Hacerlo realidad - Eliminar la transmisión maternoinfantil del VIH y la sífilis en Belice
Hacerlo realidad - Eliminar la transmisión maternoinfantil del VIH y la sífilis en Belice
Mayo de 2024
Stephannie Lizama viajó esa mañana desde la aldea de San Lázaro hasta el centro de salud de Orange Walk, en el noreste de Belice, un trayecto de más de tres horas a pie. Embarazada de 31 semanas de su segundo hijo, había sufrido algunos mareos y estaba deseando someterse a los controles prenatales.
Tras llegar a la clínica de salud maternoinfantil, Stephannie participó en una charla de grupo con otras embarazadas sobre la importancia de los exámenes prenatales para detectar diversos problemas de salud, como el VIH y la sífilis. A continuación, se sometió a un examen físico, seguido de un análisis de sangre en el laboratorio del centro.
El análisis de sangre es una prioridad para Stephanie. “Si descubro que tengo VIH o sífilis, puedo asegurarme de que el bebé está bien”, dice. “Porque puede transmitirse al bebé y causarle complicaciones. Eso es lo que quiero evitar.”
Belice recibió la certificación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la eliminación de la transmisión maternoinfantil del VIH y la sífilis en 2023; seguido de otros dos países caribeños, Jamaica y San Vicente y las Granadinas, en 2024.
Este logro es el resultado de más de una década de trabajo para fortalecer los servicios de prevención y tratamiento de la salud maternoinfantil, en línea con el compromiso de los países con la Estrategia y Plan de Acción de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para la eliminación de la transmisión maternoinfantil del VIH y la sífilis congénita en la región de las Américas.
Desde que comenzó su caminohacia la certificación, Belice ha puesto en marcha una serie de medidas para garantizar que toda mujer embarazada, que acceda al sistema sanitario público o privado, se someta a las pruebas del VIH y la sífilis dos o tres veces durante el embarazo y en el momento del ingreso para el parto. A continuación, la madre sigue recibiendo atención de seguimiento hasta 18 meses después del parto.
“Lo primero que hacemos cuando una mujer entra en la clínica es hacerle una prueba rápida de embarazo”, explica Sharon Cooper Espinosa, enfermera de salud pública del policlínico Matron Roberts de la ciudad de Belice. “Una vez que establecemos que una señora está embarazada, pedimos pruebas de laboratorio para el VIH, la sífilis y la hemoglobina, entre otras.”
Si una mujer da positivo en las pruebas del VIH o la sífilis, se contacta inmediatamente con ella y se le administra tratamiento para evitar la transmisión al feto. “Esto implica varias cosas,” explica la enfermera Espinosa. Si la mujer da positivo en sífilis, se le administra una serie de inyecciones de penicilina durante tres semanas consecutivas. En el caso del VIH, se le administran antirretrovíricos diarios junto con las vitaminas prenatales. Una semana después, el equipo hace un seguimiento de la mujer para asegurarse de que cumple el tratamiento y prevenir cualquier complicación. Si una mujer no acude a una cita de seguimiento, se envía a una enfermera para que la controle en casa. Cuando una mujer da positivo, también se anima a sus parejas a que se hagan la prueba y, si es necesario, inicien el tratamiento.
Para garantizar que ninguna embarazada se quede atrás, el Ministerio de Salud y Bienestar de Belice también organiza periódicamente dispensarios móviles, que viajan de pueblo en pueblo por las zonas más remotas del país, como San Lázaro.
“El seguimiento estrecho de las mujeres es clave para el éxito”, afirmó la Dra. Natalia Largaespada Beer, Asesora Técnica de la Unidad de Salud Maternoinfantil del Ministerio de Sanidad de Belice, destacando el uso de la tecnología disponible como clave para garantizar la comunicación entre los equipos nacionales y locales para el seguimiento de las pruebas y el tratamiento de las mujeres y sus bebés.
“El proceso que seguimos para la validación fue muy exhaustivo”, añadió. “Si nos fijamos en la tasa de transmisión del VIH, tuvimos una reducción de 81 puntos porcentuales, comparando 2007 con 2023.”
“Pero no se trata sólo de la certificación. Se trata de ayudar a proteger al niño cuando las pruebas son abrumadoras;si una madre sigue el tratamiento, el niño tiene la posibilidad de nacer sin VIH, y si recibe un tratamiento adecuado contra la sífilis durante el embarazo, el niño nacerá sin sífilis. El niño es la razón por la que hacemos todo lo que hacemos.”
Para la Dra. Karen Lewis- Bell, Representante de la OPS/OMS en Belice, lograr la eliminación ha sido un gran logro para el país, en particular tras la eliminación de la malaria en 2023. “Una de las áreas prioritarias para la cooperación técnica de la OPS con Belice es la prevención y el control de las enfermedades transmisibles”, dijo, destacando el trabajo de la organización para garantizar el desarrollo de capacidades, la provisión de normas y estándares, así como el apoyo práctico con reactivos para pruebas, como elementos clave de la cooperación.
“La eliminación de la transmisión maternoinfantil del VIH y la sífilis sólo puede lograrse cuando existe un sólido trabajo en equipo y se prestan servicios sanitarios de calidad” así como una colaboración entre los sectores público y privado, añadió el Ministro de Salud y Bienestar de Belice, el Honorable Kevin Bernard.
“Todos los niños tienen derecho a nacer y permanecer libres del VIH y la sífilis.”
Cuando llegó la noticia de que Belice había logrado la certificación, “me sentí abrumado de alegría y felicidad porque realmente hemos ayudado a estas familias”, dijo el Dr. Largaespada Beer. “La ciencia dice que es posible. Son los profesionales sanitarios y las familias los que tienen que conseguirlo. Estamos orgullosos de haberlo conseguido y comprometidos a continuar nuestros esfuerzos.”
La transmisión maternoinfantil del VIH y la Sífilis es una de las más de 30 enfermedades transmisibles que los países de América Latina y el Caribe se han comprometido a eliminar como parte de la iniciativa de Eliminación de la OPS.
La iniciativa, que se relanzó durante el 60.º Consejo Directivo de la Organización en 2023, pretende aprovechar las lecciones aprendidas de la pandemia de COVID-19, así como de anteriores experiencias para acelerar la eliminación de la enfermedad en la Región.