Así lo indicaron legisladores y altos funcionarios durante las Jornadas sobre obesidad infantil y sobrepeso, en las que la autora de la ley de etiquetado frontal de alimentos de México presentó la nueva normativa de ese país. También participaron legisladores nacionales, en momentos en que el Senado avanza en un proyecto para incorporar el etiquetado en el país.
Buenos Aires, octubre de 2020 (OPS/OMS).- El Ministerio de Salud de la Nación ratificó su compromiso de avanzar en políticas contra la obesidad y el sobrepeso, en momentos en que el Senado discute un proyecto de ley para incorporar el etiquetado frontal de alimentos con un sistema de advertencias. Esta regulación permite a la población acceder a información clara sobre los productos que consume y contribuye a la prevención de la creciente epidemia de obesidad y sobrepeso en el país.
La cartera sanitaria indicó los avances durante las recientes Jornadas sobre obesidad infantil y sobrepeso en el marco de COVID-19, organizada por la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), UNICEF y la Cámara de Diputados de la Nación. Del encuentro también participaron distintos legisladores, como el presidente de la Comisión de Salud de la Cámara baja, Pablo Yedlin; y la senadora Anabel Fernández Sagasti.
“Queremos un etiquetado frontal de advertencias que debería ser gradual, fijando los límites para determinar el exceso de nutrientes”, como azúcares, grasas y sodio, explicó el secretario de Calidad en Salud de la Nación, Arnaldo Medina, durante la apertura del encuentro.
Por su parte, la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, coincidió en que existe “un momento histórico de consenso con todos los actores” para avanzar en el etiquetado. “El panorama de trabajo nos cambió abruptamente -a raíz de la pandemia por COVID-19- y mantener este tema en agenda es digno de mencionar”, subrayó.
En Argentina el 41,1 por ciento de los niños y adolescentes de entre 5 y 17 años presenta exceso de peso, mientras que esta problemática afecta al 67,9 por ciento de las personas mayores de 18 años, según los resultados de la Segunda Encuesta Nacional de Nutrición y Salud.
“Esta problemática representa también una verdadera pandemia, más solapada y silenciosa que COVID 19, pero con una curva en ascenso”, afirmó el representante de la OPS/OMS en Argentina, Enrique Pérez-Gutiérrez. “Vemos con preocupación que los patrones alimentarios de la población están migrando del consumo de alimentos naturales, frescos y comidas caseras hacia los productos ultraprocesados con alta cantidad de azúcar, grasa y sal y bajo valor nutricional”, sostuvo.
“Esta migración -continuó- afecta no solo la salud provocando obesidad y enfermedades, sino también afecta la alimentación tradicional, autóctona, sustentable y también daña las economías regionales junto con el medio ambiente”. A tono, la representante de UNICEF Argentina, Luisa Brumana, señaló que este encuentro “pone en el centro la protección de niños, niñas y adolescentes” con un tema “altamente invisibilizado para parte de la sociedad que es la obesidad infantil”.
En tanto, el asesor regional en Nutrición de la OPS, Fabio Da Silva, llamó a los países a establecer una ley que incorpore el etiquetado frontal de alimentos, como lo hicieron Chile, Perú y más recientemente México. “Debe ser una ley basada en el perfil de nutrientes de la OPS, con elementos de diseño octogonales que marquen el exceso de sodio, grasas y azúcares. Es importante además eliminar personajes infantiles que compitan con el etiquetado y establecer sanciones para quienes no cumplan con la norma”, sostuvo.
Durante las jornadas también expuso la diputada mexicana Carmen Medel sobre la ley de etiquetado frontal de alimentos de ese país, que comenzó a regir el 1 de octubre y que se encuentra en línea con las recomendaciones de la OPS. “Cuando llegamos al Congreso había 53 iniciativas bloqueadas por la industria, pero era necesario cambiar el paradigma desde la atención a la prevención de la obesidad, y empoderar al consumidor”, señaló durante su intervención.
Esta semana, las comisiones de Salud, Industria y Comercio del Senado argentino recibieron a funcionarios y especialistas que expusieron sobre políticas regulatorias para la prevención de la obesidad en niños, niñas y adolescentes, entre ellas el etiquetado frontal de advertencias en los productos comestibles y bebidas, donde se señale el exceso de azúcares, grasas saturadas y sodio para alertar a los consumidores y garantizar su derecho a la información.
Senadores del oficialismo y la oposición cuentan con un proyecto unificado con amplia aprobación del sector académico, la sociedad civil y asociaciones de consumidores. Dicho proyecto unificado se encuentra en línea con las recomendaciones de la Estrategia y plan de acción para la prevención de la obesidad en la niñez y adolescencia de la OPS.