Representante de OPS/OMS en Uruguay participó en acto de conmemoración e insistió en la necesidad de fortalecer medidas de control
Este 31 de mayo se conmemoró un nuevo Día Mundial Sin Tabaco, bajo la consigna de la Organización Mundial de la Salud: “El tabaco, una amenaza para el medio ambiente”. Tal como lo indica, el foco de este año está puesto en lo nociva que es la industria tabacalera para el planeta, al punto de ser una de las más contaminantes.
En Uruguay, el Ministerio de Salud Pública realizó un acto conmemorativo del que participaron autoridades nacionales y el representante de OPS/OMS en el país, Hernán Montenegro, que destacó el impacto negativo que tiene el tabaco no solo en la salud de millones de personas sino en el ambiente. En esa línea, Montenegro insistió en la necesidad de fortalecer medidas de control, como la responsabilidad de los productores de tabaco o el apoyo a los agricultores para que se dediquen a cultivos alternativos sustentables.
Montenegro felicitó a Uruguay por los avances en materia de control y prevención del tabaquismo, como ratificar el Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT) de la Organización Mundial de la Salud que devinieron en políticas públicas y blindaje normativo. A su vez, el país ha desarrollado una dinámica de cooperación horizontal de intercambio y asistencia técnica con los países de la región. El representante de OPS mencionó como parte de esa cooperación y del lugar de relevancia que ocupa el país, al Centro de Intercambio de Conocimientos de la Secretarīa del CMCT de la OMS para la región de las Américas, que se encuentra en Montevideo.
Sin embargo, todavía queda mucho camino por recorrer en materia normativa y de control del tabaco. “Nosotros como OPS/OMS nos ponemos a disposición para seguir colaborando con todos los actores de Uruguay, en la coordinación regional y global para estos esfuerzos del control del tabaco”, señaló Montenegro en su discurso.
El tabaco mata a 8 millones de personas cada año en el mundo y 6000 en Uruguay. Como si eso fuera poco, daña aún más la salud humana con la destrucción del medio ambiente. Solo a nivel de deforestación, por año se talan 600 millones de árboles para fabricar 6 billones de cigarrillos.
El CMCT cuenta con normativa específica para que los países puedan generar políticas en torno al cuidado del ambiente. Durante la presentación en el MSP, la responsable del Programa Nacional de Control del Tabaco, Elba Estévez, mencionó dichos artículos y la necesidad de que se tomen en cuenta, frente a la preocupación por lo poco que se hace “por cuidar el medio ambiente con respecto a los residuos del tabaco”.
La generación de productos derivados del tabaco contribuye al cambio climático y produce desecho tóxicos, como el filtro de los cigarrillos. Estévez mencionó una cifra impactante al respecto: cada año se generan en el mundo 25 millones de toneladas métricas de desechos altamente contaminantes derivados del tabaco. A eso se le suman los nuevos productos de tabaco que utilizan distintos tipos de tecnología y que, pese a haber sido presentados al público como “más amigables” con el medio ambiente, son todo lo contrario.
Por su parte, el director nacional de Calidad y Evaluación Ambiental (Dinacea) del Ministerio de Ambiente, Eduardo Andrés López, ratificó el tenor de la campaña liderada por la OMS. “Consideramos que el tabaco, más allá de un problema de saud pasó a ser un problema ambiental”, dijo. En tanto, el ministro interino de Salud Pública, José Luis Satdjian, insistió en la importancia de la prevención y en el compromiso asumido por Uruguay para el combate al tabaquismo.