La OPS está trabajando con organizaciones indígenas para fortalecer la respuesta a la COVID-19 en la Cuenca Amazónica.
Las comunidades indígenas de América del Sur están experimentando un mayor número de casos y muertes por COVID-19. El acceso a los servicios de salud es un desafío para los pueblos indígenas. Lo es para quienes viven en áreas urbanas y también para quienes viven en asentamientos remotos.
Mientras los países de las Américas están comprometidos en la lucha contra la pandemia y el mundo espera una vacuna, las comunidades indígenas enfrentan una amenaza especialmente grave a causa de la COVID-19.
La OPS está trabajando en estrecha colaboración con la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca del Río Amazonas (COICA), una asociación de organizaciones indígenas de la selva peruana, el este de Bolivia y las regiones amazónicas de Brasil, Colombia y Ecuador.
La OPS y la COICA han pedido conjuntamente a los gobiernos nacionales que garanticen a las comunidades indígenas la atención de salud que necesitan.