buenas prácticas, alianzas con gobiernos, organizaciones internacionales y sector privado.
Acceda a la presentación completa del Dr Balladelli