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Líderes de ferias libres chilenas fortalecerán las medidas de prevención de la COVID-19 en mercados de frutas y hortalizas


Un centenar de feriantes fueron capacitados por la OPS/OMS y socios con el fin de hacer de las ferias libres espacios más seguros para proteger su salud y la de los clientes, y evitar la propagación del nuevo coronavirus


Santiago de Chile, 18 de septiembre 2020 (OPS)- Desde el desierto de Atacama a la Patagonia chilena, un centenar de feriantes fueron capacitados para prevenir la infección por el nuevo coronavirus en los mercados donde venden frutas y hortalizas.

El curso on line “Monitores sanitarios en ferias libres en tiempos de pandemia” fue organizado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS), la Asociación de Ferias Libres (ASOF), la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile y la Universidad de Valparaíso.

El taller permitirá a los participantes capacitar a otros feriantes y monitorear y fortalecer así las medidas de prevención de la COVID-19 entre sus compañeros/as. Los mercados libres son un espacio habitual para la compra principalmente de verduras y frutas a bajo costo, y una importante fuente de trabajo en Chile.

 

Miriam López

Miriam López vive en la comuna de Santa Cruz y, cada semana, instala su puesto de venta de zapallos, porotos y peras para abastecer a los vecinos del Valle de Colchagua. En la ceremonia virtual de certificación, Miriam no logró contener su emoción. “Estoy feliz de haber sido parte de esta tremenda iniciativa”, dijo tras publicar su diploma en redes sociales y enviárselo al alcalde de su comuna.

“El taller fue súper valioso porque me dio la posibilidad de interiorizarme de normativas, de lecciones sobre cómo intervenir preventivamente ante esta pandemia y poder compartir lo aprendido entre feriantes y nuestros clientes”, agregó Miriam.

El curso contempló principalmente información básica sobre COVID-19; medidas de prevención y control; y la aplicación de las orientaciones y protocolos desarrollados por las autoridades para el control de la pandemia.

José Luis Gómez tiene su puesto en la Feria Dominical Independencia Bicentenario de San Francisco de Mostazal, y para él, el taller resultó de gran ayuda para reforzar las medidas sanitarias entre todos los feriantes que están en la primera línea de abastecimiento. “Si tuviera que colocarle una calificación, sería más que un 7, yo diría un 10…por la calidad de los contenidos y la entrega de los académicos que lo hicieron sumamente comprensible a los feriantes”, sostuvo.

Con un estilo cálido y armónico, este poeta popular y comerciante resaltó la emoción de todos los participantes en la capacitación. “Esto obedece al conocimiento gratamente adquirido por tan magníficos ponentes, y al sentirse verdaderos alumnos de universidades”, destacó José Luis.

Fernando Leanes, Representante de OPS/OMS en Chile, felicitó a los feriantes por la vocación por prevenir contagios, destacando la importancia de la capacitación para empezar el cambio de comportamientos y los retos que esto implica. “Los esfuerzos globales de OPS/OMS se fortalecen con el apoyo de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile y la Facultad de Medicina de Valparaíso y sus expertas. Felicito a todos los chilenos por la capacidad para reducir la incidencia desde el pico de junio”.

No obstante, Leanes alertó que, en el estancamiento actual, con miles de casos sin identificación de contactos, las flexibilizaciones podrían hacer que se pierda todo lo conseguido si no se aplican rigurosamente los protocolos de prevención. “Insto a todos a trabajar junto a los dirigentes y entidades locales en apoyo a las decisiones de la autoridad sanitaria que deben primar por sobre cualquier otra motivación”.

 

Para Lorena Rodríguez, académica de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile y coordinadora de los docentes del taller, la importancia de esta alianza estratégica entre academia, OPS/OMS y sociedad civil permitió una excelente triada para llevar adelante propuestas hacia el gobierno en términos de la mantención y funcionamiento óptimo de la cadena alimentaria, aún en condiciones las adversas de la pandemia.

“Esta alianza implicó compartir experiencias, esto no fue solamente la entrega de conocimientos, sino también la conversación, la reflexión, el diagnóstico conjunto de la situación y la búsqueda de soluciones”, destacó. “Creo que el gran plus de construir propuestas en forma participativa es que no se construyen desde una oficina y cuatro paredes donde uno puede imaginarse una situación que no es, sino que se construyen positiva y propositivamente desde los distintos sectores involucrados”, analizó Rodríguez.

La experiencia de este curso es un valioso ejemplo de la colaboración que requerimos para el control de la pandemia por COVID-19. Contamos con orientaciones técnicas y protocolos que deben ser implementados. Para ello se requiere capacitar a las personas que deben aplicarlos y construir la factibilidad de su aplicación, articulando los esfuerzos de los diferentes actores clave desde la comunidad”.

 Mario Cruz Peñate, a cargo de coordinar la iniciativa por parte de la OPS/OMS en Chile


En ese sentido, la profesora Pola Brenner destacó el uso de la tecnología y la dinámica de capacitar a capacitadores. “Es una muy buena estrategia para difundir conocimiento en la comunidad y para poder extender este conocimiento a grandes aéreas”.

Esta profesora de la Universidad de Valparaíso resaltó el interés de los participantes en la capacitación. “Fue un taller evidentemente práctico en donde se entregaron herramientas simples para poder protegerlos a ellos, a su familia y a las personas que acuden a las ferias libres”, resumió Brenner.