En Cuba funciona un Grupo Técnico Nacional para apoyar la respuesta del país a la pandemia. Bajo el liderazgo del Dr. Pedro Más Bermejo, científico del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí con más de 20 años de experiencia en las disciplinas de higiene, epidemiología, microbiología y nutrición, este grupo tiene como propósito fundamental asesorar las medidas y acciones del Estado frente a la COVID-19.
Creado hace dos meses aproximadamente, impulsa numerosas investigaciones en múltiples ramas de la ciencia con el objetivo de brindar resultados que permitan a las autoridades tomar decisiones certeras y bien fundamentadas en cada momento. Comenzó con apenas seis miembros, y actualmente reúne a decenas de especialistas que, a su vez, se encuentran conectados con colectivos estudiantiles que les apoyan.
El Representante de OPS/OMS en Cuba, Dr. José Moya, participó en la última reunión de este grupo, celebrada en la Universidad de La Habana, donde también sostuvo un encuentro con la Rectora de esta casa de altos estudios, la Dra. Milda Lesbia Díaz Masip. En su intervención, al comienzo de la reunión, el Dr. Moya resumió el apoyo que ha brindado la OPS al país desde las primeras alertas relacionadas con el nuevo coronavirus en el mundo.
Asimismo, comentó acerca de una sesión virtual que hubo entre la Directora de OPS, la Dra. Carissa F. Etienne, y directivos del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), quienes expusieron los principales avances de Cuba en la respuesta a la COVID-19, sobre todo en el orden científico. De este encuentro surgió la propuesta de realizar un intercambio de experiencias con países de la Región para mostrar los resultados de la isla.
Por su parte, el Dr. Pedro Más subrayó la importancia de la labor que desarrolla el Grupo Técnico Nacional, cuyos resultados investigativos han permitido la publicación de seis artículos y la preparación de otros siete; además de que ese conocimiento es discutido en reuniones semanales con el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez. Comentó el epidemiólogo que el país también ha empezado a trabajar en la organización de la memoria histórica de la pandemia en Cuba, y que con esa información está previsto confeccionar un libro.
Seguidamente, se realizaron varias presentaciones que ilustraron muy bien todo lo que se ha investigado, los avances alcanzados y algunas recomendaciones para etapas venideras. Análisis en torno a: herramientas utilizadas para compartir datos, patrones en curvas de casos activos, modelos matemáticos sobre posibles comportamientos de la epidemia y otros rebrotes, así como la manera en la cual se han estudiado los conglomerados de casos y los protocolos clínicos, fueron algunos de los temas tratados.
De igual forma, se compartieron los diseños y avances de investigaciones sobre prevalencia, vulnerabilidad ante el riesgo de enfermarse, factores que favorecen la transmisión y características sociodemográficas de la epidemia en Cuba.
El encuentro duró toda la mañana, pero el cansancio no se asomó en ningún momento. Quienes allí estaban son conscientes de la utilidad que tienen todos esos esfuerzos. Fueron fundamentales en los días que la isla mostraba las cifras más altas, y lo seguirán siendo en el momento que se decida comenzar el desescalamiento de las medidas, e incluso después de ese momento. Por esa razón, las personas que conforman este Grupo Técnico Nacional, lejos de hablar sobre el final de su labor, proponen pensar en la manera que pueden organizarse para continuar funcionando en el futuro.