Buenos Aires, 1 de septiembre de 2014 (OPS/OMS).- Autoridades sanitarias de Argentina analizaron, junto a delegados de Chile, Colombia, Cuba y México, un proyecto que cuenta con el respaldo de la OPS/OMS y apunta a crear un foro permanente dedicado a los adultos mayores en el que participen los cinco países cuyas poblaciones son las más envejecidas del continente.
La iniciativa surgió durante un encuentro en el que participaron representantes del Foro Argentino de Facultades y Escuelas de Medicina Públicas y funcionarios del Ministerio de Salud de la Nación, así como el director ejecutivo de PAMI (institución a cargo de los servicios sociales para retirados y pensionados de la Argentina), Luciano Di Césare, y el representante de la OPS/OMS en el país, Pier Paolo Balladelli.
"A raíz del aumento de la esperanza de vida y la disminución de la tasa de fecundidad, la proporción de personas mayores de 60 años está aumentando más rápidamente que cualquier otro grupo de edad en casi todos los países. El envejecimiento de la población puede considerarse un éxito de las políticas de salud pública y el desarrollo socioeconómico, pero también constituye un reto para la sociedad, que debe adaptarse a ello para mejorar al máximo la salud y la capacidad funcional de las personas mayores, así como su participación social y su seguridad", consideró Balladelli.
En ese orden, detalló que durante la reunión, convocada por PAMI y que se realizó el pasado viernes en Buenos Aires, "se hizo referencia a la necesidad de asegurar que en la formación médica de grado y posgrado la gerontología forme parte de las currículas", además de que hubo coincidencias en los participantes sobre "la importancia de fomentar el autocuidado, que es una de las claves para la buena calidad de vida en los adultos mayores".
Además, en el marco de un acuerdo suscrito el año pasado entre la OPS y el PAMI, se llevó a cabo una capacitación con la Universidad de Stanford de la que participaron los delegados de Argentina Chile, Colombia, Cuba y México con el objetivo de que los líderes comunitarios diseminen en sus respectivos países la metodología del autocuidado entre los adultos mayores y sus familias.
"Es de fundamental importancia tener en cuenta la relación entre los determinantes de la salud y el adulto mayor y sus condiciones, proteger los derechos de este sector de la población y facilitar su plena y activa inserción en la sociedad, así como tener en cuenta que las enfermedades asociadas con el envejecimiento afectan la calidad de la vida y provocan un importante aumento de los costos en atención sanitaria, tanto para el Estado como para las familias", remarcó Balladelli.
Se prevé que en el año 2100 la cantidad de personas de 60 años de edad o mayores aumente más de tres veces. En cuanto a las Américas, en el año 2020 tendrán 200 millones de personas mayores, casi el doble que en 2006 y con más de la mitad viviendo en América Latina y el Caribe. Para 2025, el 69% de quienes nacen en Norteamérica y el 50% de los que nacen en América Latina vivirán más allá de los 80 años.