18 de junio, 2021 - Después de décadas de experiencias positivas en la previsión y compra de vacunas y suministros por parte del Fondo Rotatorio, la OPS se alineó con la OMS y sus socios para implementar el mecanismo COVAX en las Américas. La pandemia de COVID-19 representaba un desafío sin precedentes y COVAX era la mejor forma para que los Estados Miembros de la OPS accedieran a vacunas seguras y efectivas de manera equitativa.
Las dosis de COVAX llegaron a Latinoamérica la primera semana de marzo de 2021, solo dos meses después de que países desarrollados recibieran y aplicaran la primera vacuna de COVID-19.
La pandemia ha afectado todos los países, y, el inicio del despliegue de vacunas ha hecho que muchos países deban organizar campañas de vacunación masivas. Pero esto no es nuevo para la región de las Américas.
Por 4 décadas, las Américas ha sido un líder mundial en vacunación de rutina, introducción de vacunas nuevas y en implementación de campañas masivas de vacunación contra enfermedades infeccionas. El Fondo Rotatorio de la OPS – actuando bajo sus mandatos de solidaridad, panamericanismo, equidad, calidad y transparencia – ha venido trabajando con sus Estados Miembros para asegurar el acceso a las vacunas y lograr sus metas de inmunización, ayudando a los países de las Américas a proteger la población contra muchas de las enfermedades más peligrosas como polio, rubéola y viruela.
El Fondo Rotatorio ha sido clave para comprender, recolectar y pronosticar la demanda de vacunas. Las relaciones construidas a través del Fondo Rotatorio y las oficinas de país de la OPS han contribuido a que los programas nacionales de inmunización sean una pieza integral de los sistemas de salud en las Américas a diferencia de otras regiones.
Las Américas es pionero en la introducción de nuevas vacunas, como las de VPH y rotavirus. El compromiso político de los Estados Miembros de la OPS en apoyo a la inmunización ha sido crítico para este éxito, así como la incansable dedicación de los trabajadores de la salud que recorren la milla extra para asegurarse de que cada persona en cada rincón de la región sea alcanzada por los servicios de inmunización.
Las Américas fue la primera región del mundo en eliminar rubéola, síndrome de rubéola congénita y sarampión; en erradicar la viruela y en ser declarada libre de polio.
Entre 1987 y el 2010, los esfuerzos de eliminación del sarampión han desembocado en la implementación de 157 campañas de vacunación, vacunando un total de 440 millones de personas de todas las edades. Los países en Latinoamérica y el caribe ahora vacunan 100 millones de adultos y niños anualmente contra la la influenza estacional. La región tiene vasta experiencia en vacunación de adultos y en priorización de grupos de riesgo para vacunación contra COVID-19 como adultos mayores, trabajadores de la salud y personas con condiciones crónicas.
Las Américas – particularmente Latinoamérica y el caribe – han sido golpeados más fuerte que otras regiones por el COVID-19, con 1.8 millones de muertes y más de 69.7 millones de casos hasta junio de 2021. La OPS ha operado como el primer puerto de llamado de sus Estados Miembros de todos los asuntos relacionados con las vacunas sin importar si han o no ingresado al mecanismo COVAX a través del Fondo Rotatorio.
Hay varios pasos que se deben completar antes de que las dosis puedan ser administradas en cualquier país en particular. La OPS ha trabajado con los Estados Miembros durante todo el proceso para facilitar transparencia y eficiencia, permitir el acceso equitativo a vacunas contra la COVID-19 y apoyando los países en sus esfuerzos de preparación. A medida que la disponibilidad de las dosis de vacunas aumenta, los países están listos para recibirlas e iniciar la distribución equitativa inmediatamente.
La OPS está trabajando con los Estados Miembros en la compra de vacunas de varias maneras:
- Ayudando a navegar y comprender los requisitos del mecanismo COVAX: financieros, legales, programáticos, entre otros;
- Informando a los Ministerios de Salud y Finanzas sobre la dinámica del mercado y las proyecciones financieras;
- Pronosticando y obteniendo suministros relacionados con la administración de vacunas;
- Proveyendo financiamiento puente cuando ha sido necesario para acceder a las dosis de la vacuna COVID-19 de manera oportuna;
- Canalizando pagos iniciales a COVAX para países con restricciones administrativas;
- Llevando a cabo procesos de licitación internacional y licitación conjunta con UNICEF;
- Coordinando acuerdos a largo plazo con proveedores para emitir estimaciones de precios, órdenes de compra y requisiciones en tiempo récord junto con el Departamento de Gestión de Adquisiciones y Suministros (PRO) de la OPS, la Oficina del Asesor Legal (LEG) y el Departamento de Sistemas y Servicios de Salud (HSS)
- Coordinando y monitoreando la logística internacional para 36 países de la región de las Américas.
Como parte de los preparativos para implementar las vacunas COVID-19, la OPS revisó los planes nacionales de vacunación y despliegue de los países, ofreciendo retroalimentación y asistencia técnica en áreas como planificación y coordinación, cadena de frío, costos y financiamiento, identificación de poblaciones objetivo, generación de demanda y comunicación de riesgos, estrategias de entrega y seguimiento de la seguridad de las vacunas. Este apoyo ha continuado a medida que los países reciben envíos de dosis de vacunas e inician su implementación.
Se estima que las Américas requerirá la vacunación de casi mil millones de personas para detener la propagación del virus. A medida que continúe el despliegue de COVAX y más países de la región reciban dosis, la OPS trabajará junto con las autoridades de salud locales, asegurando que todas las personas que estén dispuestas y puedan vacunarse reciban la dosis requerida.
Durante más de cuatro décadas, las Américas ha sido líder mundial en campañas de vacunación de rutina y vacunación masiva contra enfermedades infecciosas. A través de la OPS y COVAX, sus esfuerzos continuarán durante el despliegue de la vacuna COVID-19. Porque no estaremos a salvo hasta que todos estén a salvo.