Las políticas públicas son un complemento importante de las iniciativas para ampliar la cobertura y mejorar los servicios de salud. Con el apoyo de la OPS, sus Estados Miembros están elaborando y ejecutando políticas que apoyan las metas de la atención primaria de salud renovada, en particular las transversales que incluyen a otros sectores en la prevención, promoción de la salud y medidas para influir en los determinantes sociales de la salud. Gran parte de esta labor ha tenido como finalidad reducir los factores de riesgo de las enfermedades crónicas no transmisibles. A continuación figuran algunos aspectos destacados de la cooperación técnica de la OPS en esta área en el período 2008-2009.
En el Brasil, la OPS apoyó la puesta en práctica del Plan Nacional de Promoción de la Salud, que promueve el cambio de comportamientos para adoptar modos de vida saludables. Entre las actividades más notables que ha ejecutado el Brasil en esta esfera se encuentra su trabajo pionero en relación con el control del tabaquismo. En el 2008-2009, la OPS llevó a cabo un trabajo importante en apoyo del Brasil, conjuntamente con la Fundación Bloomberg y el Programa Mundial de la OMS sobre el Control del Tabaco, lo que abarcó estudios para apoyar la reglamentación de la publicidad del tabaco y el empaquetado y la rotulación de los productos de tabaco. Además, la OPS encabezó una evaluación de la capacidad nacional del Brasil en materia de control del tabaco, junto con el Ministerio de Salud y el Instituto Nacional del Cáncer.
El Instituto de Alimentación y Nutrición del Caribe (CFNI) de la OPS ha promovido enérgicamente un enfoque de política pública a los problemas de salud relacionados con los alimentos en el Caribe. Entre las iniciativas en el 2008-2009 se encontraban la promoción de la causa para la inclusión de la nutrición y la salud en las políticas del sector agropecuario, la formulación de políticas públicas para tratar las enfermedades crónicas no transmisibles y sus factores de riesgo mediante la nutrición adecuada y comportamientos para llevar una vida saludable, y la concientización acerca de los riesgos a la seguridad alimentaria en el Caribe ocasionados por la inflación rápida en los precios de los alimentos. El Instituto asesoró al Consejo de CARICOM sobre Comercio y Desarrollo Económico acerca de la repercusión negativa de los precios altos en la seguridad alimentaria de las familias. También se asoció con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) a fin de organizar un Simposio sobre la Seguridad Alimentaria en el Caribe: riesgos y respuestas. Además, el CFNI continuó trabajando para fortalecer la cooperación intersectorial con diversos asociados (IICA, FAO, Departamento de Agricultura de los Estados Unidos y otros) acerca de la inocuidad, la calidad y la seguridad de los alimentos.
En Barbados y el Caribe Oriental (Anguila, Antigua y Barbuda, Barbados, las Islas Vírgenes Británicas, Dominica, Guayana Francesa, Granada, Guadalupe, Martinica, Montserrat, Saint Kitts y Nevis, Saint Martin, San Bartolomé, Santa Lucía y San Vicente y las Granadinas), la OPS está apoyando las iniciativas para dar seguimiento a la Declaración de Puerto España, “Unidos para detener la epidemia de las enfermedades crónicas no transmisibles”. Las actividades apoyadas por la OPS incluyen la celebración anual del Día del Bienestar en el Caribe, la formulación de políticas públicas favorables a la salud, la formación de las Comisiones Nacionales de Enfermedades no transmisibles y las actividades para movilizar a la sociedad civil y a las instituciones académicas.
También en seguimiento a la Declaración de Puerto España, la OPS está colaborando estrechamente con el Ministerio de Salud de Belice para elaborar un Plan Nacional de Acción para la prevención y el control de enfermedades crónicas, asignando particular importancia a la atención primaria de salud.
La OPS brindó apoyó a los funcionarios mexicanos con respecto a la organización de la Primera Reunión de Ministros de Salud y Educación para Detener el VIH en Latinoamérica y el Caribe, celebrada en la ciudad de México en agosto del 2008, que contó con la presencia de 56 ministros de salud y educación de 30 países de las Américas. La declaración final de la reunión hizo un llamamiento a favor de una reducción de 75% del número de escuelas bajo la jurisdicción de los ministerios de educación de la Región que no ofrecen educación sexual integral y una reducción de 50% del número de jóvenes en las Américas que no tienen acceso a servicios de salud que satisfagan sus necesidades en materia de salud sexual y reproductiva. La OPS prestó apoyo logístico y promocional a la reunión y apoyo técnico a la redacción de la declaración. La OPS es también miembro del grupo intersectorial (encabezado por México) responsable del apoyo a la aplicación de la declaración mediante la acción colaborativa.
A petición del Ministerio de Salud y del Ministerio del Desarrollo y Vivienda Urbana del Ecuador, la OPS estudió las condiciones de vida en los campamentos de reasentamiento para las personas desplazadas debido a las erupciones del volcán Tungurahua y examinó las zonas propuestas para reubicar a las personas de los lugares de Guayaquil afectados por las inundaciones a principios del 2008. Sobre la base de las observaciones, la OPS formuló una serie de recomendaciones sobre cómo reducir al mínimo los efectos nocivos para la salud de las iniciativas de reasentamiento, cómo facultar a las personas para reducir los riesgos en sus propias viviendas y cómo elaborar un marco basado en la iniciativa de la OPS “Rostros, voces y lugares” a fin de guiar el proceso de adaptación de los desplazados a los asentamientos nuevos.
En Guatemala, la OPS colaboró con los miembros del Congreso para obtener la aprobación del Convenio Marco para el Control del Tabaco y la aprobación de una nueva Ley sobre entornos sin humo de tabaco. La OPS también colaboró con el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social para elaborar un plan de información, educación y comunicación, así como mecanismos para el monitoreo y la inspección que respalden la aplicación de la ley.
En el Paraguay, la OPS ha apoyado la formulación de una Política sobre promoción de la salud que incluye una estrategia de vivienda saludable. La iniciativa está preparando convenios intersectoriales con el Consejo Nacional de la Vivienda (CONAVI) para incorporar los componentes de promoción de la salud en los planes nacionales de vivienda.
Entre los ámbitos más importantes del apoyo de la OPS para la formulación de políticas en materia de atención primaria de salud se encuentran sus iniciativas para promover y proteger la salud como un derecho humano. Este trabajo se centra en la utilización de los tratados, de las recomendaciones y de otros compromisos nacionales e internacionales vigentes para abogar por la reforma de la política pública y la legislación nacional en los Estados Miembros de la OPS y configurarla.
En el período 2008-2009, la OPS se dirigió al personal sanitario, al público en general, al personal de las oficinas del mediador nacional de derechos humanos, al personal del sistema judicial y a profesionales que trabajan en hospitales y otras instituciones públicas en 17 Estados Miembros para difundir normas generales de derechos humanos y normas específicas, regionales e internacionales, que protegen el derecho a gozar del grado máximo de salud que se pueda lograr (“derecho a la salud”) y otros derechos afines para las personas con trastornos mentales, personas con discapacidades, personas de edad, personas infectadas con el VIH, los indígenas y los pacientes (seguridad del paciente).
La OPS también ayudó a siete Estados Miembros -Argentina, Belice, Chile, El Salvador, Guatemala, Paraguay y Perú- a que incorporaran las normas regionales e internacionales de derechos humanos en las políticas y la legislación sobre envejecimiento, VIH, discapacidad, salud mental, salud sexual y reproductiva.
Además, la OPS trabajó estrechamente en el 2008 con organismos regionales y mundiales de derechos humanos, entre ellos la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y los comités creado por los tratados de derechos humanos de las Naciones Unidas (Comité sobre los Derechos de la Mujer y el Comité sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales, entre otros). La OPS ofreció sesiones de información técnica a la CIDH y otros comités acerca del derecho a la salud y otros derechos humanos de las personas con discapacidades, personas infectadas por el VIH y personas que padecen trastornos mentales, y sobre la desnutrición en niños indígenas.