América del Norte: la actividad de la influenza se mantuvo baja en la subregión, con circulación de influenza A(H1N1)pdm09, influenza B (linaje indeterminado) y predominio de influenza A(H3N2). La actividad del SARS‑CoV‑2 siguió disminuyendo. En Canadá, la influenza se ubicó en niveles interestacionales, mientras que los casos de SARS-CoV-2 aumentaron en las personas de 60 años o más. En México, la actividad de la influenza se mantuvo aumentada en niveles de baja intensidad, mientras que disminuyó la actividad del SARS CoV-2. En los Estados Unidos, la actividad de la influenza estuvo en niveles interestacionales, mientras que la actividad del SARS-CoV-2 continuó disminuyendo.
Caribe: la actividad de la influenza se mantuvo baja con predominio del virus influenza A(H3N2). Santa Lucía informó una mayor actividad de SARS CoV-2, mientras que la actividad del VRS continuó elevada en la República Dominicana.
América Central: la actividad de la influenza se mantuvo en niveles basales, predominando influenza A(H3N2). En Guatemala aumentó la actividad de la influenza, predominando influenza A(H3N2). En Costa Rica y Honduras, la actividad del SARS- CoV-2 continúa elevada, pero en disminución. En Nicaragua y Panamá, la actividad del VRS continúa aumentando.
Países Andinos: la actividad de la influenza se mantuvo baja, con predominio de influenza A(H3N2). Colombia y Perú reportaron SARS CoV-2 en niveles bajos de actividad.
Brasil y Cono Sur: la actividad de la influenza se mantuvo baja pero con una tendencia creciente debido al incremento observado en Argentina, donde se detectó una actividad moderada y en Brasil, donde la actividad aunque creciente se mantuvo baja. Se detectó predominantemente influenza A(H3N2) con detecciones adicionales de influenza A(H1N1)pdm09 e influenza B (linaje indeterminado). La actividad del SARS-CoV-2 estuvo baja en toda la subregión. Se reportó un aumento de la actividad del VRS en Brasil y Uruguay.
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