Santo Domingo, República Dominicana, 1 de mayo de 2019 (OPS)- “La adicción al alcohol es una enfermedad, las adicciones son silentes y no discriminan…mujeres como yo solemos sentir miedo de admitir nuestros problemas con el alcohol e ignoramos el efecto negativo que puede tener en la vida de nuestros hijos”. Así lo afirmó María (nombre ficticio) durante el acto de inauguración de la primera Unidad Espectro Materno Fetal (UEMF) en el Hospital Materno San Lorenzo de Los Minas. María, al igual que otras dos madres, participó en los entrenamientos que dieron paso a la creación de la UEMF.
En las Américas y en todo el mundo, el alcohol es el principal factor de riesgo de muerte y discapacidad para las personas de 15-49 años. A pesar de que tradicionalmente los hombres han sido los principales consumidores de alcohol, en muchos países, el consumo de las mujeres pronto igualará al de los hombres. Tal es el caso que República Dominicana es el tercer país de la región con consumo excesivo de alcohol durante el embarazo.
El consumo de alcohol por la mujer en estado de gestación puede conducir a un aborto espontáneo o una variedad de discapacidades conocidas como Trastornos del Espectro Alcohólico Fetal (TEAF). Los niños con este trastorno nacen con defectos físicos y mentales característicos, como baja estatura, cabeza y cerebro pequeños. Esta condición no tiene cura. El tratamiento se basa principalmente en los servicios de salud mental y servicios médicos para manejar las discapacidades resultantes como dificultades de aprendizaje, problemas de conducta y de lenguaje, retraso en la adquisición de habilidades sociales o motoras, problemas de memoria y déficit de atención.
En los últimos años la OPS ha gestionado esfuerzos para crear conciencia sobre el impacto negativo del consumo de alcohol durante el embarazo apoyando a los países a responder a esta problemática. En República Dominicana se celebró un foro intersectorial en octubre de 2018, en el cual participaron autoridades del Ministerio de Salud, la representación de la OPS, expertos internacionales, miembros del Servicio Nacional de Salud, investigadores y otros grupos estratégicos. Durante este foro se discutió sobre el impacto del consumo de alcohol, con énfasis en el impacto para la salud de los niños y niñas afectados por el TEAF.
En seguimiento a este foro, se realizó un taller de dos días sobre Trastornos del Espectro alcohólico Fetal en el que se capacitaron a 30 profesionales de la salud sobre la prevención, diagnóstico y manejo adecuado de pacientes con este trastorno. Posteriormente, bajo la coordinación de la OPS, del departamento de salud mental del Ministerio de Salud y del Clúster de Alcohol, se completaron una serie de reuniones virtuales con facilitadores internacionales y profesionales del Hospital San Lorenzo de los Minas.
El 25 de abril, se inauguró formalmente la primera UEMF en el Hospital Materno San Lorenzo de Los Minas con un acto encabezado por el ministro de Salud Pública, doctor Rafael Sánchez Cárdenas; la representante de la OPS en República Dominicana, la doctora Alma Morales Salinas; y el director ejecutivo del Servicio Nacional de Salud, licenciado Chanel Rosa.
El doctor Sánchez enfatizó que la política del Ministerio de Salud es profundizar en las capacitaciones del personal de salud para crear conciencia sobre el efecto del consumo del alcohol en estado gestante. También dijo, que el mayor reto será ampliar la cobertura de este tipo de programas con la instalación de las UEMF no solo en otros hospitales sino también a nivel privado, de manera que alcance a toda la población.
De su lado, la doctora Morales Salinas recalcó el compromiso de la OPS en apoyar a los sectores locales a luchar contra el efecto nocivo del alcohol, en especial, a incluir este tema en su agenda política. De igual forma, afirmó que para abordar esta problemática se deben consolidar suficientes datos que permitan diseñar un programa de acción efectivo; es necesario trabajar en alianzas dentro y fuera del sector salud y ante todo debe haber un solo mensaje contundente tanto desde el sector público como privado en contra del consumo de alcohol por parte de mujeres gestantes.
Con la creación de esta unidad, se podrá ayudar a mujeres como María, a crear conciencia y superar problemas de adicción que ponen en riesgo su salud y la salud de sus hijos e hijas. Tal como ella testificó, “este es un proceso difícil, pero no imposible…la ayuda que he recibido me ha cambiado la vida”.