A medida que el mundo se une para hacer frente a la pandemia de COVID-19, es importante garantizar que los servicios y operaciones esenciales para hacer frente a otros problemas de salud prevalentes continúen protegiendo la vida de las personas con TB y otras enfermedades o trastornos de salud. Los servicios de salud, incluidos los programas nacionales para combatir la TB, deben colaborar activamente para garantizar una respuesta efectiva y rápida a la COVID-19 y que se mantengan los servicios de atención de la TB.
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